La nueva idea del banco Santander para rentabilizar su patrimonio inmobiliario: alquilará espacios por 8.000 euros al día

Santander España continúa fortaleciendo su modelo de negocio gracias a una gestión eficiente de su patrimonio inmobiliario. En este sentido, el grupo ha decidido poner en alquiler espacios de su sede corporativa situada en la calle Luca de Tena en Madrid, donde ofrece el auditorio y diferentes estancias interiores y exteriores para restauración por una tarifa de 8.000 euros al día, incluyendo servicios de seguridad, limpieza, aparcamiento y mobiliario.

El movimiento forma parte de un plan más amplio de diversificación y maximización de activos que la entidad ha venido desarrollando, especialmente desde la creación en 2024 de la filial Santander Group Properties, enfocada en la gestión integral de sedes corporativas y otros inmuebles de uso propio del banco en España y el extranjero.

Santander Group Properties agrupa cinco sociedades inmobiliarias participadas por el banco, con un valor contable neto cercano a 1.050 millones de euros.

Dentro de este portfolio se incluye la inmobiliaria que canaliza la construcción y gestión de la nueva sede que se está levantando en Miami, un proyecto valorado en 146 millones de euros.

Otro de los activos importantes bajo esta filial es Santander UK Investment, que controla una parte significativa de los inmuebles del banco en Londres, con un valor aproximado de 115 millones de euros.

En España, la filial más valiosa es la que administra los edificios corporativos del banco, con un valor que ronda los 785 millones.

Por otro lado, la antigua filial que gestionaba los centros deportivos en la Ciudad Financiera también forma parte de los activos en explotación comercial, valorada en aproximadamente 16 millones de euros, consolidando su contribución al rendimiento del patrimonio inmobiliario del grupo.

Santander: el negocio de sedes

Esta política de alquiler y gestión de inmuebles, tanto en España como en mercados internacionales clave, permite a Santander no solo generar ingresos adicionales, sino potenciar un modelo de negocio más sostenible y eficiente, mediante la reducción de espacios infrautilizados y el aumento de la ocupación en edificios emblemáticos.

El alquiler de espacios por valores de 8.000 euros diarios en la sede de Madrid y hasta 25.000 euros en la Ciudad Financiera de Boadilla del Monte demuestra el interés de terceros en acceder a instalaciones de alta calidad, ubicaciones estratégicas y servicios integrales de seguridad y mantenimiento.

El banco continúa apostando por mejorar la rentabilidad de su patrimonio inmobiliario, equilibrando los costes y beneficios, con planes que permiten compatibilizar el uso propiamente bancario con actividades comerciales y generadoras de valor.

Este modelo se enmarca en la visión de Santander para afrontar la transformación del sector financiero y sus recursos, adaptándose a nuevos entornos de trabajo y necesidades corporativas que demandan espacios polivalentes y bien gestionados.

Santander impulsa viviendas sostenibles

Por otro lado, para Banco Santander es clave su compromiso con viviendas sostenibles, promoviendo proyectos que priorizan la eficiencia energética, la rehabilitación del parque inmobiliario y la reducción de emisiones. La entidad ofrece soluciones financieras dirigidas a particulares, empresas y comunidades, fomentando un modelo residencial más ecológico y eficiente.

Entre sus iniciativas, la entidad aplica bonificaciones en los tipos de interés de hasta 10 puntos básicos para viviendas con mejor calificación energética. Además, cuenta con líneas especiales en colaboración con el BEI y el FEI para respaldar proyectos de construcción sostenible.

También facilita préstamos al consumo en condiciones preferentes para reformas de eficiencia energética, como la instalación de paneles solares, sistemas de climatización eficientes o mejoras en aislamiento, y financia con aval ICO rehabilitaciones integrales de edificios para comunidades de propietarios.

Con estas iniciativas, Banco Santander refuerza su papel en la transición energética y en el desarrollo urbano sostenible, alineándose con los objetivos de la Agenda Urbana 2030 y el Plan Nacional de Vivienda.