Bimba y Lola ficha como consejera a la ex CEO de Kenzo tras reorganizar el grupo

Las hermas Uxía y María Domínguez nombran a Sylvie Colin, histórica directiva de marcas internacionales, consejera independiente en un momento en el que el sector del lujo mira la salida a bolsa a Puig

Una mujer entra por la puerta de una de las tiendas físicas de la marca Bimba y Lola. - Ricardo Rubio

Una mujer entra por la puerta de una de las tiendas físicas de la marca Bimba y Lola. – Ricardo Rubio

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Bimba y Lola, la firma de lujo asequible capitaneada por las hermanas Uxía y María Domínguez, –hijas de Jesús Domínguez, uno de los impulsores de Textil Lonia–, amplía su consejo de administración con un fichaje de relumbrón dentro del sector. Se trata de Sylvie Colin, una conocida directiva de marcas internacionales, que desembarcó en el máximo órgano de administración de la compañía pontevedresa el pasado enero.

Desde la compañía destacan que se trata de “una experta en moda con más de 35 años de experiencia gestionando marcas internacionales, tanto en puestos ejecutivos como del consejo de administración”. Además de consejera en Bimba y Lola, cargo que ya figura en su curriculum en la red social LinkedIn, también ocupa similar puesto en Spartoo desde 2021 y en Maisons du Mondo desde 2023. Miembro del órgano de dirección de Carre Blanc entre 2017 y 2022, la ejecutiva llegó a ser consejera delegada de la marca Kenzo entre 2017 y 2021. Con anterioridad también fue primera ejecutiva de otras compañías de ropa de mujer de línea similar a Bimba y Lola, Maje y Carroll París.

Sylvie Colin. Foto: LinkedIn

Un consejo entre la moda y las finanzas

Con este nombramiento, el consejo de administración de Bimba y Lola incluye un nuevo asiento desde 2020, cuando la firma optó por crear un órgano de administración. En el mismo se sientan las dueñas de la compañía, la hermanas Uxía y María Domínguez, presidenta y vicepresidenta de la firma, así como su padre, Jesús Domínguez, hermano de Adolfo Domínguez e impulsor de Textil Lonia, la compañía que explota las marcas Carolina Herrera y Purificación García.

El consejo de administración de Bimba y Lola también cuenta con la presencia de José María Castellano, exvicepresidente y CEO de Inditex. El ejecutivo, actual presidente de Greenalia, fue el principal artífice de la salida a bolsa de la multinacional de Amancio Ortega, allá por 2001. Fue precisamente este fichaje el que, hace cuatro años, desató las hipótesis sobre si la compañía de las hermanas Domínguez tenía entre sus planes el salto al parqué.

De hecho, en el consejo de Bimba y Lola también se sienta Eva Hernández, antigua socia responsable del área mercantil de Grant Thornton en Galicia, una firma especializada en servicios de auditoría y consultoría y que ha participado en la elaboración de informes de valoración independientes en salidas a bolsa de la biotecnológica Oryzon o en las socimis Doalca o Jaba I. En la actualidad es socia responsable del área legal de KPMG en Galicia.

También se sienta en el consejo Fernando Martínez, actual asesor para cuestiones patrimoniales de la familia Domínguez, así como el consejero delegado de Bimba y Lola, José Manuel Martínez, quien también es consejero independiente de Asos desde el pasado año. Se completa la cúpula con la independiente Cristina Trujillo, ex CEO de Etnia Barcelona y, antes, miembro del consejo de Desigual, marca en la que desempeño distintos cargos de relevancia durante más de una década.

Reorganización societaria

El nuevo fichaje en Bimba y Lola se produce en un momento de reorganización. A finales del pasado año, la compañía puso en marcha una operación societaria que pasó por segregar su negocio en España, el más pujante dentro del grupo. Se materializó mediante la separación de la «actividad de comercialización al por menor de prendas de vestir, calzado y accesorios en territorio español» para luego traspasarla en bloque a una nueva sociedad creada en marzo de este año, Bimba y Lola España, que adquirió todos los derechos y obligaciones derivados del negocio segregado.

Esta segregación dio continuidad a la reorganización interna que llevó a cabo la textil coincidiendo con la llegada de José Manuel Gutiérrez al puesto de CEO. Entre 2018 y 2019, la compañía constituyó tres nuevas sociedades, cada una para un área de actividad: Bimba y Lola Inversiones, Bimba y Lola Real Estate y Bimba y Lola Inversiones. Con la puesta en marcha de Bimba y Lola España las sobrinas de Adolfo Domínguez aglutinan en una sola filial el negocio más relevante del grupo.

El sector mira a Puig

Estas operaciones dentro de Bimba y Lola se producen en un momento en el que el sector del lujo en España mira hacia Puig y su proceso de salida a bolsa. Hay que tener en cuenta que la firma catalana tiene sus conexiones con la familia Domínguez. Al cabo, el gigante perfumero posee una participación de un 25% en Lonia y un 14,8% del capital de Adolfo Domínguez.

Se espera que la compañía materialice su salida a bolsa esta primavera. Según Expansión, la intención de la firma dueña de marcas perfumeras como Paco Rabanne o Nuna Ricci pasa por captar en torno a 3.000 millones de euros en una operación que combinaría una oferta pública de venta (OPV) con una oferta pública de suscripción (OPS).

El tiempo dirá si Bimba y Lola sigue o no los pasos de esta compañía. De momento, las últimas cuentas conocidas de la firma de moda son las del ejercicio finalizado en febrero de 2023, en el que se anotó unas ganancias netas consolidadas de 11,6 millones de euros, un 26,1% menos, y una cifra de negocio de 225 millones de euros, un 4,3% más, gracias al empuje del mercado internacional.

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