Mazón logra su hito de mitad de legislatura: Tiene presupuestos, Sánchez no y su apuesta es la gestión
El presidente de la Generalitat marca objetivos: “A trabajar, a trabajar, a trabajar”
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Carlos Mazón logró ayer su hito de mitad de legislatura. Tiene presupuestos con el apoyo de Vox. Tras un inicio con notable apoyo social y empresarial, la DANA rompió todos los esquema de la legislatura, la gestión de la catástrofe se convirtió en el objetivo de todas las recurrentes críticas y la anomalía institucional aderezó una relación entre administraciones tan necesaria como inexistente para la reconstrucción tras la riada.
El foco de Mazón desde el inicio de la reconstrucción se centró en la gestión, logrando notables ventajes comparativas entre la eficiencia en la tramitación de sus ayudas, lo que contrastró con los retrasos de las de Pedro Sánchez, con el consorcio como principal lastre del Gobierno de España.
Ahora se cumplen siete meses de la DANA, lo que para la izquierda es una aliciente para renovar el “Mazón dimisión” como mantra. Para el PP es también el ecuador de una legislatura en la que el objetivo se ha reformulado para la reconstrucción. El foco vuelve a centrarlo en la gestión. Ésta es la carta que va a jugar Carlos Mazón como presidente de la Generalitat.
“A trabajar, a trabajar, a trabajar”, fueron las últimas palabras del presidente de la Generalitat cerca de la medianoche cuando marcó la aprobación de los presupuestos como el punto de inflexión necesario para los ciudadanos de la Comunidad Valenciana afectados por la DANA y, también, para los que no lo estuvieron.
El marco mental que propone Mazón es diferenciar su administración con presupuesto aprobado y la gestión focalizada en la reconstrucción frente a la de Pedro Sánchez, sin ni siquiera proyecto de presupuestos conocido y poniendo trabas a la recuperación de Valencia al negar ayudas directas y liquidez.
El primer gesto de Carlos Mazón tras aprobarse el presupuesto fue desplazarse al centro del hemiciclo para estrechar la mano de José Luis Llanos, sindic de Vox. El segundo fue el símbolo del pulgar hacia arriba con señal recíproca con su jefe de gabinete, José Manuel Cuenca. Señales de victoria.
La cara de portero goleado de PSOE y Compromís
El PSOE y Compromís acabaron el debate de prespuestos con cara de porteros goleados. Tras 12 horas de debate parlamentario (de 10 a 22), empezaron 70 minutos de incesante mezcla de gritos de “si” y “no” en los que siempre salieron perdiendo. “Se rechazan todas las enmiendas del PSOE”, decía la mesa. “Se rechazan todas las enmiendas de Compromís”, añadía. “Se aprueba la sección … (del presupuesto)”, concluía para volver iniciar la misma cantinela.
Tras ratificarse en el parlamento que todos los deseos de la oposición son papel mojado, José Muñoz, sindic del PSPV, incorporó a su argumentario que “no es normal que se lleve un debate a las once y veinte” mientras que consideró que Mazón “desde el 29 de octubre está en un proceso de supervivencia política”.
La propuesta de Muñoz es decir “Mazón dimisión” y alentar al PP con un “jaléen al líder porque este es su último presupuesto porque el año que viene no estará aquí seguro”. La sensación que transmite es la del perdedor del partido que busca excusas ya que su rival político le supera.
Durante toda la jornada parlamentaria, el runrún por los pasillos fue el deseo de la izquierda de que una vez se aprobaran los presupuestos se abriría una puerta para la salida de Mazón. El hito de los presupuestos se cumplió y el anhelo infundado se desvaneció. Esto no hizo más que aumentar la frustación del que considera imposible que su equipo pierda.
Por eso, cuando a Aitana Mas, de Compromís, le tocó cerrar el debate parlamentario para la explicación de su voto su mensaje ajeno al presupuesto fue: “Son un gobierno en fallo, convoquen elecciones”. El deseo es el del que quiere reiniciar el partido porque la legislatura no avanza según sus intereses.
Por parte del PP, Juanfran Pérez Llorca apuntó dos mensajes en el cierre final del debate relevantes. Coloreó a Diana Morant, secretaria general del PSPV y ministra de Pedro Sánchez, cuando prometió apoyo a los presupuestos de Mazón porque los políticos debían tener “como prioridad única y absoluta ayudar a la ciudadanía”El segundo fue apuntalar el que va a ser mensaje del PP en lo que quede de legislatura de Pedro Sánchez: “Con presupuesto, recuperación. Sin presupuesto, mediocridad”.
