La antigua Vulcano entra en el mercado de las velas rígidas para descarbonizar barcos

El astillero vigués San Enrique diversifica su actividad con un contrato para la instalación de tres velas de succión en el buque ro-ro 'Ville de Bordeaux'

Instalación de velas fijas de succión en un buque ro-ro realizada en el astillero vigués San Enrique, del grupo Marina Meridional

Instalación de velas fijas de succión en un buque ro-ro realizada en el astillero vigués San Enrique, del grupo Marina Meridional

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El astillero vigués San Enrique abre un nuevo mercado. La antigua Factorías Vulcano ha ampliado su actividad para pasar a abarcar la instalación de velas de succión, con un contrato para la instalación de tres de estas velas en el buque ro-ro Ville de Bordeaux, según ha informado el grupo empresarial al que pertenece, Marina Meridional, que capitanea el empresario José Alberto Barreras.

San Enrique cerró el contrato para la instalación de tres velas eSAILS diseñadas por la empresa española Bound4blue en este barco, de 150 metros de eslora. Las velas tienen 22 metros de altura y cubren una parte significativa del consumo energético del buque, como complemento a su propulsión, contribuyendo a reducir el consumo de combustibles fósiles.

El Ville de Bordeaux cubre una ruta entre Europa y América del Norte y ha apostado por esta tecnología para avanzar en la descarbonización. A finales del año pasado, el astillero vigués recibió las tres velas para proceder a su instalación, que se ha realizado hace unos días, a la llegada del barco de Estados Unidos.

Así, el 27 de febrero pasado se realizó la instalación mediante dos grúas de gran tonelaje ubicadas en las gradas del astillero en Vigo. Una vez colocadas, se conectaron los controles de las velas y se llevaron a cabo los ajustes pertinentes.

Se trata de las primeras velas fijas de succión instaladas en un buque del segmento ro-ro y se estima que su instalación supondrá un ahorro de hasta 560 toneladas anuales de combustible, lo que equivale a 1,800 toneladas de emisiones de CO2. Con este movimiento el astillero San Enrique da un nuevo paso en su plan de diversificación de actividad y abre nuevos mercados.

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