Cinco licores valencianos que debes probar ya

Si pensamos en una bebida típicamente valenciana es difícil que no nos venga a la mente la horchata. Refrescante, elaborada con chufa, el pequeño tubérculo típico de la huerta valenciana, se elabora desde tiempo inmemorial y, bien líquida o bien granizada, sigue siendo una delicia, especialmente en los lugares donde la preparan de forma artesanal.

Sin embargo, más allá de la horchata, y también del Agua del Valencia, el cóctel por excelencia de la ciudad que le da nombre y que se elabora con zumo de naranjas de Valencia, vodka, cava y ginebra, existen en toda la Comunidad Valenciana muchos otros elixires en forma de licor.

Refrescantes, potentes, dulces, digestivos o estimulantes, de la mistela al café licor y del cantueso al Anís Paloma, estos son algunos de los tragos que no te puedes perder.

Mistela

Elaborado con mosto de uva y alcohol, la mistela (o también llamada misteleta) no es exactamente un vino, aunque cuenta con 13 grados de alcohol vínico.

De sabor dulce y color ámbar claro, al zumo de uva y aguardiente se le suelen añadir azúcar, clavo y café molido o en grano.

Suele tomarse como acompañamiento de postres y pastas, aunque también encaja a la perfección con quesos azules y foies. Una de las referencias más afamadas es la mistela de Turís, elaborada con uva Moscatel de Alejandría.

Café licor

El café licor es una de las bebidas más tradicionales de Alcoy, donde se elabora por maceración de café tostado natural variedad arábica.

Su historia se remonta al año 1278, asociada a los primeros gremios de tejedores instalados a orillas del río Serpís en Alcoy. Siglos después, mediado el siglo XIX, los trabajadores de la industria textil acostumbraban a llevar un recipiente de latón lleno de café caliente para acompañar el desayuno o la comida. Algunos le añadían unas gotas de aguardiente de caña, ron o brandy que le daba un sabor diferente, origen del llamado café licor alcoyano, hoy conocido como Aperitivo Café de Alcoy.

Se puede combinar con refrescos de cola, limón granizado o cerveza a cualquier hora del día y la noche, combinaciones que se comercializa bajo nombres como Plis Play, Mentira o Negreta.

Cantueso

Elaborado a partir de mediados del siglo XVIII, como su propio nombre indica deriva de la flor y el péndulo del cantueso (Thymus Moroderi), recogido durante los meses de mayo y junio y al que se agrega alcohol y 100 gramos de azúcar por litro.

Herbero

El herbero es una bebida alcohólica que se elabora también a partir de plantas, concretamente salvia, manzanilla, poleo, hierba luisa, raíz de cardo santo, menta piperita, rabo de gato, hinojo, anís, melisa, agrimonia (hierba de San Guillermo), ajedrea, zamarrilla, cantueso y tomillo.

Su mezcla suele estar en un 50% dulce y un 50% seco, mientras que el grado de alcohol de esta se sitúa entre el 22% y el 40%.

Muy característica de la provincia de Alicante –una tierra rica en hierbas aromáticas-, y concretamente de la Sierra de Mariola, entre Alicante y Valencia, donde cada elaborador interpreta este tradicional licor empleando las plantas que el Consejo Regulador especifica dentro de su reglamento. De la mezcla y la receta derivará el color final, que va desde el rojizo al pardo oscuro.

Anís Paloma

También de Alicante llega el Anís Paloma, un licor anisado que puede alcanzar un grado de alcohol de 55%, siendo lo mínimo de un 40%.

La bebida se obtiene por destilación de las semillas del anís verde (Pimpinella anissum) o anís estrellado también conocido como badiada (Illicium verum). Después se le añadirán agua y azúcar mientras permanece en reposo por un periodo mínimo de diez días antes de embotellarse.

De carácter seco, se puede preparar de diferentes maneras, las más populares son la Paloma: una parte de anís por tres partes de agua, y el Canario: una parte de anís por tres de agua más unas gotas de jarabe de limón al gusto, dando así lugar a una bebida muy refrescante perfecta para acompañar tanto aperitivos como almuerzos.