Nissan empuja a Barcelona fuera de su plan de futuro

Nissan cede a Renault el liderazgo en Europa y de la producción de furgonetas, dos decisiones que segan el horizonte de la planta catalana

El presidente de Nissan Europa, Gianluca de Ficchy, y el exconsejero delegado de Nissan Motor Iberica, Genís Alonso (derecha). EFE/Alejandro Garcia

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A la espera del anuncio definitivo, Nissan da otra pista de que su futuro no pasa por Barcelona. El fabricante de automóviles japonés y sus socios Renault y Mitsubishi dieron a conocer este miércoles su nueva estrategia conjunta que deja prácticamente sin opciones a la planta catalana: la firma nipona se retira de Europa y cede el liderazgo de la fabricación de furgonetas a su aliado francés.

En una rueda de prensa conjunta, las firmas explicaron que se repartirán el planeta en una estrategia de «líder y seguidor» con la que se pretende conseguir una reducción de costes del 40% por vehículo. Renault toma la delantera en Europa mientras que Nissan queda relegada a China y Japón, Oriente Medio, Sudáfrica y Estados Unidos.

Además, Nissan también cede el liderazgo a su aliado galo de la producción de furgonetas, por lo que sería la empresa francesa la encargada de dirigir la eNV200, el único modelo que, a pesar de sus modestas cifras, tenía éxito en Barcelona. El año pasado, la planta de la Zona Franca ya perdió la NV200 de combustión, que se fabrica ahora en la planta francesa de Maubeuge utilizando la misma plataforma que la Renault Kangoo.

Con Renault trabajando para lanzar una versión eléctrica del modelo y la nueva estrategia conjunta, parece cada vez más probable que el automóvil de cero emisiones fabricado en Cataluña emigre al otro lado de los Pirineos.

«Nissan tiene que saber que cerrar Barcelona no le costará menos de 1.000 millones», dice el Gobierno

El fabricante japonés sí mantendrá el liderazgo de la producción de pick up, el otro tipo de vehículos que se ensambla en Barcelona. No obstante, mantener la planta catalana solamente con el Nissan Navara y su homólogo para Renault sería insostenibles para una instalación que ya funciona por debajo del 30% de su capacidad. Por ello, según informó el Financial Times, la elaboración de estos modelos se trasladaría a las plantas de Nissan en Sudáfrica, otra de las regiones que dominará.

La batería de anuncios ensombrece todavía más el futuro de la instalación española, por mucho que el Gobierno amenace sobre el coste de cerrar la planta. «Nissan tiene que tener claro que no le va a salir más barato de los 1.000 millones», advirtió el secretario de Industria, Raúl Blanco. La compañía parece tener asumido el gasto, pues calcula que necesitará 4.500 millones de euros para la reestructuración que planea.

«Es más positivo y viable invertir que cerrar, cerrar le va a salir carísimo y no va a encontrar ninguna actitud positiva ni en al ciudad, ni en España ni en Europa», recalcó Blanco, que cifró en 300 millones la inversión necesaria para dotar de un nuevo coche al centro.

La incógnita de Nissan en Sunderland que amenaza a España

Si el plan parece sentenciar la fábrica de Barcelona, queda por ver que sucede con la planta de Sunderland (Reino Unido). En el archipiélago se ensambla el modelo de Nissan con más éxito en el Viejo Continente, el Nissan Qashqai y, a pesar de ceder el liderazgo en el Viejo Continente, la marca nipona sí llevará la batuta de este segmento en la alianza.

La infraestructura tiene una capacidad para 500.000 vehículos anuales, aunque solo saque a la carretera alrededor de 350.000 unidades por ejercicio. Según adelantó la prensa británica, el vacío pretende llenarlo con automóviles que Renault tiene en otras plantas.

Aquí es donde llega la amenaza para la industria española. Al perder el liderazgo del segmento, Renault entrega las llaves del Renault Kadjar, que se produce en Palencia y supone el 50% de los coches que la instalación a la carretera. Además, las cifras cuadran, pues los vehículos que salen al mercado cada año rondan los 150.000, precisamente el espacio disponible en Sunderland.

A cambio, Renault liderará la producción del segmento inferior, en el que el Renault Captur –elaborado en Valladolid— y el Nissan Juke –hecho en Sunderland– podrían lograr muchas sinergias. Los cambios, eso sí, no se darían hasta 2025.

Nissan oficializará su plan el jueves

Este miércoles la alianza Nissan-Renault-Mitsubishi dio a conocer la hoja de rota global, que todavía se debe concretar en cada una de las marcas. Renault esperará al aterrizaje de Luca De Meo como consejero delegado para hacerlo mientras que Nissan oficializará este jueves sus planes.

La hoja de la compañía nipona pasan por el despido de 20.000 empleados en todo el mundo, según reveló hace unos días la agencia japonesa Kyodo. Solo en el centro de la Zona Franca se acumulan unos 3.000 trabajadores, por lo que el cierre de la planta catalana es solo una pieza más del drástico recorte que la empresa plantea en el planeta.

Carles Huguet

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