Playas vírgenes, ciudades perdidas y paisajes hipnóticos en los 5 mejores road trips de Turquía
Milenios de historia, exuberantes bosques, antiguas ciudades y tesoros históricos desfilan ante nuestros ojos en estos 5 road trips que descubren las caras más inesperadas de Turquía

Así es el viaje de 56 días que atraviesa Europa en bus.
Con una historia milenaria a caballo entre dos continentes (tanto en el sentido literal como en el metafórico), Turquía es un destino fascinante y plagado de contrastes que guarda secretos de antiguas civilizaciones y ciudades perdidas, modernos museos y paisajes cambiantes bañados por el Egeo, el Mediterráneo y el Mar Negro que van de las playas turquesas a los bosques profundos y los caprichos geológicos.
Entre Asia y Europa, viajar a Turquía no es solo hacerlo en el espacio sino también en el tiempo. Hititas, lidios, urartus, cimerios, asirios, persas, griegos, romanos, selyúcidas y otomanos son las grandes civilizaciones que lo han habitado y cuyas huellas se siguen a través de necrópolis, ecos de epopeyas homéricas y yacimientos que solo se pueden descubrir buceando.
Más allá de los clásicos circuitos que incluyen Estambul, la Capadocia o las ruinas de Éfeso, proponemos cinco road trips por algunas de los más bellos paisajes de Turquía, carreteras panorámicas aptas para coches y caravanas que convertirán el camino en la mejor parte del viaje.
De Çanakkale a Ayvalık
La primera de las rutas discurre sobre la costa de mar Egeo, entre las ciudades de Çanakkale y Ayvalık.
En poco más de 160 km, este roadtrip pone de relieve el vasto patrimonio cultural de la región, su increíble naturaleza y sus playas vírgenes.
Çanakkale es el punto de partida de la ruta, que se declina entre tonos verdes y azules, un lugar fascinante de crónicas del pasado, especialmente si se llega a la ciudad atravesando la histórica península de Gallipoli, cubierta de bosques.
En la antigua Çanakkale, donde quedan vestigios de las epopeyas de la Ilíada y la Odisea de Homero, se pueden observar los milenios de historia de la región.
A las afueras de la antigua ciudad de Troya se encuentra el Museo de Troya, así como la primera parada de la Ruta de Eneas, la primera y única ruta cultural registrada por el Consejo de Europa que parte de Turquía.
Al sur de Çanakkale, en Ayvacık, se encuentra la antigua ciudad de Assos, conocida por sus bahías y playas desiertas. Los pueblos de la zona son otra de las paradas por sus pintorescas casas de piedra.
La última parada es la ciudad costera de Altınoluk, en el distrito de Edremit, donde se puede visitar algunas de las maravillas naturales como el Parque Nacional del Monte Ida, la cascada de Sütüven, el estanque de Hasanboğdu, el cañón de Şahinderesi e importantes centros balnearios en Güre, que cada año acoge turistas de todo el mundo en sus spas.
De Ayvalık a Çeşme
Después de Ayvalık, rumbo al sur, el recorrido por la costa sobre el Egeo continúa por las montañas de Madra y la ruta de Bergama hasta descubrir la ciudad antigua de Pérgamo.
En Izmir hay que parar en la ciudad marinera de Foça, con una zona histórica llamada Eski Foça y con pintorescas carreteras y unas vistas impresionantes, además de gran fama por sus platos de marisco.
Otras de las paradas imprescindibles durante el trayecto son Urla, conocida por sus alcachofas y famosa por sus restaurantes gourmet; Seferihisar, la ‘ciudad lenta’; Kuşadası, localidad de turismo de sol y playa y Şirince, famosa por sus vinos locales.
Las antiguas ciudades de Miletos, Priene y Éfeso y las iglesias de los Siete Durmientes y de la Virgen María son también parte de los atractivos de este recorrido que acaba en Çeşme, un popular destino de vacaciones frente al mar.
