El negocio ‘oculto’ del dueño de Rodman: terrateniente con dehesa y aeródromo para cacerías
A través de Alfa Europa, Manuel Rodríguez, presidente de los astilleros Rodman, proyecta un aeródromo en Zamora ubicado al lado de un gran espacio cinegético explotado por la misma sociedad
Manuel Rodríguez, presidente de Rodman
Del mar al monte. Los negocios del histórico empresario vigués Manuel Rodríguez son diversificados (y unos mucho más conocidos que otros). Presidente del grupo Rodman de construcción naval, en la actualidad, proyecta un aeródromo privado en Zamora a través de la sociedad Alfa Europa Eco, domiciliada en la ciudad olívica y en la que también ostenta la presidencia, según los datos del Registro Mercantil. Según apunta la prensa de Castilla y León, esta infraestructura se situaría al lado de una gran dehesa, propiedad de la misma firma.
La página del Ministerio de Transición Ecológica sobre consultas públicas de evaluaciones ambientales expone en estos momentos un proyecto para la construcción de un aeródromo que se ubicaría en la dehesa de Valmasedo, espacio comprendido entre los términos de Tábara, Faramontaos, Burganes de Valverde y Friera de Valverde. El mismo, según la información publicitada por el departamento de Teresa Ribera, tiene como empresa promotora a Alfa Europa Eco.
Esta firma se presenta en su página web como una empresa familiar cuyas actividades van desde la gestión empresarial a los servicios de intermediación inmobiliaria y a la “actividad agrícola y cinegética”. Dentro de los negocios que desarrolla en este segmento de negocio se encuentra “la recuperación de la dehesa de Valmasedo, una finca de unas 900 hectáreas situada en la provincia de Zamora, y su transformación en un complejo de explotación agropecuaria, ganadera y cinegética”. “La iniciativa incluye una explotación cinegética especializada tanto en la caza mayor como en la caza menor”, apuntan.
Los números de Alfa Europa
Según las últimas cuentas remitidas al Registro Mercantil, la sociedad, con 19 millones de euros en activos, cerró el año 2020 con unos ingresos de 433.000 euros, frente a los 479.999 de 2019 y unas pérdidas de 246.000 euros (217.000 el ejercicio precedente). Los administradores de la compañía indican en su memoria, no obstante, que los números rojos no anticipan problema alguno “para atender a las deudas en las fechas de sus respectivos vencimientos”.
También indican que durante los dos últimos ejercicios, la actividad principal de la sociedad consistió en “la prestación de servicios de asesoría, dirección y gestión a empresas del grupo Abada”, la patrimonial del propio Manuel Rodríguez, y a la explotación agrícola y cinegética “para lo que posee terrenos y construcciones en la provincia de Zamora”.
En cualquier caso, la denominada actividad cinegética aún es menor para el negocio, ya que los ingresos derivados de la misma fueron de unos 30.000 euros el año de la pandemia.
Facilitar la llegada de cazadores
A principios de año, La Opinión de Zamora ya daba cuenta de la intención de la compañía de Manuel Rodríguez, indicando que el aeródromo servirá “para facilitar la llegada de cazadores al coto privado de la Dehesa de Valmasedo”. Según este medio, el terreno ahora bajo la gestión del empresario vigués estuvo, anteriormente, vinculado a la familia Martínez de Irujo.
Según adelantaron los medios zamoranos, el aeródromo contaría con una pista de aterrizaje de 1.350 metros de largo por 60 de ancho para facilitar la llegada de los cazadores. El proyecto constructivo no ha estado exento de críticas: contó con la oposición de Ecologistas en Acción, colectivo que anunció a principio de año que había presentado alegaciones al expediente de evaluación de impacto ambiental simplificado, al entender que no se habían tenido en cuenta la posible afección de los vuelos en la avifauna de la zona, así como los riesgos de contaminación del aire y de incendios.
Presidente del Círculo de Empresarios
Tanto la dehesa como el aeródromo en trámites forman parte de los negocios más desconocidos, al menos en la comunidad gallega, del dueño del grupo Rodman, que este miércoles fue nombrado nuevo presidente del Círculo de Empresarios Galicia, cargo que mantendrá durante los próximos tres años. Su proclamación, por votación unánime, se produjo en el transcurso de una asamblea general extraordinaria de socios, que fue clausurada por el vicepresidente económico de la Xunta, Francisco Conde.
A pesar de la crisis pandémica, durante el pasado año, el grupo Rodman vio cómo su astillero en Moraña, Rodman Polyships, era capaz de regresar a beneficios tras las pérdidas acuñadas en 2019.
