Santander y BBVA ocultan provisiones por gastos en hipotecas mientras CaixaBank, Unicaja y Kutxabank reservan más de 500 millones
Santander y BBVA evitan informar sobre las provisiones realizadas para atender las reclamaciones de clientes por gastos indebidamente cobrados en la formalización de hipotecas
La banca española afronta cientos de miles de reclamaciones de clientes por el cobro indebido de gastos en la formalización de hipotecas
Santander y BBVA ocultan en sus cuentas el impacto previsible en sus resultados de las reclamaciones de sus clientes por gastos en hipotecas indebidamente cobrados, mientras que CaixaBank, Unicaja y Kutxabank reservan más de 500 millones.
Los dos mayores bancos españoles evitan desvelar el importe provisionado para atender el alud de reclamaciones por los gastos cobrados a la hora de formalizar hipotecas, reclamaciones que sostienen jurídicamente tanto sentencias de la Justicia española como de la europea.
Mientras que CaixaBank, Unicaja y Kutxabank sí que informan sobre las cantidades provisionadas relacionadas con el asunto de los gastos cobrados por la firma de hipotecas, Santander y BBVA las ocultan, aunque admiten haber recibido decenas de miles de reclamaciones y haber incluido alguna provisión al respecto.
En total, de acuerdo a los informes de los distintos bancos españoles publicados y consultados por este diario, la banca española afronta cerca de medio millón de reclamaciones de los consumidores por esta cuestión.
Santander repasa en sus últimas cuentas semestrales el periplo judicial que ha abierto la posibilidad de que los consumidores recuperen gastos cobrados en la formalización de hipotecas.
Sin embargo, el banco presidido por Ana Botín oculta la cantidad provisionada para atender las reclamaciones de sus clientes. «La provisión registrada incluye la mejor estimación de la responsabilidad del Grupo para este asunto«, asegura el banco en sus últimos resultados.
«Los casos en que se han registrado una provisión, pero no se desglosa, se justifica en la adecuada defensa del Grupo», dice.
El primer banco español afronta no obstante decenas de miles de reclamaciones de consumidores por esta cuestión, más de 50.000, según se desprende de datos aportados en informes y documentos presentados por la entidad ante el regulador del mercado español.
En el Documento de Registro Universal publicado por Santander este año en la CNMV, el banco informa que en 2024 recibió en España 156.460 reclamaciones, frente a las 88.326 recibidas en 2023.
«España incrementa por las reclamaciones de gastos de formalización de hipotecas. Incluye Open bank S.A», precisa el grupo en el mismo documento.
BBVA tampoco desglosa el importe provisionado para atender reclamaciones de clientes por gastos cobrados en la formalización de hipotecas en sus cuentas.
El banco presidido por Carlos Torres apunta en su Documento de Registro Universal presentado el pasado mes de abril ante la CNMV, que el ratio de reclamaciones de clientes se incrementó en 2024 un 6% respecto a 2023.
«El principal motivo ha sido la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), en relación a la devolución de los gastos de formalización de préstamos hipotecarios en España (…) y que ha supuesto un incremento del 59% de las reclamaciones en España», admite.
BBVA recibió 270.000 reclamaciones en España en 2024, 100.000 más que las recibidas en 2023.
Las provisiones y reclamaciones que afrontaría BBVA por las reclamaciones de consumidores por los gastos cobrados en hipotecas, sería aun mayor en el caso de culminar con éxito la opa hostil lanzada sobre Sabadell, inferiores previsiblemente en todo caso a un importe de 80 millones de euros.
Sabadell recibió 104.000 reclamaciones de sus clientes en 2024, frente a las 54.884 recibidas en 2023
Al igual que Santander y BBVA, el banco presidido por Josep Oliu opta también por ocultar las provisiones efectuadas por este asunto.
No obstante, el banco catalán informa en su Documento de Registro Universal presentado este año ante la CNMV que, a 31 de diciembre de 2024, las provisiones registradas por litigios ascienden a 281 millones de euros.
De dicha cantidad, Sabadell precisa que las provisiones por contingencias legales ascienden a 166 millones, y las provisiones para la cobertura de los gastos previstos por planes de restructuración, a 56 millones.
Y entre las provisiones por contingencias legales, 71 millones de euros responderían a reclamaciones por cláusulas suelo, y otros 81 millones de euros a «reclamaciones de clientes relacionadas con la restitución de los gastos de constitución de hipotecas«, además de reclamaciones por fondos de entrega a cuenta de promotores e intereses de tarjetas abusivos.
