Los mejores restaurantes de carretera para parar en mitad del viaje

Guía Repsol estrena un nuevo distintivo, Soletes de Carretera, para localizar los restaurantes que merecen una parada camino a la playa o la montaña

Estación de servicio Boceguillas, en la A-1. Foto: Guía Repsol.

No hace mucho tiempo que el mejor indicativo que teníamos para escoger un restaurante de carretera era el número de camiones estacionados en el aparcamiento. Aquí se come bien, pensábamos, y tomábamos el desvío. Ahora tenemos un nuevo aliado para localizar los mejores lugares donde parar en ruta, el sello Soletes de Carretera, que certifica más de 300 sitios que merecen la pena en las vías con más tránsito del país.

El desayuno que mejor sienta después de un buen madrugón para ponernos en carretera, con su bollería recién hecha o sus tostadas con aceite de oliva; el pincho de tortilla que te devuelve la vida a media mañana; el bocadillo que te da la fuerza para los kilómetros que te echen o la terraza en la que desconectar del asfalto por un rato.

Ya sean barras de pie o asadores, los restaurantes de carretera son una suerte de oasis para los viajeros y, aunque normalmente no esperamos disfrutar en estos lugares de la experiencia gastronómica de nuestra vida –aunque las hay-, siempre es reconfortante escoger bien la parada.

Un viaje por carretera puede ser el motivo para descubrir un (muy) buen restaurante. Foto: Guía Repsol.

Y aquí tenemos nada menos que 300 de esos sitios, escogidos por los expertos de Guía Repsol y repartidos por las principales carreteras: A-1, A-2, A-3, A-4, A-5, A-6, A-7 y AP-7

Restaurantes de carretera que sí

Casi por aclamación popular, explican desde Guía Repsol, tras el éxito de los Soletes, la recopilación de lugares apetecibles donde comer a un precio asequibles o, mejor, los que recomendarías a un amigo, y que ya cuentan con dos ediciones, Soletes de Verano (centrados en terrazas y chiringuitos) y Soletes de Otoño (en menús del día y barras), llega esta nueva edición.

Porque, aunque lo importante sea el destino, “cuando paramos para repostar o descansar un rato en mitad del viaje, nos gusta encontrar un sitio agradable aunque sea para tomar un café”, apunta María Ritter, directora de Guía Repsol, en la presentación de estos locales que se dan a conocer a las puertas de la Semana Santa, para muchos el primer viaje del año.

Hasta 300 establecimientos lucirán el nuevo distintivo Soletes de Carretera con el que Guía Repsol distingue los mejores lugares para hacer una parada en ruta

Por eso, sus expertos repartidos por todo el territorio han buscado los sitios a los que recurrir cuando el camino comienza a pesar y apetece hacer una parada, ya sea para estirar las piernas o para detenerse un buen rato.

Área de Boceguillas, en Segovia, ya tiene su Solete de Carretera. Foto: Guía Repsol.

¿La conclusión? Que, aunque a veces cueste encontrarlos, sí es posible pasar un rato agradable y probar un bocado que merezca la pena en locales pensados para clientes que están de paso.

En las principales carreteras del país

Ventas donde los vecinos se acercan para comer buen producto de la zona de camino a la playa, áreas de servicio donde catar los mejores dulces de la zona y cafeterías a orillas de una autovía que sirven un café memorable son algunos de los establecimientos que figuran en esta nueva entrega de Soletes.

¿Vas a la costa de Levante desde Madrid? Puedes parar al pasar por Cuenca en Venta San José o la típica El Vasco, en Villarubio. Las Bairetas, en Chiva, da la bienvenida a la Comunidad Valenciana, con su arroz de pato y ajos tiernos aunque si quieres un esmorzaret tradicional casi mejor que esperes a parar en L’Alter (Picassent), ya muy cerca de Valencia ciudad.

Solete de Carretera_La Morera ( Mataró-Barcelona). Foto: Guía Repsol.

Si el destino es Andalucía quizás vayas por la A-4. Entre los lugares recomendados para hacer una parada encontramos desde El Llano, en La Guardia, y El Amigo, en Ocaña, para comer bien a buen precio al paso por Toledo, a Mesón de Despeñaperros, en Santa Elena (Jaén) donde comer algo frente al Parque Natural que le da nombre.

Venta Esteban, justo antes de llegar al núcleo de Jerez de la Frontera (Cádiz), sirve una ensaladilla difícil de olvidar, mientras que si vas por la Autovía del V Centenario (A-49), que une Sevilla con Huelva y el sur de Portugal, es buena idea parar en Chocaíto (La Palma de Condado) y pedir coquinas.

Si el destino es Galicia y la vía la A-6 encontrarás casi un viaje gastronómico por Castilla y León desplegado en paralelo a la carretera.

En Ávila, a la altura de Adanero, hay que parar para comerse uno de los bocadillos de autor de MA, y en Tordesillas (Valladolid) el almuerzo, en concreto en Doña Carmen. Ya en León, una parada muy frecuentada por los viajeros habituales es La Magdalena de Combarros, en Brazuelo.

En Las Bairetas se come una buena paella de leña. Foto: Guía Repsol.

Al llegar a Lugo, hay que detenerse en Casa do Labrego, en Baamonde y si tomamos en A Coruña a AP-9 encontraremos excelentes descansos para comer rico en Los Manueles (A Coruña) y La Mesa de Conus (Vigo). Si tomamos la Autovía de las Rías Baixas (A-52), dos buenas opciones son El Chiringuito del Río, en Puebla de Sanabria (Zamora), y Fogar do Santiso, en Allariz (Ourense),los dos con refrescantes jardines.

La A-7 y la AP-7 recorren todo el este y sur penínsular, conectando Cataluña con Andalucía. Allí mismo podemos encontrar el primer buffet de Cataluña, abierto en 1977, concretamente el Buffet d’Altafulla en Alatafulla (Tarragona). Al llegar a Castellón, El Refugio es una buena opción para desayunar mirando al Desert de les Palmes de Benicassim, mientras que a la altura de Alicante hay que probar el cuscús del Bar Coratge, en Beniarbeig.

Venta El Abasto sorprende en La Aparecida (Murcia), y cede el testigo a Venta El Pobre, en Níjar (Almería) en una carretera gastronómica con paradas también en Málaga, como la Venta García, en Casares.

Paradas que reconfortan cuerpo y mente. Foto: Guía Repsol.

Slow travel

Además de estas recomendaciones, entre los Soletes de Carretera hay también recomendaciones Slow travel que reivindican el placer de viajar sin prisa y disfrutar de los caminos alternativos cuando te llevan a lugares con ese algo que los hace especiales.

Es el caso de asadores en pueblos que exigen desvíos (no más de 15 minutos) y que a cambio regalan excelentes mesas y manteles, terrazas en mitad de la naturaleza, sidrerías, hamburgueserías o barras de calidad.

Al igual que en anteriores ediciones, reconocerás los Soletes de Carretera por el diseño del Solete firmado por Luis Úrculo que encontrarás en los establecimientos.

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