Nissan España apuesta por Ávila como fábrica de piezas para la Alianza

La dirección nacional de la automovilística promete alrededor de 150 nuevos puestos de trabajo si se le asignan los nuevos proyectos en los que trabaja

EFE/Raúl Sanchidrián

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En pleno proceso de cierre de su fábrica en Barcelona, Nissan trabaja para obtener nuevas adjudicaciones a la planta de componentes de Ávila. La instalación castellana ya sufrió su propio vía crucis en 2017, aunque logró salvarse al reconvertirse en un centro de recambios. Ahora, la dirección local trabaja para darle un papel más importante en la red que tiene en el Viejo Continente.

Según informó Nissan este viernes, los dos proyectos que tiene sobre la mesa son la fabricación de la estructura de las suspensiones de un nuevo modelo y la producción de paragolpes de recambio.

“El primero supone el aterrizaje de Nissan Ávila en la producción de piezas para la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, más allá de los recambios, un hito muy importante que no estaba previsto en la transformación original”, señaló el director de operaciones industriales, Javier Novo.

“El segundo nos da la oportunidad de convertir Nissan Ávila en un centro de operaciones de producción de paragolpes para la alianza en todo el sur de Europa”, añadió el directivo.

Nissan cambia de ubicación su centro logístico

Además, Nissan también hizo público un acuerdo con la Junta de Castilla y León para comenzar de forma inminente las obras del nuevo centro logístico de la empresa, que pasará de estar ubicado en Vicolozano al centro de Ávila CyLog. El nuevo emplazamiento está más cerca de la planta de producción y entrará en funcionamiento en 2022.

«Es una solución óptima para ambas partes, puesto que, por un lado, permite acelerar el proceso de construcción del centro logístico y permitirá a la empresa ser mucho más competitiva, flexible y rápida», añadió el consejero de Economía y Hacienda de la comunidad, Carlos Fernández Carriedo.

Mientras, el consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez-Quiñones celebró que el acuerdo supone «el afianzamiento del enclave logístico» y aprovecha así la «centralidad peninsular y las sinergias con los desarrollos logísticos de Madrid».

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