Prosegur deberá indemnizar a un vigilante con 15.000 euros por cambiarle el puesto sin justificación
Prosegur es una de las más grandes de España, con presencia en más de 25 países y miles de empleados
El juzgado da la razón al empleado de Prosegur
Prosegur se enfrenta a un nuevo problema después de que el Juzgado de lo Social nº 1 de Barcelona haya dado la razón a un vigilante de seguridad de su plantilla, declarando nula la modificación de sus condiciones laborales por vulnerar sus derechos fundamentales a la indemnidad y a la libertad sindical.
Según ha informado el medio Confilegal, la sentencia obliga a la empresa a mover al trabajador en su puesto original, pagarle las diferencias salariales y abonarle 15.000 euros de indemnización por daños morales.
La compañía de seguridad privada es una de las más grandes de España, con presencia en más de 25 países y miles de empleados. En esta ocasión, la demanda fue presentada por un vigilante que, según la resolución judicial, sufrió una modificación sustancial de sus condiciones de trabajo sin justificación suficiente y en represalia por su actividad sindical.
El trabajador, identificado como Diego, su nombre ficticio, llevaba prestando servicio en el Centro de Educación de Menores Can Llupià desde el año 2010, y desde 2017 lo hacía a través de su contrato con Prosegur. Su jornada laboral se organizaba en turnos rotatorios de entre ocho y doce horas, con una media de 12 a 14 días de descanso mensuales.

La relación laboral entre ambas partes no fue para nada sencilla. A lo largo de los años, Diego había mantenido varios litigios con la empresa, la mayoría de ellos de carácter económico. Entre los más recientes figura una sanción muy grave impuesta por Prosegur en 2023, que fue revocada por el Juzgado de lo Social nº 32 de Barcelona, así como otra demanda por modificación de condiciones laborales estimada por el Juzgado nº 19 de la misma ciudad.
Diego tenía un papel clave dentro de los empleados, ya que es delegado sindical. Durante años, el trabajador fue representante por el sindicato Plataforma de Representación Obrera Unitaria (PROU), y desde 2024 pasó a estar afiliado a Formación Obrera de los Trabajadores (FORT).
Su labor sindical fue clave en la defensa de los derechos de los vigilantes del centro de menores, actuando como interlocutor con la dirección y canal de comunicación entre la plantilla y los representantes de los trabajadores.
Prosegur trasladó al empleado sin motivo aparente
En mayo de este mismo año, Prosegur notificó al vigilante un traslado de centro de trabajo con efecto el 10 de junio. A partir de esa fecha, debía pasar a trabajar en el servicio de seguridad del Metro de Barcelona, dependiente de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB).
El cambio implicaba una alteración profunda de sus condiciones, pues pasaba de tener 17-18 días de trabajo con jornadas de 12 horas y hasta 14 días de descanso a 20-22 días de trabajo con jornadas de 8 horas y solo 9-10 días de descanso. Además, perdía un complemento específico que percibía durante sus vacaciones.
Prosegur justificó el traslado por supuestas razones organizativas y productivas, alegando también desavenencias personales con una compañera, tras la tramitación de dos protocolos de acoso laboral.
El juez considera que el traslado fue una represalia sindical
El conflicto llegó al Juzgado de lo Social nº 1 de Barcelona, bajo la magistratura de Pedro Tuset del Pino, quien en su sentencia estimó íntegramente la demanda del trabajador. El juez consideró que Prosegur no acreditó de forma suficiente las causas que motivaron el traslado, lo que convirtió la medida en una vulneración de derechos fundamentales.

La resolución ha concluido que la decisión de la empresa fue una represalia por la actividad sindical y las reclamaciones judiciales interpuestas por el trabajador en los años anteriores. En concreto, el juez apreció una violación de los derechos a la indemnidad, que impide represalias por ejercer acciones legales, y a la libertad sindical, al entender que la compañía trató de apartar al empleado de su papel representativo.
Como consecuencia, el tribunal declaró nula la modificación de las condiciones laborales y condenó a Prosegur a:
- Restituir al trabajador en su puesto y condiciones anteriores.
- Abonar las diferencias salariales derivadas del cambio, con intereses legales.
- Indemnizarlo con 15.000 euros por los daños morales sufridos.