Sabadell admite haber recibido durante 2024 más de 100.000 reclamaciones de sus clientes, frente a las 54.884 recibidas en 2023, un incremento motivado «por el aumento de un 360% de las reclamaciones recibidas en relación con los gastos de tasación/otros gastos de formalización», señala.
CaixaBank, Unicaja, Kutxabank
Mientras que los dos mayores bancos españoles, también Sabadell, no precisan las provisiones efectuadas por reclamaciones previstas por gastos cobrados en la formalización de hipotecas, CaixaBank, Unicaja y Kutxabank admiten provisiones superiores en total a los 500 millones de euros.
CaixaBank informa en sus últimos resultados semestrales, que, a 30 de junio de 2025, «cuenta con una provisión constituida para cubrir esta contingencia de 332 millones«.
El banco dirigido por Gonzalo Gortázar dice en las mismas cuentas que, en materia de litigios por condiciones generales, «principalmente vinculadas a la concesión de préstamos hipotecarios a consumidores [entre ellos, los gastos hipotecarios] se mantienen las provisiones necesarias y el Grupo mantiene un constante diálogo con clientes para, caso a caso, explorar acuerdos».
En su Documento de Registro Universal, publicado este año en CNMV, CaixaBank informa que en 2024 recibió 343.973 reclamaciones de sus clientes, prejudiciales, frente a 103.754 reclamaciones recibidas en 2023.
Unicaja asegura en sus últimos resultados semestrales que se encuentran constituidas «las provisiones que se estiman necesarias» para cubrir las reclamaciones de clientes por gastos cobrados en la firma de hipotecas. «En este sentido», añade, «el grupo tiene constituida para cubrir este riesgo una provisión de 103 millones de euros a 30 de junio de 2025».
Durante 2024, el departamento de atención al cliente de Unicaja gestionó 95.562 quejas y reclamaciones, frente a las 56.494 de 2023.
«Este incremento estuvo influido por un aumento significativo de reclamaciones relacionadas con gastos hipotecarios y cláusulas suelo, fundamentalmente, motivado por decisiones judiciales y la difusión de información en medios de comunicación sobre fechas límite para reclamar, incidencias por tanto comunes para todo el sector financiero», afirma Unicaja en su informe financiero de 2024.
Kutxabank informa en su último informe financiero anual que en 2024 realizó «una dotación adicional» por el caso de las reclamaciones de los clientes por gastos en la formalización de hipotecas, por importe de 112,78 millones de euros, frente a los 38 millones provisionados en 2023.
La entidad vasca recibió el pasado año 87.474 reclamaciones, frente a 25.697 en 2023.
Una década en los tribunales
Los clientes de la banca española llevan reclamando la devolución de determinados gastos cobrados a la hora de firmar una hipoteca desde hace diez años.
En diciembre de 2015 el Tribunal Supremo declaró abusiva toda cláusula que hiciera recaer sobre el cliente el pago de todos los gastos generados en el otorgamiento y constitución de la hipoteca.
A partir de ahí, distintas sentencias del Supremo fueron precisando los gastos con los que tenía que cargar la entidad financiera, y no el cliente, y diversos Juzgados solicitaron aclaraciones y mayor detalle al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE).
El TJUE dictó tres sentencias el pasado año, una con fecha 25 de enero de 2024 y dos en fecha 25 de abril de 2024, que resolvían las cuestiones prejudiciales elevadas por la Audiencia Provincial de Barcelona, el Tribunal Supremo y el Juzgado de Primera Instancia 20 de Barcelona.
El Supremo interpretó dichas resoluciones conforme al derecho nacional, dictando sentencia en fecha 14 de junio de 2024, estableciendo que el día inicial del plazo de prescripción de la acción de restitución de gastos hipotecarios indebidamente pagados por un consumidor será el de la firmeza de la sentencia que declara la nulidad de la cláusula que obligaba a tales pagos.
El Supremo cerró así el debate jurídico al entender que el plazo de prescripción de cinco años para reclamar las cantidades pagadas a terceros, empieza con la firmeza de la sentencia que declare la nulidad de la cláusula individual de cada consumidor, «aunque el Banco pueda acreditar con prueba directa que el consumidor conocía la nulidad de la cláusula antes de que se dictara esa sentencia, en cuyo caso el plazo de prescripción empezaría a contar desde ese conocimiento acreditado», explica Kutxabank.