Crematorios gallegos incineran cadáveres procedentes de Madrid

La situación de colapso de los servicios funerarios de Madrid por el coronavirus hace que lleguen a crematorios gallegos cuerpos para incinerar

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Crematorios gallegos participan en la incineración de cadáveres procedentes de Madrid ante el colapso de los servicios funerarios de la capital española debido a los fallecidos por la pandemia de coronavirus. Fuentes de las funerarias gallegas han confirmado que han recibido cuerpos para proceder a su incineración en diversos centros repartidos por la comunidad.

Albia, una empresa del grupo Santalucía con centros por todo el territorio español y en las cuatro provincias gallegas, es la que más incineraciones de cuerpos procedentes de Madrid está realizando.

La compañía enfatiza que el traslado del cadáver se hace siempre con “autorización” de la familia. «La red de centros funerarios de Albia se ha puesto al servicio de la emergencia sanitaria para reforzar el servicio en las comunidades más afectadas, y especialmente en la Comunidad de Madrid. Los centros de Galicia participan igual que el resto de centros en función de la disponibilidad, necesidades y la voluntad de las familias«, explican en la empresa.

La portavoz de Albia destaca que el protocolo está «muy bien definido» y no es «nuevo», pues no es extraño que se trasladen cuerpos desde Madrid a Galicia en el caso de personas de orígenes gallegos que viven en la capital española.

Fuentes del sector coinciden en que son procesos muy regulados y en los que casi no existen “errores”. Lo habitual en este tipo de casos, explican, es el traslado en furgones fúnebres y tanto los cadáveres como los sudarios e incluso los ataúdes están «perfectamente identificados» antes de proceder a la incineración, con el fin de evitar cualquier fallo.

Galicia, sin medios extaordinarios por el menor impacto del virus

Albia, por su parte, incide en la «excepcional situación» causada por la crisis sanitaria del coronavirus. Una situación que ha derivado, según las informaciones publicadas en las últimas semanas, en un colapso de los servicios funerarios en el caso de Madrid y en retrasos significativos, por ejemplo, en las incineraciones.

En esta coyuntura, la compañía funeraria apunta que «está poniendo a disposición todos sus recursos para garantizar la continuidad de un servicio fundamental para la sociedad». Por ello, ha «reforzado» plantillas, aumentado la flota y también el resto de capacidades «materiales y logísticas» en aquellas localidades que ha hecho falta.

No es el caso de Galicia, según remarca Albia, ya que en la Comunidad –cuya tasa de letalidad dista de la de Madrid– «actualmente no está siendo necesario ningún medio de soporte extraordinario» para dar servicio a sus centros, que operan «con normalidad».

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