El fondo Cale Street maniobra para quedarse con Oasiz tras engordar la deuda de la firma propietaria
El fondo Cale Street, primer acreedor de la sociedad dueña de Oasiz, presenta una oferta para quedarse con el centro comercial y proceder a su venta.
El centro comercial Oasiz, en Torrejón de Ardoz (Madrid).
El fondo Cale Street Investment (CSI), que financió con 105 millones a la sociedad Carlotta Iberia, dueña de Oasiz, maniobra para quedarse con el centro comercial, el mayor de la Comunidad de Madrid, tras engordar la deuda de la firma propietaria.
Carlotta Iberia se declaró en preconcurso de acreedores, por segunda vez, el pasado mes de junio, con el objetivo de aprobar un nuevo plan de reestructuración, disponiendo de ello de un plazo de tres meses; el Juzgado concedió el 10 de septiembre una prórroga a Carlotta de otros tres meses para seguir negociando una alternativa a la presentación de concurso de acreedores.
Tras haber consumido ese periodo para tratar de aprobar un nuevo plan de refinanciación, Carlotta Iberia se dispone ahora a solicitar al Juzgado mercantil número 14 de Madrid la declaración de concurso de acreedores y la apertura de liquidación.

El centro comercial Oasiz. OASIZ
En ese proceso de solicitud de concurso, el fondo CSI ha acordado presentar una oferta para quedarse con el centro comercial situado en Torrejón de Ardoz, según ha publicado el diario Cinco Días, para proceder después a su venta.
De acuerdo a la información publicada, la consultora CBRE ha otorgado una valoración de 140 millones al centro comercial, inferior a los 190 millones en que lo valoró en diciembre de 2022, a pesar de que su ocupación ha aumentado hasta casi el 80%.
La jugada de Carlotta Iberia y CSI dejará previsiblemente al resto de acreedores sin posibilidad de recuperar sus créditos.
La deuda de Carlotta Iberia con el fondo se ha incrementado desde los 105 millones de euros hasta superar en la actualidad los 140 millones, gracias a los intereses cobrados desde la concesión de la financiación de 105 millones.
Entre los acreedores de Carlotta Iberia que prevén no recuperar un euro si se mantiene la hoja de ruta marcada junto con el fondo CSI se encuentra la sociedad española New Asset Management (NAM).
El mes pasado NAM, que reclama una deuda de unos 3,5 millones, presentó escrito ante el Juzgado solicitando la homologación de una plan alternativo de reestructuración para la sociedad dueña de Oasiz, que modificaría radicalmente las posibilidades de cobro de sus acreedores y su composición societaria.
La jugada de Carlotta Iberia y CSI «es algo insólito, porque un acreedor, el fondo buitre, aprueba un plan de reestructuración tras engordar la deuda durante dos años cobrando intereses a Carlotta Iberia en más de 30 millones y se queda con el centro», considera Rubén Montoya, abogado de NAM.
«CSI controla Carlotta desde el año 2024 tras hacerse con el 75% de los votos; la intención del fondo ha sido desde un principio engordar la deuda con los intereses del préstamo para quedarse con el centro comercial sin pagar al resto de los acreedores, pervirtiendo con ello la reestructuración, lo que ha sido permanentemente denunciado ante el Juez», añade el abogado.
Rubén Montoya advierte que ni siquiera se han publicado las cuentas de 2024 de Carlotta Iberia.
En sus cuentas de 2023, la sociedad dueña de Oasiz registró pérdidas de 136,6 millones de euros y un fondo de maniobra negativo por importe de 259 millones, situándose Carlotta Iberia en causa de disolución.
Recurso de reposición
El Juzgado ha inadmitido el plan de reestructuración alternativo presentado hace un mes por NAM, al que se adhirió FTI Consulting, la administración concursal de Compañía de Phalsbourg, una de las antiguas sociedades que participó en la construcción de Oasiz.
El Juzgado argumentó la inadmisión advirtiendo que el plan presentado por NAM no venía acompañado del certificado de mayorías y del informe de experto sobre la valoración de empresa en funcionamiento.
El plan presentado por Cale Street perjudica a 145 acreedores, advierte NAM
La empresa española NAM presentó la pasada semana ante el Juzgado recurso de reposición, ante la negativa del Juez de admitir su plan de reestructuración.
En su recurso, la sociedad acreedora de Carlotta Iberia subraya que los requisitos de certificado de mayorías y del informe de valoración «no forman parte de los requisitos legales para la admision a trámite».
Además añade que tampoco CSI aportó esos documentos cuando presentó, en enero de 2024, escrito solicitando la homologación judicial del plan de reestructuración suscrito en la misma fecha.
«Esta parte no alcanza a comprender cómo el mismo Juzgado que, en un supuesto sustancialmente idéntico, tuvo por cumplidos los requisitos para la admisión a trámite, adopta ahora un criterio radicalmente distinto y acuerda inadmitir la solicitud presentada», expone NAM en su recurso de reposición, en el que afirma que Carlotta Iberia y CSI «actúan bajo el mismo interés«.
La actuación de Carlotta Iberia y CSI «no hacen sino corroborar lo que diversos acreedores personados han venido denunciando tanto en este procedimiento como en el anterior: el ejercicio abusivo del derecho por parte de CSI, articulado a través de Carlotta», con la intención, subraya, de que sean «los únicos en percibir pago alguno».
Esta forma de proceder «no perjudica a un solo acreedor, sino a 145 acreedores, entre ellos todos los acreedores comerciales, todos los acreedores financieros y, por supuesto, los acreedores especialmente relacionados», destaca. Otro acreedor, el abogado Francisco Suárez, también solicitó la nulidad de las actuaciones con base en la anunciada maniobra de CSI.