24 horas en el Londres más secreto

Hay experiencias en Londres que salen de lo común, donde se pueden conocer anfiteatros romanos ocultos, tomar un café en la cripta de una iglesia o caminar por un jardín donde crecen plantas venenosas y medicinales

Los Jardines de Medicina de Chelsea, un rincón poco conocido de Londres. Foto Chelsea Physic Garden

Hay muchas formas de conocer Londres, pero hay rincones que ni los mismos residentes de la capital británica conocen. Algunos pueden estar a la vista pero su historia es poco conocida, y otros están ocultos en los lugares más impensables.

El anfiteatro oculto

Un recorrido rápido puede ser esta propuesta de Turismo de Londres, que en una visita de 24 horas sugiere iniciar este paseo por la Galería de Arte Guildhall. Este espacio presenta la colección de arte de la Corporación de la City local, que incluye obras desde 1670 hasta la actualidad.

Pero la sorpresa está en su subsuelo: en 1988, mientras se construía la nueva galería de arte se descubrieron los restos de un anfiteatro romano.

Anfiteatro romano de Guildhall. Foto Wikipedia

En 2002 abrió sus puertas a los visitantes, donde se pueden ver los sitios en los que se sentaba el público y la arena en que los gladiadores se trenzaban en sus combates.

Vivir como una familia de hugonotes

Londres está lleno de museos, muchos de ellos de primer orden mundial. Pero ahora es momento de conocer uno de los más curiosos, el del Dennis Severs’ House.

Severs compró una antigua casa histórica en 1979 y la rehabilitó como un museo privado que describe cómo vivía una familia hugonote a principios del siglo XVIII.

Interior del museo Dennis Severs’ House. Foto Lucinda Douglas-Menzies

En plena City de Londres en 1988 se descubrieron los restos del anfiteatro romano, y ahora se puede visitar para conocer cómo era el espacio donde se veían combates de gladiadores

Los detalles de la vajilla, la decoración, las pelucas listas para ser usadas, los retratos familiares y las prendas de vestir dan una idea cómo era la vida cotidiana tanto para los dueños de la casa como para sus criados.

Comer y escuchar música en una cripta

Si hay hambre al mediodía, se puede ir a comer a una iglesia. La proposición no dea deja de ser extraña, sobre todo si es un templo tan interesante como el de St Martin-in-the-Fields.

La cripta de St Martin-in-the-Fields.

Este sitio georgiano de aires neoclásicos, en una de las esquinas de Trafalgar Square, además de sus misas también tiene una variada agenda de eventos musicales, sobre todo conciertos de música clásica a la luz de las velas.

Pero uno de sus puntos más sorprendentes es que su cripta fue adaptada como cafetería.

Mientras se degustan los platos de su cocina casera (que para ser londinense, está muy bien), se pueden contemplar sus arcadas originales de ladrillos y las tumbas que están en el suelo.

En este espacio, cada miércoles a las 20:00 se realizan conciertos de jazz. A no dejarlos pasar.

El jardín de las plantas venenosas

La tarde puede transcurrir en el Jardín de Medicina de Chelsea. Este espacio, abierto en 1673, ocupa 1,6 hectáreas de un solar junto al Támesis, elegido para que las corrientes de aire ayuden a crecer una amplia variedad de plantas.

El lugar pertenece al gremio de boticarios londinenses para cultivar plantas, ya sea medicinales como venenosas, así como un gran número de especies exóticas; por lo que su acceso ha estado restringido muchos años.

Estos jardines tienen casi 350 años de historia. Foto Andy Sedg

Desde hace 350 años el Jardín de Medicina de Chelsea cultiva miles de plantas con usos científicos

Recorrerlo y conocer sus 5.000 especies vegetales es como viajar en el tiempo, por su estética victoriana y los elegantes invernaderos de vidrio y ladrillo -que están en rehabilitación y abrirán en 2023-.

Una experiencia a tener en cuenta son las cenas que se pueden tener junto al Támesis, donde rodeados de la abundante vegetación se prueban unos cuatro platos y un cóctel de bienvenida. Su precio es entre 80 y 100 euros.

Cócteles de diseño

Para terminar esta jornada como corresponde hay que dirigirse a un pub. Con 3.500 de ellos solo en la capital la elección es complicada.

El pub clandestino Jubjub. Foto Callooh Callay

Pero si se trata de elegir alguno Turismo de Londres sugiere que sea el Callooh Callay, uno de los primeros bares de cócteles de Shoreditch, inaugurado hace 13 años, y que fue nombrado entre los 50 mejores del mundo varias oportunidades.

Además de sus cócteles vanguardistas y de diseño este bar hay que visitarlo para conocer el pub clandestino Jubjub, que tienen oculto detrás de un armario.

Esas cosas solo pueden pasar en Londres.

a.
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