Estrella Galicia arranca las obras en su planta de Brasil tras rozar los 100 millones en beneficios

Hijos de Rivera ha cerrado 2021 con los mejores resultados de su historia tras pulverizar la barrera de los 600 millones de facturación y anotarse un beneficio neto de 95 millones

Ignacio Rivera, presidente ejecutivo de la Corporación Hijos de Rivera

Ignacio Rivera, presidente de Corporación Hijos de Rivera, durante la presentación de los resultados de 2021 / Ilona Rey

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Hijos de Rivera suma y sigue. La matriz de Estrella Galicia despidió el ejercicio 2021 con los mejores resultados de toda su historia. En concreto, el grupo con sede en A Coruña pulverizó la barrera de los 600 millones de euros de facturación por primera vez y rozó los 100 millones de euros en beneficios en la antesala de la doble expansión que prepara en Arteixo y Brasil.

Los ingresos de la compañía se dispararon un 27,4% respecto a un 2020 «muy duro» por la crisis del Covid, en palabras del presidente ejecutivo de Hijos de Rivera, Ignacio Rivera, y alcanzaron los 610,4 millones de euros.

Este repunte en su cifra de negocio ha tirado también de su ebitda (beneficio bruto de explotación), que ha remontado un 29% y se ha encaramado hasta los 174,4 millones de euros, y de su beneficio neto, que se sitúa a las puertas de los 100 millones de euros. Según ha desvelado Ignacio Rivera, la corporación cerró el ejercicio pasado con unas ganancias de 94,9 millones de euros, lo que supone un 79,4% que en un 2020 marcado por el Covid-19.

De Morás a Brasil

El directivo coruñés ha asegurado que 2021 ha sido un ejercicio de «mucha reorganización» y en el que se han asentado los cimientos de una corporación «mucho más ejecutiva». De cara a estos próximos tres años, los objetivos se centrarán en un plan estratégico con vigencia hasta 2024 y que incluye inversiones de 600 millones de euros (frente a los 66 millones dedicados en 2021), que irán destinados a dos nuevas fábricas, una en Brasil, y otra en el polígono de Morás, en Arteixo (A Coruña), así como a las nuevas oficinas con las que contará la compañía, situadas frente a sus actuales instalaciones.

En el caso de la fábrica de Brasil, ha indicado que las obras de construcción arrancaron este miércoles y la previsión es que estará lista a finales de 2023 (coincidiendo con el verano en el hemisferio sur). La factoría de Morás, por su parte, estará terminada en 2024.

Diferenciación e internacionalización

En este sentido, y tras destacar la cifra de ventas de 2021, Ignacio Rivera ha insistido en que la compañía trabaja con el objetivo de alcanzar los mil millones. Sobre las ventas, ha destacado los 436 millones de litros de cerveza vendida, un 27,8% más, a lo que se sumaron 189 millones de litros de agua, un 16,4% de aumento. En este caso, ha reconocido que el dato no es «tan bueno» al compararlo con los 198 millones de litros de 2019.

Como retos, ha situado la diferenciación y la internacionalización. En este último caso, ha manifestado que seguirán centrados en el mercado latinoamericano, pero también en otros, creando nuevas filiales. Sobre el primero, ha asegurado que el «sueño» es que represente el 20% de su cuota de negocio.

Además, a las filiales previstas en el mercado británico y en Portugal, ha sumado el objetivo de seguir «explorando» los de Oriente Medio y África, al tiempo que se pondrá en marcha una nueva marca de cerveza para seguir apostando por la diferenciación.

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