Actualizado
Cándido Hermida, el carpintero de Amancio Ortega, sale de pérdidas, pero aún no cumple su plan de negocio
La principal sociedad del grupo de carpintería con sede en Narón logra dejar atrás los números rojos, con un beneficio de dos millones aunque advierte de un inicio de año complicado

Cándido Hermida, en una foto de archivo con el exconselleiro de Industria de la Xunta, Francisco Conde
Cándido Hermida, el grupo del histórico carpintero de las tiendas de Inditex con base de operaciones en Narón, endereza el rumbo. Su principal sociedad, Industrias Cándido Hermida, acabó el ejercicio 2024 con un beneficio neto de algo más de dos millones de euros, frente a las pérdidas de 3,4 millones anotadas el año precedente. Eso sí, la vuelta al negro está influenciada por una fuerte política de contención de gasto, ya que la cifra de negocio de la filial se contrajo desde los 64,5 a los 53,3 millones de euros, un 21% menos.
El resultado de explotación, el propio de la actividad de la compañía, pasó de un negativo de 3,2 millones de euros a un positivo de 3,1 millones, mientras que el Ebitda, resultado antes de impuestos, tasas, amortizaciones y depreciaciones, alcanzó un importe de 3,9 millones. Según la información remitida al Registro Mercantil y consultada por Economía Digital Galicia, la compañía amplió su patrimonio neto el pasado año de 2 a algo más de cuatro millones de euros.
Difícil inicio de año
Explican los administradores de la firma en el informe de gestión que acompaña a su memoria anual que la compañía “ha tomado la decisión estratégica de acometer nuevas prospecciones de mercado junto al lanzamiento de nuevas líneas de negocio” con lo que ha logrado “alcanzar unos niveles significativos de cartera a ejecutar en los próximos ejercicios”. “Los esfuerzos organizativos que se están realizando evolucionan según la línea estratégica establecida, al mejorar sustancialmente la productividad de la mano de obra, logrando controlar los aspectos más significativos de la producción, como los aprovisionamientos”, exponen.
Industrias Cándido Hermida estableció un plan de negocio para el periodo 2024-2026 con unas magnitudes que aún no logra cumplir, si bien el pasado ejercicio se acercó a las magnitudes marcadas. El inició de 2025 fue más complicado.
A fecha de marzo de 2025, la compañía se anotaba un Ebitda de 43.000 euros frente a su plan de conseguir en esta altura una cifra de 1,9 millones. “El Ebitda para este periodo ha caída de manera acusada, por debajo de la hipótesis de referencia”, exponen los administradores de la firma, que indican, no obstante, “que se estima que a lo largo del ejercicio se inicia una vuelta a los resultados positivos y a la senda del beneficio, tal y como se había logrado en el ejercicio anterior”.
De Zara a los astilleros
En cuanto a las perspectivas para el ejercicio, queda claro la importancia de los pedidos de la multinacional de Marta Ortega. “El grupo proyecta un incremento de la cifra de negocios soportado, principalmente, en la ejecución de proyectos singulares y el crecimiento del negocio con el grupo Inditex”, expone.
En el área de negocio de mobiliario, la previsión es llegar a los 38,7 millones este 2025, ya que “se estima un incremento progresivo del volumen de facturación con Inditex”.
También se esperan más avances en el área de “naval-astilleros” que ha sido clave también en el reflote de la compañía. “Tras la ejecución de diversos proyectos para los astilleros Chantiers de rAtlantique y Meyer, se prevé la formalización de nuevos pedidos, así como la fabricación de mobiliario para yates de lujo a Sunseeker, que supondrán una facturación de 13,74 y 19,51 ME para los ejercicios 2025 y 2026, respectivamente”, indican.
La rama de proyectos singulares también se ha revitalizado con el proyecto Rosellini y la firma de un nuevo contrato por 42,12 millones de euros, cuya finalización se estima para noviembre de 2026. Para este año, se calculan unos ingresos de cerca de 15 millones.