Esta famosa pastelería con casi 100 años de historia cierra definitivamente: no han encontrado inversores
La trayectoria de la emblemática cafetería madrileña se acerca a su fin a raíz de la complicada situación financiera que atraviesa
Madrid es una de las ciudades con una oferta gastronómica más diversa, con restaurantes con platos típicos del territorio nacional, pero también propuestas modernas y comida de prácticamente cualquier rincón del mundo. Sin embargo, los madrileños se quedarán sin los míticos emparedados, tartas de limón y merengue y galletas de la pastelería Embassy.
Tras su cierre definitivo, los madrileños se quedarán sin los míticos emparedados, tartas de limón y merengue y galletas de las pastelerías Embassy
La trayectoria de la histórica cafetería madrileña se acerca a su fin a raíz de la complicada situación financiera que atraviesa la empresa. En este contexto, la cadena conformada por seis establecimientos repartidos por varios puntos de la Comunidad de Madrid se ha visto abocada a anunciar el cierre definitivo de sus pastelerías.
Un histórico establecimiento
La pastelería forma parte de los recuerdos de numerosos madrileños, que se han dirigido hacia alguno de sus establecimientos para tomar un té, recorrer sus llamativos escaparates repletos de dulces o escuchar alguna de las historias que envuelven la historia del emblemático establecimiento emplazado en el Paseo de la Castellana.

Los orígenes de las pastelerías Embassy se remontan a 1931, cuando la irlandesa Margarita Kearney se aventuró a abrir su primera cafetería en la capital madrileña. Con la apertura de un establecimiento de estas características, se proponía traer a Madrid los elegantes salones de té y pastas típicos de su país de origen.
La irlandesa decidió bautizar el establecimiento con el nombre de ‘Embassy’ al encontrarse la cafetería ubicada cerca de las antiguas embajadas de Reino Unido y Alemania
El curioso nombre de la cadena de pastelerías procede de la zona de la ciudad en la que inauguró el primer establecimiento. Al encontrarse la pastelería cerca de las antiguas embajadas de Reino Unido y Alemania, dispuestas en el Paseo de la Castellana, la irlandesa optó por bautizar el establecimiento con el nombre de ‘Embassy’.
Las pastelerías ‘Embassy’, un refugio ante los nazis
Con el paso de los años, la historia de las cafeterías ha estado estrechamente ligada a la de los madrileños. Sin ir más lejos, las pastelerías ‘Embassy’ pusieron su granito de arena en la salvación de miles de judíos en el marco de la segunda guerra mundial, cuando la persecución nazi se extendió hasta España.

La fundadora de las cafeterías, de la mano del que entonces era el embajador británico en España, optó por convertir sus establecimientos en refugios para las personas que tuvieran una ideología contraria a los nazis, o bien, estuvieran perseguidos por el jefe de la Gestapo, Paul Winzer, y el jefe de la propaganda nazi en España, Hans Lazar.
Complicado estado financiero
Las pastelerías ‘Embassy’ atraviesan un delicado momento a raíz de su complicado estado financiero. Tras el estallido de la crisis sanitaria originada por la proliferación del coronavirus, la empresa no fue capaz de remontar su situación, que se ha visto agravada por la subida de los costes de las materias primas y la energía.
En cada una de las cafeterías se podían comprar bombones, ‘scones’ y una gran variedad de tartas de limón, fresas, manzana y amarenas. También contaba con una amplia oferta de sándwiches y bocados salados, un servicio de cátering y cócteles en barra de estilo americano.
Las pastelerías Embassy contaban con una amplia oferta de sándwiches y bocados salados, un servicio de cátering y cócteles en barra de estilo americano
A pesar de que los establecimientos bajaron sus persianas a mediados de año, desde la cadena aseguraron en todo momento que el cierre no sería definitivo, puesto que estaban negociando con los empleados y tenían intención de reabrir en un futuro.
Al no encontrar la financiación necesaria, finalmente el grupo se ha visto empujado a cerrar de forma definitiva los establecimientos desplegados en Núñez de Balboa, O’ Donnell, Santa Engracia, Aravaca, La Moraleja y Chamberí.