Liderar en tiempos de incertidumbre: el valor de un Executive MBA para directivos españoles
En una realidad económica que no deja margen a la improvisación, los Executive MBA aportan la brújula que necesitan los líderes para anticipar, actuar con ética y mantener el rumbo ante la incertidumbre
La economía española avanza entre curvas. Inflación persistente, encarecimiento del crédito, tensiones geopolíticas y una digitalización que no da tregua. En este escenario, los directivos afrontan el reto de liderar con criterio cuando las reglas del juego cambian en periodos breves de tiempo. Y mientras la incertidumbre se multiplica, crece también el interés por una formación que ayude a transformar esa complejidad en oportunidad: el Executive MBA.
Liderar en la incertidumbre
El último informe CEO Outlook Pulse Survey de EY refleja un dato revelador: siete de cada diez directivos españoles prevén transformaciones estructurales en los modelos de negocio durante los próximos años. La capacidad de adaptación, junto con el pensamiento estratégico y el liderazgo ético, constituye hoy uno de los factores clave del éxito empresarial.
Jesús López, subdirector académico del EMBA de la Cámara de Comercio de Valencia, resume el papel actual de las escuelas de negocios: “Hoy son agentes del cambio económico, no simples formadoras de ejecutivos”. En su opinión, el futuro de la formación directiva se apoyará en cuatro ejes: ética, globalización, innovación y sostenibilidad. Una hoja de ruta que refleja la evolución de la figura del directivo en un mundo donde la reputación, el propósito y el impacto social de las empresas son ya tan relevantes como los resultados financieros.
La respuesta formativa del EMBA a un nuevo contexto
La formación Executive MBA está considerada en la actualidad como la herramienta más potente para los profesionales que ya dirigen equipos o unidades de negocio y necesitan actualizar competencias sin interrumpir la actividad profesional. A diferencia de programas generalistas, el Executive MBA se dirige a directivos experimentados que buscan proyectar su liderazgo hacia una dimensión más estratégica, sostenible y transformadora.
En España, programas como el Master MBA Executive de la Cámara de Comercio de Valencia se sitúan entre los más valorados por su combinación de contenidos estratégicos, liderazgo adaptativo e innovación aplicada. A lo largo del curso se abordan áreas como finanzas corporativas, sostenibilidad, reputación, transformación digital y gestión de intangibles, con un enfoque eminentemente práctico orientado a resultados.
“El aprendizaje en un EMBA cobra sentido cuando impacta directamente en la toma de decisiones”, apunta Jesús López. Los alumnos, explica, trasladan y aplican los conocimientos de inmediato en sus empresas, lo que transforma cada asignatura en un entorno de ensayo y mejora continua.
Formación, ética y propósito
Las crisis económicas de las últimas décadas, y en particular la financiera de 2008, dejaron una huella profunda en las escuelas de negocios. Desde entonces, los programas de formación ejecutiva han incorporado de forma explícita la ética, la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa en sus planes de estudio. La universidad de Harvard llegó incluso a impulsar un “juramento MBA” para reforzar el compromiso de los directivos con el bien común y con un liderazgo más responsable.
En España, esta tendencia se ha consolidado. Las escuelas de negocios que imparten programas Executive MBA defienden un modelo de liderazgo humanista, donde el beneficio económico se concibe inseparable del impacto social. “La gestión sin ética ni propósito deja de ser liderazgo”, subraya López. Por ello, los Executive MBA actuales incorporan módulos de ESG, innovación social y sostenibilidad corporativa, reflejando un cambio de paradigma que va más allá de la rentabilidad inmediata.
Inversión con retorno
Embarcarse en estudiar Executive MBA implica un esfuerzo económico y personal, pero la evidencia demuestra que la inversión compensa. Según un análisis de Estrategias de Inversión sobre el retorno de los programas MBA, los titulados en España perciben, de media, un salario un 30 % superior al de profesionales con la misma experiencia sin esta formación. Por otro lado, también acceden con mayor rapidez a puestos de alta dirección y a oportunidades laborales a nivel internacional.
Un aspecto a señalar es que el ROI de un Executive MBA, no se mide solo en euros. La red de contactos que se genera durante el programa, uno de los principales activos de este tipo de formación, constituye un recurso estratégico para los directivos. Según el Graduate Management Admission Council (GMAC), más del 85 % de los graduados de MBA reconoce que esta red ha tenido un impacto directo en su desarrollo profesional y en la creación de nuevas oportunidades laborales o empresariales.
Tal como recogía Economía Digital en un reportaje sobre la graduación del Executive MBA de EDEM Escuela de Empresarios, Juan Roig, presidente de Mercadona, subrayaba que “un empresario aislado está en desventaja; tiene que vincularse con otros empresarios y con el ecosistema”. Esa afirmación resume bien el valor de la red que proporcionan estos programas. En un mercado donde el talento se capta y se retiene a través de las relaciones profesionales, formar parte de una comunidad de antiguos alumnos con alcance global constituye una auténtica ventaja competitiva: ofrece acceso a información, proyectos y ecosistemas empresariales que no están al alcance de otros perfiles.
En este contexto, el Executive MBA de la Cámara de Comercio de Valencia representa un ejemplo claro de cómo equilibrar inversión y retorno. Con un coste aproximado de 8.500 euros y un formato part time, permite compatibilizar las clases con la actividad profesional y aplicar los conocimientos de forma inmediata, lo que acelera el impacto del aprendizaje en la carrera del directivo. Su metodología práctica conecta la teoría con los desafíos reales de la dirección empresarial, asegurando que el retorno no solo se traduzca en proyección salarial, sino también en una mejora tangible del desempeño y en una ampliación de las oportunidades profesionales.
El nuevo perfil del directivo español
Los ejecutivos que cursan un Executive MBA comparten una misma motivación: ampliar su visión sobre el funcionamiento y comprensión del mundo empresarial. Son profesionales que entienden que la rentabilidad y la sostenibilidad no son objetivos opuestos, y que liderar en un entorno incierto exige aprendizaje continuo y capacidad de adaptación para generar un cambio positivo en el entorno en el que toca desenvolverse.
En un momento en que las empresas necesitan más que nunca líderes capaces de anticipar riesgos y aprovechar oportunidades, la formación ejecutiva ha dejado de ser un complemento para convertirse en una verdadera decisión de estrategia corporativa, según destacan las principales escuelas de negocios. Por ello, el Executive MBA no solo prepara para gestionar la complejidad: enseña a transformarla en una ventaja competitiva mediante nuevas formas de dirección e innovación en la función empresarial.
Liderar en tiempos de incertidumbre no consiste en resistir, sino en avanzar con cautela cuando el mapa deja de ser claro. En esa travesía, la formación Executive MBA se asienta como una brújula fiable para quienes aspiran a dirigir con visión y propósito.