Al borde del cierre: esta cadena de cafeterías casi en quiebra planea invertir 1.000 millones en Bitcoin
Esta cafetería es la única en España en cotizar en bolsa, debutando en 2023 con un precio inicial de 3,28 euros por acción
Las criptomonedas parecen ser la salvación
Vanadi Coffee, cadena de cafeterías de origen alicantino, se encuentra al borde de la quiebra. La compañía ha caído un 99% su valor desde que debuto en bolsa, concretamente en el BME Growth, un mercado de valores español orientado a pymes en expansión. En las cuentas de 2024, se muestra un desequilibrio patrimonial y falta de financiación, no pudiendo cumplir las previsiones.
El proyecto de Vanadi Coffee nació en el año 2021 en Alicante. Sus creadores son Salvador Martí, presidente del CF Intercity y cofundador de la tecnológica FacePhi, y el empresario del sector hostelero Vicente Terol. El objetivo de ambos es que sea la primera cadena de cafeterías española cotizada, buscando competir con los bares tradicionales y no con grandes multinacionales como Starbucks.
El concepto combina un modelo ‘fast food’ con la denominada ‘real food’. A cafés modernos, la compañía sumó en 2023 Le Fournil de Jules, un obrador local para fortalecer su oferta gastronómica con panadería y bollería artesanal. Justo este año, Vanadi Coffee consiguió entrar en Bolsa, siendo la primera cafetería española en cotizar.
Debutó en BME Growth con un precio inicial de 3,28 euros por acción y una valoración de unos 20 millones de euros. Con una estrategia de crecimiento orgánico, en 2023 contaba con 6 locales en Alicante y se planteaba alcanzar 25 cafeterías para finales de año. Incluso planeaban expandirse más allá del Levante, programando aperturas en Madrid y Barcelona.
A pesar del prometedor proyecto que Martí y Terol habían creado, a finales de 2023 se enfrentaron a problemas de financiación, con pérdidas acumuladas y necesidad de reducir su plan de aperturas, rozando la posibilidad de la quiebra. Tenía asegurados unos fondos por 10 millones de euros, de los cuales solo se habían materializado 1,5 millones, por lo que había que ajustar la expansión prevista.
De la quiebra a disparar su cotización
Ahora Vanadi Coffee ha sorprendido al mercado con un ambicioso plan: invertir hasta 1.000 millones de euros en bitcoin. La noticia ha disparado el valor de sus acciones un 130 % en lo que va de año, hasta alcanzar los 0,41 euros, pese a que la empresa cerró 2024 con cifras muy modestas y en 2023 con la posibilidad de la quiebra.
El anuncio ha sido recibido con entusiasmo por los inversores, pero no deja de contrastar con la realidad. Según las últimas cuentas en BME Growth, Vanadi perdió 3,3 millones de euros en 2024, un 15,8 % más que el ejercicio anterior, y sus ingresos apenas alcanzaron los 2 millones de euros, con un leve retroceso del 1,4 %.
A pesar de contar con una capitalización de 4,8 millones y un patrimonio negativo de 600.000 euros, la firma ya ha dado su primer paso hacia las criptomonedas, comprando cinco bitcoins por un precio medio de 98.896 euros cada uno, según han informado desde Cinco Días. Las criptomonedas se posicionan como una salvación ante la posible quiebra.
La custodia de estos activos la asumirá el exchange español Bit2Me.
Una estrategia ya seguida por su fundador
Entre los socios estratégicos de esta acción aparece Alpha Blue Ocean, fondo inversor que ya inyectó 11 millones en 2024 en el CF Intercity, el club de fútbol presidido por Salvador Martí, quien también lidera Vanadi. Curiosamente, el Intercity, que es el único club español cotizado en Bolsa, tampoco lo está pasando demasiado bien en lo deportivo, pues ha descendido a Segunda RFEF, la cuarta categoría del fútbol español, y arrastra unas pérdidas de 7 millones en la última temporada.
Martí es un empresario con trayectoria también en el sector tecnológico, ya que es fundador de FacePhi. Su objetivo ahora es posicionar a Vanadi Coffee como algo más que una cadena de cafeterías. Sin embargo, el salto al mundo cripto se produce en un contexto muy delicado con el riesgo de una posible quiebra. Es una empresa con ventas limitadas, un balance comprometido y un modelo de negocio aún por consolidar.