Hesperia y Al Alfia anuncian una inversión de 200 millones para construir un hotel en el puerto de Málaga
La torre de 144 metros ha recibido ya el visto bueno de la Autoridad Portuaria y está pendiente de la aprobación definitiva del Consejo de Ministros
Proyección de la torre que acogerá al hotel promovido por Hesperia y Al Alfia en Málaga. Imagen: EP
Grupo Inversor Hesperia (Gihsa) y el fondo catarí Al Alfia han anunciado una inversión de 200 millones de euros para levantar un hotel en el puerto de Málaga, un proyecto que ha avanzado en su fase administrativa después de casi 10 años de desarrollo técnico y tramitación.
Los promotores han explicado que la actuación ha recibido el visto bueno de la Autoridad Portuaria y ha sido remitida a Puertos del Estado, paso previo antes de la aprobación definitiva por parte del Consejo de Ministros. Además, han señalado 2029 como posible fecha de finalización.
Paralelamente, el CEO de Grupo Inversor Hesperia, Jordi Ferrer, ha destacado que las obras durarán aproximadamente 3 años y que «la gran parte principal la va a acometer el promotor», aunque se abre la posibilidad de recurrir a fondos europeos y de administraciones públicas, que representarían una proporción «bastante menor».
El hotel contará con 382 habitaciones y aspirará a «contribuir al desarrollo urbano y económico de Málaga». Durante la presentación, Ferrer, ha defendido que el proyecto «es el resultado de un trabajo largo y riguroso» y que busca «aportar valor a Málaga con una propuesta hotelera de alta calidad y nuevos espacios abiertos al público».
Los promotores han indicado que la iniciativa generará hasta 1.000 empleos directos e indirectos, tanto en la fase de construcción como en la futura operación del hotel y sus servicios asociados. El establecimiento tendrá categoría 5 estrellas y se completará con un centro de convenciones de 2.500 metros cuadrados.
Ferrer ha subrayado, además, que se trata de un proceso «reglado», que ha seguido «los parámetros que se definieron desde el primer día» y que ha requerido «mucho rigor». Y, en ese sentido, ha añadido que espera que continúe «sin ningunas interferencias» políticas.
Defensa del proyecto
El hotel permitirá además que el 80% de la parcela sea de uso público, e incluirá equipamientos deportivos, culturales y de ocio. Los promotores han confirmado que mantienen conversaciones avanzadas con marcas internacionales para la gestión del futuro hotel, aunque sin ofrecer más detalles.
El plan contempla un nuevo paseo marítimo de 1.300 metros con miradores, carril bici y zonas de paseo. En total, se habilitarán 54.000 metros cuadrados de espacio ciudadano con áreas verdes y vegetación autóctona. La torre, de 144 metros, se alzará sobre un basamento pétreo de dos alturas concebido para usos públicos.
Los responsables del proyecto han incidido en que se trata de una propuesta «no especulativa» y que busca «devolver» espacio a la ciudad. Ferrer ha afirmado que será un impulso para atraer «cultura», «gastronomía», «comercio» y «turismo de calidad», y ha defendido que el diseño es «muy respetuoso» y «muy sostenible».
Y, aunque el equipo ha reconocido que un proyecto de esta escala difícilmente genera consenso unánime, también ha defendido su capacidad para «mejorar Málaga». Han explicado que avanzarán en la transparencia y en la comunicación con plataformas ciudadanas «a medida que avance las tramitaciones».