Gracias a este puente Croacia por fin está unida

La franja sur de Croacia queda unificada con el resto del país con la inauguración del puente de Peljesac, que evita tener que atravesar por una franja perteneciente a Bosnia-Herzegovina

Croacia festeja la apertura del puente de Peljesac. Foto EFE-EPA-Stringer

Quien haya viajado a Dubrovnik y quiso subir por el litoral de la Costa Dálmata hacia el norte de Croacia recordará que a los 60 kilómetros había que pasar un control fronterizo, hacer unos nueve kilómetros más, y otra vez a presentar los pasaportes en un nuevo puesto.

La razón es que la ruta del sur croata atraviesa una pequeña franja costera que pertenece a Bosnia-Herzegovina, a la altura de la localidad de Neum, que es la única salida al mar de ese país de los Balcanes.

Y como ese estado no pertenece a la UE, el control de pasaportes de uno y otro lado es obligatorio.

En temporada estival las colas para pasar los puestos fronterizos podían ser kilométricas, como también eran maratonianas las esperas para tomar el transbordador entre las ciudades croatas de Trappano y Porto Tolero; una alternativa para evitar los atascos en la carretera.

Vista del nuevo puente en su inauguración. Foto EFE-EPA-Stringer

El nuevo puente

A partir de esta semana esos colapsos quedarán en el pasado por la apertura del nuevo puente de Peljesac.

La carretera que llega a Dubrovnik atraviesa nueve kilómetros de territorio bosnio, a la altura del puerto de Naum

Este puente, que ha costado 525 millones de euros (en un 68% financiado por la Unión Europea), comunica la península homónima con la franja costera que está tras pasar la frontera con Bosnia.

La estructura de hormigón armado tiene 2,4 kilómetros de largo, con un ancho de 23,6 metros y una altura máxima de 98 metros.

El más grande de Croacia

Este puente atirantado es el más grande de Croacia. Su diseño presenta 13 arcos, entre ellos cinco principales de 285 metros, y seis pilares de 33 metros.

Para el acero se utilizaron más de 50 mil toneladas de acero fabricados en las siderurgias croatas y el que cual fue fabricado de manera especial para resistir las inclemencias del mar y permitir flexibilidad ante los vientos que azotan la zona.

El puente evita la franja costera de Bosnia-Herzegovina que aísla a la parte sur de Croacia. oto EFE-EPA-Stringer

El puente fue construido por la compañía china China Road and Bridge Corporation (CRBC), quien ofreció los precios más bajos que sus competidores para ganar el concurso; donde dos tercios de su fuerza de trabajo eran operarios del país asiático.

Dudas del lado bosnio

El gobierno bosnio aceptó la construcción del puente a regañadientes. En un principio exigió que la altura de la infraestructura aumentara 55 metros, para evitar problemas con la circulación marítima al puerto de Neum.

Antes de la existencia del puente las colas para pasar los dos puestos fronterizos entre Croacia y Bosnia-Herzegovina podían ser kilométricas

Un grupo de maratonistas fueron los primeros en cruzar el puente. Foto EFE-EPA-Stringer

Aunque la obra será un alivio para los turistas y los residentes croatas, los comercios de Neum ven un perjuicio inminente porque se beneficiaban de los viajeros que paraban a comer o comprar bebidas para aliviar las esperas de los controles.

Además esta pequeña ciudad bosnia sacaba partido que sus precios más bajos eran una tentación para los croatas a ir de tour de compras.

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