La Torre Eiffel se viste de dorado
El icono de París presentará un color más cercano al dorado, para que tenga una nueva cara ante los Juegos Olímpicos de 2024

La torre será más dorada de lo que la conocemos. Foto SETE
En un par de años la Torre Eiffel se verá diferente. Tendrá la misma silueta elegante, seguirá reinando desde sus 324 metros de altura, pero no presentará el color marrón que es familiar desde los años ’60.
A partir del 2022 el monumento más famoso de París exhibirá su nuevo color dorado, o más exactamente, será un revestimiento marrón-amarillento concebido para que coincida con los Juegos Olímpicos de 2024.
Cuatro años de maquillaje
Los trabajos de repintado de la torre se iniciaron en el 2019 y tendrán un coste de 50 millones de euros.
Los operarios tienen que remover 19 capas de pintura para poder repintar la torre de dorado
No es una tarea sencilla: los operarios, colgados de arneses y plataformas aéreas, tienen que remover 19 capas de pintura, con una marcada presencia de plomo, lo cual obliga a extremar las medidas de seguridad.
Cambio de colores
Cuando se inauguró para la Exposición Universal de París de 1889 la famosa torre tenía un color más bien rojizo.
Recién en 1907 volvió a ser pintada en un color dorado, más acorde con la idea que tenía Gustav Eiffel cuando diseñó la gigantesca estructura de hierro.
La idea era que el monumento, al recibir la luz del sol, brillara tal como lo hacen otros sitios emblemáticos de París, como la cúpula del Palacio de los Inválidos.
Ya lo anticipó Patrick Branco Ruivo, consejero delegado de la compañía que explota comercialmente la torre: “no será algo revolucionario, pero cuando el cielo esté despejado en París la veremos más metálica y brillante”.
Emblema de los JJOO
El directivo anticipó que la torre “tendrá un tono un poco más dorado que el color que estamos acostumbrados a ver, a tiempo para los Juegos Olímpicos”.
La Torre Eiffel será escenario de pruebas de los Juegos Olímpicos como la natación en aguas abiertas y el triatlón
La torre será el escenario de fondo de competencias como la natación en aguas abiertas, en el Sena; o el triatlón.
Además será la postal perfecta para conciertos, presentaciones y, seguramente, para la ceremonia inaugural.
Los proyectos que vienen
Este monumento se suele pintar cada siete años, pero según asegura la empresa explotadora, esta será la mayor operación de renovación en sus 130 años de historia.
No será la única obra de infraestructura en París frente al evento deportivo. Entre los trabajos más importantes se encuentran las mejoras del Centro Pompidou, la actualización del Puente de Iena, la limpieza del Sena y, cuando terminen los juegos, transformar la avenida de los Campos Elíseos en un paseo peatonal.