De Kalkan a Antalya
Al sur de Turquía, ya asomados al Mediterráneo, el recorrido entre Kalkan y Antalya (alrededor de 200 km) esconde casi en cada curva de la carretera una panorámica de aguas claras, bahías desiertas y montañas verdes con paradas en Patara, Kalkan y Kaş, Olympos, Çıralı y Antalya.
Considerada una de las ciudades más importantes de la antigua Licia, Patara es sin duda uno de los lugares más espectaculares de la región que conserva edificios como teatro, el edificio del parlamento, el faro, el arco de la ciudad, la calle colonada, templos e iglesias.
Fue aquí donde nació San Nicolás, también llamado Santa Claus o Papá Noel, aunque fue en Demre donde ejerció como obispo y alcanzó la santidad. También, es el lugar que alberga la tumba del Santo y la histórica iglesia, que fue lugar de peregrinación durante la Edad Media.
Otro punto del recorrido es la famosa región de Antalya, la perla del Mediterráneo, donde explorar las profundas aguas azules de Kaş, uno de los centros de turismo de buceo más importantes de Turquía y observar las huellas de las antiguas civilizaciones mediterráneas bajo las aguas.
Desde Kaş, la siguiente parada está en Çıralı, próxima a las ruinas de la antigua ciudad de Olympos, un importante puerto licio, hasta llegar a Antalya. No olvides visitar el Museo Arqueológico de Antalya, donde se exponen magníficas obras de diferentes civilizaciones mediterráneas.
De Eskişehir a Isparta
Dejamos la costa pero no el oeste de Turquía para viajar de Eskişehir hasta Isparta, conocida como la ‘ciudad de las rosas’.
En el camino, lugares como la ciudad de Odunpazarı, incluido en la lista de lugares Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, el bazar de artesanía Atlıhan, donde se exponen ejemplos de la artesanía tradicional de la región o el Museo de la Sepiolita (Meerschaum), único en el mundo.
A medida que avanzamos, la naturaleza cobra protagonismo con Yalvaç y Eğirdir, el Parque Nacional del Lago Kovada, hábitat de cientos de especies de aves, el Parque Natural de Gölcük, el lago Eğirdir, y sus magnéticas vistas al atardecer o el pueblo de Kuyucak, rodeado de campos de lavanda.
En la zona también se encuentra la Ruta de San Pablo, camino de peregrinación que sigue los pasos del primer misionero de la historia del cristianismo en uno de sus viajes.
De Bolu a Çamlıhemşin
La última de las propuestas, de casi 1.000 km de recorrido, nos lleva al norte de Turquía en un road trip que parte de la ciudad de Bolu, famosa por sus lagos, y llega hasta Çamlıhemşin, paraíso de las montañas de Rize, atravesando a su paso majestuosos paisajes de espléndidos bosques.
El recorrido atraviesa el Parque Nacional de Yedigöller, telón de fondo de la belleza de postal de Bolu, en dirección a Safranbolu, una localidad con calles estrechas y casas de madera con característicos ventanales. La verde Kastamonu y las históricas ciudades portuarias de Sinop y Samsun son otras de las paradas, ya sobre la costa del Mar Negro.
El siguiente punto es Ordu, donde se encuentran maravillas naturales como las mesetas de Perşembe y Çambaşı, las cascadas de Çiseli y Uzundere o el cañón de Geçilmez.
Le sigue Yeşilce, un pequeño pueblo donde la vida moderna se mezcla a la perfección con la sencillez, y el monasterio de Sümela, en Trabzon, reconocido como Patrimonio Mundial de la UNESCO, con su espectacular ubicación junto a un acantilado.
En la última parada, en Çamlıhemşin, encontramos las mesetas de Ayder, Pokut, Gito y Sal con su atmósfera de cuentos de hadas, un broche perfecto a un viaje extraordinario.