Sandra Ortega triplica las ganancias de sus antiguas sicavs, que mueven casi 500 millones
Más allá de los dividendos de Inditex y del negocio inmobiliario, la heredera de Rosalía Mera también invierte a través de las sociedades Breixo Inversiones y Soandres de Activos, que cerraron 2024 con unas ganancias de casi 32 millones

Sandra Ortega junto a su marido en una de las escasas fotografías de la hija de Amancio Ortega y Rosalía Mera. EFE.
Más allá de los dividendos que le reporta su participación de un 5% en el capital de Inditex y de los ingresos que generan las rentas de sus activos inmobiliarios, una parte de la fortuna de Sandra Ortega, la empresaria más rica de España, heredera de Rosalía Mera, procede de sus inversiones financieras a través de distintos vehículos. De hecho, la hija mayor de Amancio Ortega mueve a través de las sociedades Breixo Inversiones y Soandres de Activos casi 500 millones de euros. Se trata de dos firmas que en el pasado fueron sicavs, sociedades de inversión en capital variable y que, tras el cerco del Gobierno a estos instrumentos de inversión, fueron transformadas en sociedades de responsabilidad limitada. El pasado año, ambas firmas arrojaron un beneficio neto conjunto de 31,7 millones de euros, prácticamente triplicando el resultado del ejercicio precedente.
El año 2022, Ortega Mera, igual que otros grandes patrimonios del Estado español, optó por liquidar sus sociedades de inversión de capital variable tras la puesta en marcha de la Ley de Medidas de Prevención y Lucha contra el Fraude Fiscal que pretendía garantizar que todos los accionistas de estas sociedades, cien como mínimo, tuviesen una aportación real de, al menos, 2.500 euros. Una maniobra para tratar de desterrar a los mariachis, como se denomina en argot financiero a los hombres de paja que acompañan en estas sociedades a un único inversor que acapara más del 99% del capital social.
La normativa estatal estableció que si la sicav no era capaz de cumplir el requisito de los 2.500 euros por accionista tenía dos opciones: o bien darse de baja o bien pasar a tributar al 25% en el Impuesto de Sociedades y abandonar así su beneficio del 1%. En este escenario, la heredera de Rosalía Mera optó por echar la persiana a su sicav Soandres de Activos así como a su sociedad de inversión libre, Breixo. En realidad, Rosp Corunna, el grupo de la empresaria coruñesa, optó por transformar ambos vehículos en sociedades de responsabilidad limitada.
Años de turbulencias
Su último año como sicavs, el 2022, fue complicado, debido al golpe de la inflación y las consenciencias en los mercados derivadas de la guerra de Ucrania y las tensiones geopolíticas. Soandres de Activos se anotó unos números rojos de 18,3 millones de euros frente a los 15 millones de beneficio del año precedente mientras que Breixo vió cómo sus ganancias se derrumbaron de 17,2 a 4,7 millones.
Al año siguiente, ya como sociedades de responsabilidad limitada, lograron darle la vuelta al calcetín. Breixo se anotó un neto de 5,6 millones y Soandres un beneficio de algo más de cinco millones.
Los números de sus ex sicavs
El pasado 2024, ambas sociedades volvieron a erigirse en dos de las sociedades más rentables de Rosp Corunna, al lograr unos beneficios conjuntos de más de 30 millones de euros. Con un patrimonio neto que pasó de 227,7 a 247,8 millones, el beneficio neto de Breixo se elevó hasta los 20 millones de euros, rozando los 25 millones su resultado de explotación.
Soandres, por su parte, vio cómo su patrimonio se incrementaba a los 242 a los 253 millones mientras las ganancias netas de la sociedad se duplicaban hasta los 11,7 millones, ascendiendo el resultado de explotación a 274,6 millones. Soandres, por su parte, vio cómo su patrimonio se incrementaba a los 242 a los 253 millones mientras las ganancias netas de la sociedad se duplicaban hasta los 11,7 millones, ascendiendo el resultado de explotación a 15,6 millones.