Tras las huellas de Bernini en Roma

Desde la Basílica de San Pedro hasta las estatuas de las Plaza Navona, caminado por Roma se descubren las mejores creaciones de Gian Lorenzo Bernini

Las obras del escultor y arquitecto Gian Lorenzo Bernini se pueden encontrar casi en cada rincón de la capital italiana, desde imponentes estatuas hasta el diseño de algunas de las fuentes y plazas más famosas.

Bernini es considerado el más destacado escultor barroco de su generación. El artista napolitano tenía la capacidad de relatar en sus esculturas escenas narrativas muy dramáticas, e incluso de captar intensos estados psicológicos. En esta guía se descubren algunas de las obras maestras más importantes del genio del barroco en Roma.

Basílica de San Pedro

Bernini pasó casi 50 años trabajando tanto en el interior como en el exterior de la Basílica de San Pedro. Diseñó gran parte de la Plaza de San Pedro entre los años 1656 y 1667, en particular la columnata con estatuas. Los dos lados curvos representan dos brazos que dan la bienvenida a la gente a la Iglesia Católica.

Plaza de San Pedro
La forma semi circular de la plaza evoca la bienvenida que la Iglesia Católica da a sus feligreses. 

En el interior, el altar principal está cubierto por un baldaquino de 29 metros de altura que se alza bajo la enorme cúpula de Miguel Ángel. La obra realizada por Bernini está hecha de bronce que se obtuvo fundiendo las decoraciones del Panteón de Roma, bajo las órdenes del Papa Urbano VIII.

Baldaquino de San Pedro
El Badalquino de Bernini se encuentra justo debajo de la cupula de Miguel Ángel. 

Otras obras de Bernini en la Basílica incluyen la decoración alrededor de la Silla de San Pedro, el Monumento a Alejandro VII, la Tumba de Urbano VIII y la estatua de San Longino.

Bernini es considerado el escultor barroco más importante de su generación, las obras del artista poseen un gran toque de dramatismo

Santa Maria Sopra Minerva

La plaza ubicada frente a la iglesia de Santa Maria Sopra Minerva, alberga el llamado ‘Elefante de Bernini’, esculpido como la base de un obelisco egipcio que se instaló en la zona. El peculiar diseño del elefante se inspiró en una de las frases grabadas en la columna: “se necesita una mente robusta para mantener una sabiduría sólida”.

Dentro de la iglesia hay otra obra de Bernini, el Monumento a Maria Raggi, una monja que vivía cerca. El monumento está unido a un pilar y marcó un estilo revolucionario de monumento sepulcral con sus cortinas de oro y bronce.

Elfante di Bernini
El Elefante, obra de Bernini, soporta un obelisco procedente de Egipto. 

Piazza Navona

La Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini es una de sus obras más famosas y se encuentra en un lugar de honor en el centro de Piazza Navona. Construida para sostener el obelisco, en la inmensa escultura hay representaciones de los principales ríos en los cuatro continentes conocidos en el momento: el Ganges, el Nilo, el Danubio y el Río de la Plata.

Además, en la fuente se muestran diferentes figuras de animales y plantas. Bernini estudió el flujo del agua a través de la fuente, agregando criaturas marinas para crear la sensación de escuchar ruidos que brotan de la fuente.

Fontana Bernini
Las cuatro caídas de agua representan los ríos más importantes de la época en que vivió Bernini. 

Ponte Sant’Angelo

Las estatuas que bordean el puente de Sant’Angelo fueron encargadas por el Papa Clemente IX en 1669 para reemplazar las antiguas esculturas dañadas. Bernini diseñó 10 nuevos ángeles, cada uno de los cuales sostiene un objeto de la Pasión de Cristo.

Dos de las esculturas, el ángel con la inscripción “I.N.R.I” y el ángel con la corona de espinas, fueron esculpidas por Bernini junto con su hijo Paolo. Estos dos originales de fueron conservados por el Papa para su propia colección y se colocaron copias en el puente. Ahora se pueden encontrar en la Iglesia de Sant’Andrea delle Fratte, situada cerca de Piazza Barberini.

Angel con corona
Original Ángel con la corona hecho por Bernini, una copia se encuentra en el puente de Sant’Angelo. 

 

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