Mascarillas o pantallas faciales: ¿cuál es más recomendable?
La nueva normalidad conlleva el uso obligatorio de protecciones en la vía pública con el objetivo de reducir al máximo la propagación de la Covid-19
La ‘nueva normalidad’ tras la pandemia de coronavirus conlleva seguir manteniendo algunas precauciones para evitar la propagación de contagios, en especial, tras los rebrotes que se suceden en distintos territorios en las últimas semanas. En este punto, las autoridades sanitarias estipulan el uso obligatorio de mascarillas, aunque han surgido alternativas como las pantallas protectoras faciales para evitar la posible transmisión de la Covid-19.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitaria, Fernando Simón, portavoz gubernamental en el día a día durante la crisis sanitaria, se refirió al uso de estos protectores al ser cuestionado durante una de sus comparecencias. «Todo aquello que evite que las gotas [vía de transmisión del coronavirus] lleguen a otras personas favorecen una reducción de la transmisión».
Sin embargo, Simón alertó entonces de que «probablemente no sean el mecanismo más perfecto» para reducir los riesgos de contagio. «Recuerden que a través de las manos se pueden infectar», explicó el epidemiólogo.
En este sentido, Sanidad recomienda que, si se opta por el uso de protectores faciales como las pantallas, se acompañen del uso de mascarillas. «Es cierto que de alguna forma reducen los riesgos. Lo que buscamos es la reducción al máximo. Una mascarilla reduce, pero una visera reduce menos, aunque puede ayudar», dijo Simón.
Las pantallas, solo para algunos ambientes
El Ministerio de Sanidad recomienda en su protocolo para la nueva normalidad que las pantallas se empleen especialmente en aquellos trabajos en los que se empleen, por ejemplo, productos como aerosoles.
De igual forma, el departamento que dirige Salvador Illa recomienda usar tanto las viseras faciales como las mascarillas, ya que mientras las primeras sirven de protección ocular, las segundas actúan como parapeto en la nariz y boca; es decir, se protegen las tres principales vías de acceso del coronavirus a los humanos. Asimismo, Sanidad destaca que son especialmente válidas para la protección ante toses o estornudos
