Sánchez se ve forzado a calmar al PSOE por su diálogo sobre Cataluña

El presidente del Gobierno se ha visto obligado a aclarar ante su partido que la "atención" a Cataluña "no se hará en perjuicio de otras CCAA"

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Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, se ha visto obligado este sábado a tranquilizar a su partido tras las distintas reuniones en Barcelona relacionadas con el conflicto catalán: la reunión con el jefe del GovernQuim Torra, así como la inminente convocatoria de la mesa de diálogo entre el Estado y la Generalitat. Por ello, ha aclarado que la «atención» a Cataluña «no se hará en perjuicio de otras necesidades territoriales apremiantes».

En esta línea, en la celebración del primer Comité Federal del PSOE del año, se han dejado ver varias incomodidades de parte de algunos miembros del partido ante la excesiva bilateralidad en las relaciones con Cataluña por parte del Gobierno y el trato que se le da.

Entre las cosas que inquietan a los barones del partido está la dependencia del nuevo Gobierno a los votos de ERC, que facilitaron la investidura de Sánchez y que podrían dificultar la aprobación de los Presupuestos Generales u otras leyes en el Congreso. Tampoco les gusta la particularidad de las propuestas que Sánchez llevó a Torra en su entrevista en el Palau de la Generalitat para solucionar algunas demandas del independentismo catalán.

El presidente de Aragón, Javier Lambán, ya ha reclamado a Sánchez que cumpla también con todo lo que figura el Estatuto de su comunidad. Ante esta y otras demandas similares, el presidente y secretario general del PSOE ha respondido la mañana del sábado haciendo un llamamiento a la calma y se comprometido a abordar lo que otras regiones le requieren.

«Extremadura necesita un tren digno y lo necesitan ya, Murcia que se recupere el Mar Menor, Castilla y León pide que aunemos fuerzas para revertir la despoblación y todos los agricultores de España están pendientes del debate en Europa de la PAC (Política Agraria Común) y quieren que les defienda el Gobierno», ha destacado Pedro Sánchez.

La Constitución «limita hablar de algunas cosas»

Ha sido precisamente el diálogo territorial el que ha centrado parte de la intervención de Sánchez y también algunas de las reflexiones de los barones previas a la reunión. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha señalado que «la Constitución permite hablar de mucho, pero limita también hablar de algunas cosas». Esta declaración hace referencia a las advertencias de Quim Torra de que, en el proceso de negociación, plantearía el derecho de autodeterminación y la petición de amnistía para los líderes separatistas condenados por el procés.

García-Page ha añadido que «es lo que creo que va a quedar hoy garantizado», en referencia al compromiso de Sánchez de que actuará siempre en los márgenes de la ley.

Superar la “dialéctica estéril”

En referencia a la Constitución, Sánchez ha indicado que «Nos protege a todos y no puede ser un arma arrojadiza» y que «Para constitucionalistas, nosotros». También ha insistido en que esta legislatura debe servir para superar las «tensiones territoriales» que consumen el debate público en España».

Añade que «hay que dejar atrás la dialéctica estéril» entre quienes sitúan este país como una «potencia despiadada y opresora», en referencia al independentismo, y los que «recelan de la diversidad y con una visión uniformadora piensan que la España acaba en la M-50». El Comité Federal se ha desarrollado a lo largo de toda la mañana con 22 intervenciones, la mayoría laudatorias y de apoyo al diálogo. 

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