En Andorra el verano se vive en dos ruedas
Será un país pequeño pero su territorio está lleno de circuitos para andar en bicicleta, ya sea trayectos de alta dificultad como caminos sencillos para ir en familia
Andorra es un país para descubrir en bicicleta. Foto Turismo de Andorra
Los valles y montañas de Andorra son ideales para descubrir en bicicleta pero con una cuota adicional de desafío: al estar enclavado en los Pirineos, cualquier tramo de carretera o sendero siempre tendrá algo de desnivel, sea mucho o poco.
Sin las molestias de la nieve y el frío invernal, la temporada de cicloturismo se extiende desde la primavera y a lo largo del verano, con una pequeña extensión en el otoño.
Rutas por todas las parroquias
En las propuestas para descubrir los valles, montañas y bosques en bicicleta de carretera, cada una de las siete parroquias tiene sus opciones. Puede ser la ruta de dificultad moderada de 4,1 km desde la carretera de Engolasters (1.109 metros), en la parroquia de Escaldes-Engordany, hasta La Comella (1.347 metros), en la de Andorra la Vella.
Sant Julià de Loria, la parroquia más verde, está la ruta de 5,2 km que lleva a Certés, y en la que se pasa por las iglesias románicas de Sant Martí y Sant Cerni.
O en Encamp está el duro trazado de casi 9 km con un desnivel de 754 mts que conduce, al llegar a la parte más alta, a la estación de esquí de Grandvalira.
El desafío de los puertos de montaña
En Andorra hay 21 puertos de montaña que ponen a prueba la resistencia de las piernas, los pulmones y la mente del ciclista.
En Andorra hay 200 km de rutas de cicloturismo con diferente grado de dificultad, de las que algunas llegan a 21 puertos de montaña
Entre ellos se encuentra el Port d’Envalira, al que se llega tras pedalear 4,9 km desde el Pas de la Casa, y que por su ubicación ha sido etapa del Tour de France, la Vuelta a España y la Vuelta a Cataluña.
Otro es el Coll de la Gallina, a 1.910 metros de altitud, un recorrido catalogado como difícil con un desnivel del 8,4%, y que los memoriosos del ciclismo deportivo recuerdan que fue allí donde Alessandro Ballan triunfó en la Vuelta a España en 2008 y poco después se proclamó campeón del mundo.
También se ha usado como etapa en la Vuelta a España la Collada de Beixalís, otro exigente recorrido con 556 metros de desnivel y una inclinación media del 8,4%.
Rutas sencillas
Sin ánimo de romper las piernas, más suaves son las rutas como la de El Forn, que comienza en Canillo y termina en la estación de Grandvalira, en un trazado de 5,2 km que pasa por la iglesia románica de St. Miquel de Prats.
También es moderada la ruta que va por la CS-260 hasta la Coma de Ransol, de 4,5 km y un nivel moderado de exigencia.
En BTT
Para los que quieran experimentar otro tipo de adrenalina, hay opciones para las diferentes modalidades de BTT, ya sea vertiginosos descensos de downhill como sitios para realizar saltos y sortear obstáculos en la variante four cross o ir campo a través en recorridos integrados por la naturaleza.
Para los amantes del BTT más exigente, hay un circuito de 6,8 km por el Camino de Gallo, que une Canillo y Soldeu, con duros ascensos y descensos.
Recorridos para la familia
Si se quiere pedalear en plan familiar aunque sean circuitos de BTT, o en bicicleta eléctrica, hay varias rutas sencillas para realizar en Andorra.
A pesar de sus valles y montañas, en Andorra hay varios circuitos sencillos ideales para las familias o que se pueden hacer en bici eléctrica
Una es la de 15 km desde el pueblo de Ordino hasta el Serrat a través del Parque Natural de Sorteny y Arcalís; la que va desde Encamp a Les Pardines rodeando el bonito lago de Engolasters en un recorrido de 8,5 km; o la que va desde Escaldes a Engordany, de 6 km.
También está la opción de pasar el día demostrando las habilidades en el Vallnord Bike Park, un enorme recinto en la estación de Vallnord Pal Arinsal que presenta circuitos para poder seguir disfrutando de este deporte con más de 40 km de trayectos distribuidos en diferentes niveles como enduro, descenso, pump track o cross country.
Citas deportivas
El verano suele ser una cita obligada para los amantes del ciclismo. Además de ser periódicamente etapas del Tour o la Vuelta, aquí también se ha organizado hace pocas semanas la UCI Copa del Mundo de BTT, y el 24 de julio tuvo lugar la Volta als Ports, la prueba ciclística más antigua de Andorra.
El próximo fin de semana llega La Purito, una marcha ciclística organizada por Joaquim Purito Rodríguez, que sigue el duro recorrido de la 11ª etapa de la Vuelta de 2015, con tres circuitos: de 115, 80 y 30 km. Los nostálgicos por esas gestas de alta montaña no se lo pueden perder.
Juan Pedro Chuet-Missé es redactor de Cerodosbé/Tendencias desde 2017, y del Grupo Economía Digital desde 2015. Especialista en destinos fuera de lo común, cultura, estilo de vida, viajes y todas aquellas historias que vale la pena contar.
