Volkswagen reúne a sus socios de la gigafactoria para analizar el Perte

La gigafactoria espera ayudas regionales ya que sus plazos le impiden retrasarse hasta que salga la segunda asignación del programa

Vista aérea de los terrenos de Parc Sagunt II donde está prevista la instalación de la fábrica de baterias de Volskwagen. EFE/Biel Aliño

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Volkswagen transmite tranquilidad de cara a la gigafactoría de Sagunto y los planes de Martorell y Landaben mientras pide una paciencia acotada en el tiempo. A las 15 horas de ayer se reunió por videoconferencia con los 60 socios que forman parte del consorcio ‘Future: Fast foward’ con el que quiere electrificarse en España para poner de manifiesto que ha llegado la resolución definitiva del Perte.

Los datos encima de la mesa son el incremento de un 137% de los fondos captados en el Perte. La resolución provisional de agosto les otorgó 167,3 millones de euros mientras la resolución definitiva lo eleva hasta los 397,3 millones. El 44,8% de las ayudas europeas otorgadas en este programa han sido para la iniciativa de Volkswagen.

«No news, good news» fue la conclusión de una reunión que Volkswagen convocó lo antes posible, es decir, el día después de tener acceso a la resolución definitiva, que se hizo pública este martes. Tras ella, hay 10 días laborables para aceptar o declinar el proyecto. Este plazo se considera asumible como para pasarlo mudo mientras poco se puede hacer cambiar la decisión final sobre la gigafactoría.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció una segunda edición del Perte con los casi 2.100 millones que ha dejado sin adjudicar con la idea de que se ponga en marcha en el primer trimestre del año que viene. Este plazo es inaceptable dentro de los planes del fabricante de coches alemán ya que sólo se habla de la convocatoria del pliego y no de la adjudicación efectiva de las ayudas.

El Perte Vec se aprobó en el Consejo de Ministros el 13 de julio de 2021 y el detalle de la resolución definitiva se ha conocido un año, tres meses y 12 días después. Si a esto le sumamos los más de cinco meses para acabar el primer trimestre, que es el plazo marcado por Sánchez, el retraso de esperar estaría por encima de los 20 meses. Para entonces (verano de 2024), la estructura de la fábrica ya tendrá que estar ejecutada. La previsión es que durante 2025 se realicen las primeras preseries de las baterías para que en 2026 empiece la producción en serie.

Por tanto, la decisión de Volkswagen sobre la gigafactoría de Sagunto no puede depender de los fondos que pueda recibir en la segunda edición del Perte pero sí de la implicación que tenga la Generalitat Valenciana, a la que Pedro Sánchez delegó la responsabilidad. «Nosotros vamos a trabajar para llegar a acuerdo que permitan traer la planta», remarcan desde la Generalitat, que no vinculan un apoyo a que ocurra en el plazo de días o una vez aceptado el Perte ya que el objetivo de Puig es mostrarse confiable a corto y a largo plazo para la automoción.

Mientras transcurre este plazo, Volkswagen desde Berlín no relaja su discurso. Según recoge la agencia de noticias Reuters, el responsable de la marca Volkswagen, Thomas Schaefer, dijo ayer: «Lo que hemos puestos sobre la mesa es significativo. Ahora tendremos que ver el resultado: faltan diez días».

Los 397,3 millones de euros son considerados desde Berlín una cantidad insuficiente aunque aclaran que no pretendían alcanzar los 800 millones de euros de ayudas. Según explicó Schaefer, la cantidad es menos de lo esperado pero no la mitad de lo solicitado.

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