Reestructuración en Best Hotels: Sergi Batalla deja Mojácar y Salou tras asumir el control del grupo
El relevo en las sociedades gestoras ha consolidado un movimiento de recentralización del poder corporativo en torno a la matriz Salou 2000
Best Oasis Tropical, en Mojácar (Almería), tras ser reformado. Imagen: Best Hotels
Best Hotels ha iniciado una reestructuración interna que ha redistribuido responsabilidades en la dirección del grupo y ha situado a Sergi Batalla al frente del holding mientras abandona la administración directa de dos de los hoteles más relevantes de la cadena, situados en Mojácar (Almería) y Salou (Tarragona).
En concreto, la sociedad Cala Pins, encargada de gestionar el Hotel Best Oasis Tropical y el Best Cap Salou, ha dejado de estar administrada directamente por Batalla, pasando a ser sustituido por Guillermo Herrero. Además, Herrero ha sido nombrado administrador mancomunado en otras compañías del grupo, ampliando su presencia en la estructura de gobierno corporativo.
Todo esto se ha producido después de que la sociedad dominante del grupo, Salou 2000, asentada en la provincia de Málaga, haya pasado a estar liderada también de forma única por Sergi Batalla al sustituir a su hermano Albert Batalla en el cargo.
Este movimiento ha reforzado la centralización del poder corporativo en la matriz y ha otorgado al directivo el máximo control sobre las decisiones estratégicas del grupo hotelero. El cambio ha permitido además separar la dirección corporativa del liderazgo operativo en los establecimientos, lo que ha dejado a Sergi Batalla enfocado en la gestión estratégica de grupo, mientras la administración ordinaria de los hoteles ha pasado a manos de la nueva estructura.
La transición, recogida en el Registro Mercantil, se ha conocido en un momento clave para ambos complejos, que han consolidado su recuperación tras el impacto de la pandemia y han presentado resultados al alza durante el ejercicio 2024. El informe financiero correspondiente al año pasado ha reflejado un incremento de la cifra de negocio, que ha rozado los 18 millones de euros frente a los 16,5 millones del ejercicio anterior.
A nivel de grupo completo, Best Hotels ha cerrado 2024 con una facturación alrededor de los 445 millones de euros.
Estrategia en la gestión de la cadena
La compañía ha atribuido esta evolución al mantenimiento de la demanda y al comportamiento sostenido de los precios turísticos, lo que ha permitido una recuperación completa de la actividad tras los años de disrupción sanitaria. El resultado de explotación también ha mostrado una evolución favorable y ha ascendido a 6,3 millones de euros, desde los 5,2 del registro precedente.
En este sentido, la sociedad ha explicado que el aumento de actividad ha impulsado tanto las ventas como los márgenes, apoyados en una estrategia de contención de costes generales y mejora de la productividad, aunque ha reconocido un incremento de los costes salariales asociado a la mayor ocupación y a la necesidad de reforzar los servicios.
En cuanto al capital circulante, la sociedad ha registrado un saldo negativo de 1 millón de euros, frente al dato positivo del ejercicio anterior. La compañía ha vinculado este deterioro al entorno de precios al alza y a la presión de costes generalizada, aunque ha señalado que la tendencia operativa se mantiene en línea con la estrategia prevista.
De cara al ejercicio 2025, la sociedad ha trasladado unas perspectivas positivas y ha anticipado una estabilización de los principales componentes de la cuenta de resultados. Entre las prioridades señaladas se han incluido el mantenimiento de los ingresos, el control de los costes generales y la adecuación de las inversiones al ritmo del mercado, con el objetivo de sostener los niveles de competitividad exigidos por la actividad turística actual.
Reforma en Mojácar por 23 millones
Uno de los proyectos destacados dentro de esta estrategia ha sido la reforma del Hotel Best Oasis Tropical, en Mojácar, una actuación que se ha cerrado hace pocos meses tras consolidarse la recuperación del negocio y solicitar un préstamo de 23 millones de euros.
La renovación contemplaba la remodelación de las habitaciones, la incorporación de nuevas categorías como suites y estancias con acceso directo a piscina, así como la ampliación de las instalaciones mediante una parcela adicional destinada a piscinas, zonas de juego y nuevas áreas comunes.
Las inversiones incluyeron también la actualización de los espacios exteriores, restaurantes y terrazas, junto con la implantación de mejoras tecnológicas y de eficiencia energética. Entre ellas, la sociedad destacaba sistemas de iluminación LED de bajo consumo, controles inteligentes para climatización y agua y equipamientos de última generación en las habitaciones.
La reapertura del hotel reformado se ha producido en junio de este año, un calendario que ha permitido completar la temporada alta. Desde la compañía se subrayaba que la estrategia de renovación busca reforzar la sostenibilidad y mejorar la experiencia del cliente, aprovechando el ciclo positivo de demanda que se ha consolidado en los 2 últimos años.