Abengoa Yield impaga el dividendo trimestral
Los directivos de la compañía aseguran que los accionistas cobrarán, aunque no aseguran una fecha. La filial, que cotiza en el Nasdaq, tenía previsto abonar el cupón el 15 de diciembre
Torre en una planta solar de Abengoa, el 17 de noviembre de 2014
Abengoa Yield aún no ha pagado el dividendo trimestral, que tenía que abonar este martes, según confirman fuentes del mercado a IFR. El retraso ha inquietado a algunos inversores y puesto bajo la lupa la sostenibilidad de las remuneraciones a los accionistas.
El pago no se hizo efectivo el martes 15 de diciembre, aunque una fuente con conocimiento de la situación dijo que no ha sido cancelado y que se pagaría en breve. Abengoa, que tiene ahora un 43% de esta filial estadounidense de alta rentabilidad, no ha comentado estas informaciones.
Las yieldco permiten a las empresas energéticas vender sus activos en funcionamiento a una entidad cotizada y atraen a inversores que buscan acciones que den dividendos y no dependan de la empresa matriz. Sin embargo, las negociaciones que mantiene Abengoa con sus acreedores para evitar la mayor quiebra empresarial española suscita dudas sobre la independencia de Abengoa Yield de la matriz española.
Estas dudas están relacionadas, sobre todo, con la existencia de cláusulas de impago cruzado (cross-default) en la deuda de financiación de proyecto de Abengoa Yield. La crisis de Abengoa, actualmente en preconcurso de acreedores, ha llevado a algunos inversores a cuestionarse el dividendo de Abengoa Yield, que estaba acordado para esta semana.
«Si fuera un directivo, no firmaría un dividendo en este momento», dijo un inversor en renta variable de un fondo de alto riesgo (hedge fund) el martes. «La única razón para pagarlo sería no diezmar la cotización, pero no a los bancos dejando escapar del negocio 40 millones de dólares», añadió.
El consejo de administración de Abengoa Yield, que cotiza en el Nasdaq, acordó el 5 de noviembre que pagaría «alrededor» del 15 de diciembre el dividendo correspondiente al tercer trimestre, por importe de 0,43 dólares por acción (o un total de 43 millones de dólares).
Acreedores nerviosos
Pero aunque este dividendo en concreto parece seguro, la capacidad de la yieldco para seguir repartiendo en el futuro grandes sumas entre los accionistas no lo parece tanto, teniendo en cuenta que la compañía podría necesitar conservar los fondos por su significativa deuda corporativa.
Abengoa Yield incrementó su línea de crédito actual de 125 millones de dólares en otros 290 millones de dólares el pasado julio para financiar adquisiciones, después de haber captado en noviembre del año pasado 255 millones de dólares en una emisión de bonos a cinco años con interés del 7%.
La compañía intentó, en un principio, refinanciar la incrementada línea de crédito con otro bono de alto rendimiento, pero los que vencen en 2019 se están cotizando con una rentabilidad del 11% en el mercado secundario.
«Está claro que ahora mismo no es posible emitir un bono de alta rentabilidad», dijo el entonces consejero delegado de Abengoa Yield, Javier Garoz, en una teleconferencia con inversores el pasado 6 de noviembre. Un analista de crédito dijo que los acreedores de la empresa deben estar «muy nerviosos».
«El mercado ya ha comprendido a estas alturas que el dividendo no es sostenible. Creo que en este punto, los inversores apreciarían que amortice parte de la deuda en lugar de pagarlo todo a los accionistas», añadió.