El retrato, o esa obsesión del arte por conquistar la inmortalidad
El Museo de Bellas Artes de Valencia presenta una exposición sobre la evolución del retrato desde la Edad Moderna y su anhelo para vencer la muerte
Antes de la llegada de la fotografía el arte fue el encargado de perpetuar los rostros de reyes, nobles, gobernantes y burgueses, donde el retrato adquirió una categoría propia que tuvo su apogeo durante la Edad Moderna.
Para conocer sus orígenes y evolución el Museo de Bellas Artes de Valencia (MuBAV) presenta una de las exposiciones más ambiciosas de los últimos años: ‘Ánima. Pintar el rostro y el alma’, que se podrá ver hasta el 5 de febrero del año que viene.
80 piezas en exposición
Con 80 obras de sus fondos artísticos (además de un puñado de préstamos) entre pinturas, esculturas y fotografías, la exposición invita al espectador a construir puentes en los últimos 400 años de cultura, donde además de reflexionar sobre el arte también lleva a pensar en el deseo de las personas en querer engañar a la muerte y ser retratado para la posteridad.
La exposición se organiza en seis espacios. El primero es ‘Cuerpo y alma’, donde se analizan los dos extremos, la semblanza física y la emocional o intelectual.
La exposición tiende un puente a través del arte de los últimos 400 años, donde flota el deseo de los retratados de engañar a la muerte
Le sigue ‘Pasado y futuro’ medita sobre el mecanismo por el que hombres y mujeres buscaron trascender la fragilidad de su soledad: la pertenencia a un linaje.
Sobrevivir al olvido
En ‘Comunidad e individuo’ se explora la dificultad del ser humano para sobrevivir al olvido en soledad y su necesidad de la colectividad para reivindicar un papel en la historia.
En el apartado ‘Nosotras y el recuerdo’ se rescata a las mujeres ante la marginación histórica que tuvieron en los procesos de creación de memoria visual.
El punto cumbre de la muestra en el MuBAV es ‘Muerte y olvido’, donde confirma que la muerte se lleva por delante cualquier aspiración de trascendencia.
Pero este capítulo choca con ‘Fama y memoria’, que muestra a través de una construcción alegórica y dos retratos, cómo el olvido pudo y puede ser vencido gracias a la fama, a la acumulación de méritos en vida capaces de sobrevivir a la muerte física.
Diálogo entre artistas valencianos e internacionales
En las salas y pasillos del museo valenciano se puede ser testigos de los diálogos entre los retratos de “Juan Ribalta con los de Joaquín Sorolla, y los de José de Ribera con Ignacio Pinazo”, indicó su director y comisario de ‘Ánima’, Pablo González Tornel.
“Reflexionar sobre el arte es reflexionar sobre el ser humano, y esta exposición permitirá al púbico asomarse a la manera de entender el mundo y de entenderse a uno mismo en siglos no tan distintos al nuestro”, describió.
Entre los artistas presentes también figuran talentos del arte valenciano e internacional como Joan de Joanes, Roland de Mois, Francisco Ribalta, Jacob Jordaens, Pedro Orrente, Bartolomé Murillo y Manuela Ballester, entre otros.