El IVF agota los 220 millones de sus líneas bonificadas de financiación

El Institut Valencià de Finances ha recibido casi 600 solicitudes de créditos, y liquida su presupuesto en solo cuatro meses

Polígono industrial. Foto Generalitat Valenciana

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El Institut Valencià de Finances (IVF) ha agotado el presupuesto asignado a sus líneas bonificadas después de recibir 587 solicitudes de financiación en 2024, que suman un total de 219,7 millones de euros.

El director general del IVF, Enrique Montes, ha destacado que esta alta demanda, registrada en apenas cuatro meses, supera la asignación presupuestaria destinada a los préstamos bonificados, lo que demuestra el éxito de este producto financiero. Además, señaló que las solicitudes en proceso serán atendidas hasta agotar el presupuesto disponible, y se espera que se resuelvan en las próximas semanas.

La extensión del Marco Temporal de Ayudas de Estado hasta junio de 2024 permitió al IVF renovar sus líneas bonificadas en enero, facilitando así el acceso a préstamos con un porcentaje de ayuda no reembolsable, que puede alcanzar hasta el 30 % del capital concedido, para autónomos, pymes y grandes empresas.

Durante los primeros meses del año, trabajadores autónomos y empresas de la Comunidad Valenciana han podido solicitar préstamos bajo las líneas bonificadas Reactiva Feder y Gran Empresa Industrial.

Hasta el 15 de mayo se han recibido 570 solicitudes a través de la Línea Reactiva Feder por un total de 188,4 millones de euros, y 17 solicitudes a través de la Línea Gran Empresa Industrial, por valor de 31,3 millones de euros.

El IVF tiene plazo hasta el 30 de junio para resolver estas solicitudes y adjudicar las operaciones en estudio. En 2023, el instituto formalizó un total de 527 operaciones de financiación bonificada, por un importe conjunto de 162 millones de euros.

Acceso a préstamos bonificados

El director general del IVF destacó que el Marco Temporal de Ayudas de Estado, diseñado para impulsar la economía y fomentar la inversión durante situaciones críticas como la crisis de la COVID-19, la guerra de Ucrania y el aumento de los precios de la energía, ha permitido a empresas y autónomos acceder a préstamos bonificados cuando más lo necesitaban. La alta demanda recibida confirma el éxito de estos productos financieros.

Con el fin de la vigencia del Marco Temporal el próximo 30 de junio y la retirada gradual de los estímulos, se espera una normalización progresiva de la situación, con una reducción en la intensidad de los estímulos y ayudas económicas.

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