Los aranceles de Trump complican el envío de paquetes a través de Correos (Pedro Saura): tienen que cumplir estos requisitos
La compañía postal pública impone algunas condiciones para las personas interesadas en enviar paquetes desde España hacia determinados países
La escalada arancelaria propulsada por la administración encabezada por Donald Trump está complicando el envío de algunos paquetes a través de Correos. Desde la entrada en vigor de una nueva norma promulgada por el país norteamericano, la compañía presidida por Pedro Saura ha impuesto nuevos requisitos para las personas interesadas en enviar paquetes desde España hacia el territorio de Estados Unidos o Puerto Rico.
La finalización del régimen de ‘minimis’, que ya ha entrado en vigor, ha comportado que la empresa postal pública se haya visto en la tesitura de aplicar una suspensión temporal sobre el envío de paquetes con un valor comercial inferior a 800 dólares, una cantidad que se traduce en poco más de 681 euros.
El fin del régimen de ‘minimis’ empuja a Correos a aplicar una suspensión temporal sobre el envío de paquetes con un valor comercial inferior a 681 euros
Y es que, en el marco de la guerra comercial propulsada por el dirigente estadounidense, el país ha introducido un cambio en las normas aduaneras y ha optado por eliminar la exención del pago de aranceles que venía aplicándose a los envíos entrantes de bajo valor.
Una de las primeras consecuencias será que los envíos de mercancías que se dirijan a Estados Unidos o Puerto Rico deberán pagar aranceles según el país de origen y el valor del producto.
Suspensión temporal de los envícos
Tras la decisión tomada por la administración estadounidense, el servicio público de mensajería y paquetería ha optado por modificar sus procesos y aumentar los controles de los envíos para cumplir los nuevos requisitos.
En este sentido, ha augurado que la nueva política de Estados Unidos tendrá un impacto significativo tanto en la logística postal internacional como en los flujos de comercio electrónico.
Correos advierte que la nueva política de Estados Unidos tendrá un impacto significativo tanto en la logística postal internacional como en los flujos de comercio electrónico
A pesar de ello, ha recordado que el envío de cartas y documentos sin valor comercial, de libros o los regalos enviados por particulares con un valor igual o inferior a 100 dólares, una cuantía que se traduce en 85,2 euros, se continuarán admitiendo y no se verán afectados en modo alguno.
Menos cuota de mercado
La suspensión temporal llega después de que Correos haya perdido en el transcurso del año pasado cuota de mercado en el envío de paquetería hasta situarse en el 17,5% frente al resto de operadores, lo que implica que ha sufrido un recorte cercano a los dos puntos en relación con el año anterior.
Así se desprende del último informe de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en el que se evidencia que el desplome contrasta con el incremento del 20% registrado en los envíos en España. Al superar los 1.216 millones de unidades, elevaron en más de un 10% los ingresos para el sector, que se enfilaron hasta los 6.670 millones de euros.
La apuesta por las entregas alternativas a la entrega en domicilio, como en puntos de conveniencia o taquillas, han recortado más de un 8% el ingreso unitario para los operadores de 5,48 euros por paquete. En el segmento postal tradicional de cartas, los envíos han experimentado un descenso del 6% hasta los 1.261 millones de unidades.
Política arancelaria de Trump
Tras negociar durante varios meses, la Comisión Europea ha logrado que las exportaciones comunitarias estén gravadas con un arancel del 15%. Como consecuencia, el sector del automóvil ha visto recortada su tarifa desde el 25%, así como la producción europea de semiconductores y productos farmacéuticos, si bien los aranceles del 50% al sector del acero y el aluminio se conservan.
Más allá de la Unión Europea, la administración encabezada por Trump ha aplicado aranceles de entre el 10% y el 41% a una lista conformada por 70 países. Mientras que países como Siria deberán afrontar la tarifa más elevada, del 41%, otros territorios como Japón o Reino Unido han logrado el porcentaje más bajo, del 10%.