Alfombra roja de PP y PSOE para las hidroeléctricas de bombeo, como las de Reganosa, Iberdrola y Magtel

El Parlamento gallego pide que las centrales hidroeléctricas reversibles se declaren de interés público superior por una iniciativa del PP apoyada por el PSdeG

Vista general del Lago de As Pontes, embalse que nació de la transformación de la mina de lignito a cielo abierto que Endesa tenía en la ciudad coruñesa. EFE/Kiko Delgado

Vista general del Lago de As Pontes, embalse que nació de la transformación de la mina de lignito a cielo abierto que Endesa tenía en la ciudad coruñesa. EFE/Kiko Delgado

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A raíz de una iniciativa del PP, que ha contado con el apoyo del PSdeG, el Parlamento gallego pide declarar de interés público superior las centrales hidroeléctricas reversibles. La crisis energética y las ayudas a los proyectos de transición ecológica impulsaron a numerosas empresas a desarrollar este tipo de centrales, como la que plantea Iberdrola en Villariño de Conso o los proyectos de Magtel y Reganosa para el lago de Endesa en As Pontes.

Además, la Cámara demanda que se garantice la construcción de las infraestructuras de almacenamiento necesarias, «siempre que no supongan nuevos obstáculos al lecho de una masa de agua superficial», según destacan los populares gallegos.

La diputada del PPdeG, Marta Nóvoa, ha explicado en la comisión de industria que «deberá realizarse un análisis, caso por caso, garantizando que se tomen todas las medidas para paliar posibles efectos desfavorables sobre el medio, que exista un interés público superior y que no exista otra solución técnica que sea ambientalmente mejor».

La socialista Begoña Rodríguez Rumbo se ha mostrado a favor de la propuesta ya que «da cumplimiento» a las directrices europeas, y ha subrayado la relevancia de que se haga «con todas las garantías medioambientales».

Por su parte, el Bloque ha mostrado su rechazo a la iniciativa. La diputada Noa Presas ha manifestado su desconfianza ante las intenciones del grupo mayoritario, entre sospechas sobre si será un intento de «legitimar» una posterior modificación a través de la ley de acompañamiento a los presupuestos

Plan de contingencia

El plan de contingencias y medidas energéticas que la Xunta remitió el pasado 1 de septiembre al Ministerio para la Transición Ecológica aparecen las hidráulicas reversibles como una gran apuesta para el almacenamiento de energía.

Tal y como figura en el documento estos sistemas «permiten disponer de una alternativa tecnológicamente madura y de uso y aprovechamiento tanto para el almacenamiento energético estacional, como diario u horario, aportando una gran flexibilidad, eficiencia y seguridad al sistema». 

El Gobierno autonómico propuso en su plan de actuación el desarrollo de mecanismos de ayuda e incentivos a grandes proyectos de almacenamiento energético que contribuyan a «una adecuada gestión de un mix energético basado en fuentes renovables de energía», especialmente aquellos relacionados con el almacenamiento de energía hidráulica por bombeo.

Características de las hidroeléctricas por bombeo

El principal elemento diferenciador de estas construcciones es que fueron ideadas para almacenar agua en los momentos de menor demanda y aprovecharla para generar energía en las horas de mayor consumo.

Estos tipos de centrales eléctricas, que llevan aparejada una gran potencia, se basan en la conexión de dos embalses situados a distintas alturas. Esto permite el almacenamiento de agua en los momentos de menor demanda y el bombeo para generar energía en las horas en las que el consumo se incrementa.

En los periodos en los que el consumo es menor, la energía sobrante se usa para elevar el agua del embalse más bajo a la presa superior mediante un sistema de conexiones que unen ambas masas. Así, el embalse con una localización más alta es empleado como un depósito de almacenamiento.

Por el contrario, en los momentos de mayor demanda, el funcionamiento es igual que el de una central hidroeléctrica convencional  y el agua acumulada del embalse superior se pasa a la presa inferior. En ese salto, el agua adquiere energía cinética que, posteriormente, se transforma en energía mecánica rotatoria en una turbina hidráulica. A su vez, esta se convertirá en energía eléctrica de media tensión y alta intensidad en un generador.

El siguiente paso consiste en que los transformadores envíen la electricidad producida en la central hidroeléctrica por las líneas de transporte de alta tensión hasta los consumidores.

Economía Digital Galicia

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