Forestal del Atlántico, Zelnova y Foresa: la química gallega resurge en la era de la descarbonización

Los proyectos renovables que impulsan las filiales de Gadisa y Finsa, con Iberdrola como socio, se suman a una etapa de crecimiento de la antigua química de Pharma Mar

Feijóo planta de Forestal del Atlántico

El presidente del Xunta, Alberto Núñez Feijóo, visita la empresa Forestal del Atlántico para conocer la futura planta de metanol verde en Mugardos / Europa Press

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La industria química gallega tiene un escaso peso en el conjunto estatal, representando un 1,3% de la cifra de negocio del sector en España, 89.900 millones según los últimos datos recopilados por la Federación Empresarial de la Industria Química Española, correspondientes al ejercicio de 2021. Normalmente ligadas a las empresas madereras o farmacéuticas, algunas de las compañías más representativas del sector en Galicia han tomado impulso en los últimos años para liderar proyectos renovables con la vista puesta en los fondos europeos vinculados a la descarbonización, pero también registrando incrementos en el volumen de negocio y en los beneficios.

Ese es el caso de Zelnova, antigua filial de Pharma Mar que pasó a manos de su vicepresidente y presidente de Zendal, Pedro Fernández Puentes; de Forestal del Atlántico, filial de Gadisa que impulsa una planta de metanol en Mugardos; o de Foresa, división química del grupo maderero Finsa que tejió una alianza con Iberdrola para la producción de metanol verde. La relevancia de estas industrias, que han conseguido beneficios millonarios en los últimos ejercicios, no bastan para que Galicia tenga un peso significativo en comparación con Andalucía, Madrid o Cataluña. Precisamente allí, en la comunidad que lidera el sector, tiene su domicilio en España Azko Nobel, la multinacional que compró a Pharma Mar la química Xylazel, enfocada a pinturas y productos para madera y metales.

La ambición de Foresa e Iberdrola

Foresa, con planta en Caldas de Reis, cerró su último ejercicio con 218 millones de cifra de negocio y 12,9 millones de beneficio. Finsa tiene otras dos filiales en el sector, Foresa Francia, que acabó el pasado año con 9,1 millones de beneficio; y Bresfor, con instalaciones en Gafanha da Nazaré (Portugal) y ganancias de 10,8 millones en 2022.

A punto de cumplir los 60 años de trayectoria, Foresa se dedica fundamentalmente a la producción de formaldehido y adhesivos. En 2021, Iberdrola anunció una alianza con la filial de Finsa para la construcción de una planta de hidrógeno verde de 20 MW -ampliable a 200 MW-, obtenido por electrólisis con energía renovable, así como la instalación de equipos de captura de CO2 procedente de plantas de combustión de biomasa. La iniciativa se marcó el objetivo de alimentar a la propia Foresa en la localidad pontevedresa y exportar los excedentes; y captar fondos europeos Next Generation.

La alianza se amplió al año siguiente con un nuevo proyecto en Begonte (Lugo) con una inversión que podría alcanzar los 500 millones. La Comisión Europea concedió ayudas con cargo del Fondo de Innovación de la UE a esta iniciativa, que pretende producir metanol verde mediante un innovador mecanismo. Al igual que en Caldas de Reis, Foresa e Iberdrola quieren integrar el uso industrial del hidrógeno verde que, junto con el dióxido de carbono capturado de una fuente biomásica, se utiliza para sintetizar el metanol renovable.

El proyecto de Forestal del Atlántico

Estas mismas ayudas también fueron concedidas a Forestal del Atlántico, una de las empresas de la familia Tojeiro. En este caso fueron para el proyecto Triskelion, que sintetizará el metanol utilizando agua, energía eléctrica renovable, y CO2 capturado en la planta de cogeneración existente en las instalaciones de la compañía en Mugardos.

La inversión estimada es de 176 millones y generaría unos 40 puestos de trabajo directos. Se prevé que la factoría pueda fabricar unas 40.000 toneladas anuales de metanol verde y tenga capacidad suficiente para abastecer la planta de Forestal del Atlántico y que sobre para la venta directa como materia prima para la fabricación de biocombustibles.

A la espera de los resultados de 2022, la filial de Gadisa cerró 2021 con unos beneficios de 5,5 millones.

Zelnova, el deseo de crecer

Con sede en O Porriño, Zelnova cerró el pasado ejercicio con 80 millones de ingresos y tiene como objetivo alcanzar a corto plazo una cifra de negocio de 100 millones. A diferencia de los casos anteriores, no impulsa proyecto alguno que opte a fondos europeos o, al menos, ninguno que haya trascendido; pero sí que explora el mercado en busca de oportunidades para el crecimiento inorgánico, como ya hizo con la compra de Toke en 2021.

La antigua filial de Pharma Mar comercializa marcas muy consolidadas en el sector, como Casa Jardín, Toke, Kill-Paff o ZZ. Es el primer fabricante de productos para el cuidado del hogar en Galicia y está entre los diez más importantes a nivel estatal. La compañía que dirige Juan Ameneiro no desveló los beneficios del último ejercicio, pero sí que destacó que entre 2018 y 2022, periodo del último plan estratégico, creció un 40% en ventas y un 63% en ebitda normalizado.

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