Piscinas naturales en Madrid: estas son las más refrescantes y menos conocidas

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Madrid, conocida por sus veranos calurosos, ofrece una variedad de piscinas naturales y zonas de baño que se convierten en refugios perfectos para quienes buscan escapar del calor sofocante. Desde paisajes montañosos hasta áreas recreativas cerca de la ciudad, estas piscinas naturales permiten a los madrileños y visitantes disfrutar de un entorno natural mientras se refrescan. Aquí te presentamos algunas de las mejores opciones para disfrutar de un día de verano al aire libre.

Las Presillas de Rascafría

Situadas en el pintoresco Valle de El Paular, en la Sierra de Guadarrama, las Presillas de Rascafría son una de las opciones más populares de piscinas naturales para quienes buscan un lugar donde relajarse en plena naturaleza. Estas piscinas naturales están formadas por el río Lozoya, que crea tres áreas de baño rodeadas de amplias zonas verdes perfectas para tomar el sol, hacer picnics o simplemente descansar.

Llegar a las Presillas es sencillo. Si viajas en coche desde Madrid, solo debes tomar la A-1 hasta el kilómetro 69, luego desviarte hacia Rascafría por la M-604 y continuar hasta el kilómetro 28,6, pasando por localidades como Lozoya y Pinilla del Valle. Para quienes prefieren el transporte público, la línea de autobús 194A es la opción más conveniente.

Lo mejor de las Presillas es que el acceso es gratuito, aunque el aparcamiento tiene un coste de 9 euros por coche y 4 euros por moto. Las piscinas están abiertas de lunes a domingo, de 10:00 a 21:00 horas, generalmente hasta mediados de septiembre, permitiendo a los visitantes disfrutar de un largo día de baño y diversión.

Las Pozas de La Angostura

Otro rincón natural de Rascafría que merece la pena explorar son las Pozas de La Angostura. Estas piscinas naturales están formadas por el paso del río Lozoya y destacan por sus rápidas y pequeñas cascadas, creando un paisaje de ensueño rodeado de bosques frondosos. Este lugar es ideal para quienes buscan una experiencia más salvaje y menos concurrida que otras piscinas naturales de la región.

Para llegar a este paraíso escondido, debes dirigirte al kilómetro 32,4 de la carretera M-604, donde encontrarás una pista forestal que te llevará hasta el puente de piedra de La Angostura. Es un destino perfecto para los amantes del senderismo, ya que el acceso es libre y no requiere de una entrada. El entorno es completamente natural y no hay instalaciones adicionales, por lo que se recomienda llevar todo lo necesario para disfrutar del día.

Las Berceas en Cercedilla

Las Berceas de Cercedilla son una opción fantástica para quienes desean combinar un día de senderismo en la Sierra de Guadarrama con un refrescante baño en piscinas naturales. Ubicadas a 1.400 metros de altitud, en el valle de Fuenfría, estas piscinas reciben tratamiento para su uso recreativo, lo que las convierte en una opción segura y accesible para toda la familia.

Desde Madrid, se puede llegar en coche tomando la carretera Fuenfría, M-966, hasta el kilómetro 3,9. Alternativamente, las líneas de autobús 684, 1, 680, LE9 o 692SE y la línea C8 de tren de cercanías también te acercarán a este destino. Es importante recordar que las entradas se deben adquirir con antelación a través de su página web.

Estas piscinas naturales están abiertas de lunes a domingo, de 10:00 a 20:00 horas, desde el 14 de junio hasta el 27 de agosto. El precio de entrada varía: 9 euros entre semana y 12 euros los fines de semana y festivos para adultos, con tarifas reducidas para niños, mayores de 65 años y empadronados en Cercedilla.

Piscina Natural de Riosequillo

Si buscas una piscina natural de gran tamaño, la Piscina Natural de Riosequillo es tu destino ideal. Situada cerca de Buitrago de Lozoya, esta piscina cuenta con una superficie de 4.500 metros cuadrados, lo que la convierte en la más grande de España. Con un aforo de hasta 2.000 personas, es perfecta para aquellos que buscan un lugar amplio y bien equipado para disfrutar de un día de verano.

Para llegar a Riosequillo, debes tomar la A-1 hasta la salida 74 en dirección a Buitrago de Lozoya y seguir las indicaciones hacia el área recreativa de Riosequillo. También es posible llegar en transporte público utilizando la línea de autobús 191 desde Plaza de Castilla.

Estas piscinas naturales están abiertas de martes a domingo, de 11:00 a 20:00 horas, y el precio de la entrada es de 9 euros entre semana y 13 euros los fines de semana y festivos. Existen tarifas reducidas para niños, jubilados, personas con discapacidad y familias numerosas. Los empadronados en la zona disfrutan de acceso gratuito entre semana y de 4 euros los fines de semana.

Pantano de San Juan

Aunque no es una piscina natural en el sentido estricto, el Pantano de San Juan es conocido como «la playa de Madrid» y es uno de los destinos favoritos para los madrileños en verano. Ubicado a unos 70 kilómetros de la capital, este embalse cuenta con varias zonas de baño y playas de arena, así como opciones para practicar deportes acuáticos.

Se puede llegar en coche por la M-501 en aproximadamente una hora, y en transporte público con el autobús 551, la línea C-3 de tren de cercanías o el metro M-12. El acceso al pantano es gratuito, aunque algunos servicios como salvamento y actividades acuáticas solo están disponibles desde mediados de junio hasta mediados de septiembre.

Estas piscinas naturales y zonas de baño ofrecen una excelente alternativa para quienes buscan huir del calor del verano en Madrid. Desde la tranquilidad de las montañas hasta las amplias áreas recreativas, cada uno de estos destinos proporciona una experiencia única en contacto con la naturaleza. Así que, si estás en Madrid y necesitas un respiro del calor, no dudes en explorar alguna de estas refrescantes opciones.