La oferta de Atlantia deja fríos a los accionistas de Abertis

La Caixa y los accionistas de referencia de Abertis esperaban una prima mayor y confían en que en el largo proceso de opa, Atlantia mejore el precio

Isidro Fainé, presidente de la Fundación La Caixa. EFE

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Atlantia dio por fin este lunes el paso que Abertis y la Fundación Bancaria La Caixa esperaban y anunció los términos de la opa amistosa sobre la concesionaria española. La oferta tiene varios caramelos para convencer a los accionistas de Abertis, especialmente a La Caixa: parte en cash y parte en acciones, mantenimiento de la sede en Barcelona y traspaso del negocio en Latinoamérica. Pero es floja en su punto más importante: el precio.

El grupo italiano controlado por la familia Benetton ofrece 16,50 euros por acción, cifra que valora Abertis en 16.340 millones de euros. La oferta es por el 100%, aunque supeditada a superar el 50%, y con entre un 77% y un 90% en efectivo, mientras el resto es en acciones de la italiana. Los accionistas que acepten el intercambio no podrán vender hasta febrero de 2019.

Esta estructura de oferta permite a La Caixa, primer accionista de Abertis con el 22,25% de las acciones, hacer caja con una parte de su participación y, a su vez, entrar en el accionariado de Atlantia para asegurarse los dividendos del nuevo gigante de las autopistas. No obstante, el precio ha decepcionado al accionista de control de Abertis.

La respuesta de Criteria, el holding inversor 100% Caixa, a la opa fue rápida. Acuse de recibo y una breve explicación: valorarán la oferta “con tiempo, con detenimiento y sin prisas”. La de Abertis, todavía más indefinida. Tras calificar la opa de “voluntaria y no solicitada”, aclaró que “no se pronunciará hasta que sea legalmente preceptivo”.

Opa de Atlantia: La Caixa y Abertis guardan silencio y no pasan del acuse de recibo

¿A qué responde tanto silencio? Principalmente, a la prudencia que suele acompañar estos procesos, pero también a que el precio ha decepcionado. Fuentes financieras explicaron que los accionistas de Abertis, esencialmente La Caixa, aunque también los fondos Capital Group, Lazard y Blackrock –este último incrementó su participación recientemente–, esperaban una prima que finalmente no se ha producido.

En el anuncio de opa, Atlantia asegura ofrecer una prima del 20%, pero tiene truco. Habitualmente, se calcula el precio sobre la media de la cotización de los últimos seis meses. El grupo italiano lo hizo así, pero cogiendo los seis meses anteriores al primer hecho relevante, del 13 de abril, en el que admitían interés. El problema es que en este mes, Abertis se ha disparado en bolsa y, además, ha crecido con compras en Francia e Italia.

Los 16,50 euros por acción suponen una prima sobre el cierre del viernes del 0,3%, porcentaje que subió ligeramente este lunes, ya que la cotización de Abertis retrocedió un 0,61%, hasta los 16,35 euros. Este descenso también muestra cierta decepción, mientras en Italia, los inversores celebraron la oferta con un incremento del 2,48% de Atlantia.

Las bolsas respondieron a la opa con una bajada de Abertis y una subida de Atlantia

En las últimas semanas, varios analistas y bancos de inversión valoraron Abertis con precios muy por encima del de la opa, llegando hasta los 18 euros por acción. Además, se barajaba una prima de al menos el 10% sobre la cotización actual. A este precio sí que Isidro Fainé estaría dispuesto a entregar el control de Abertis, pero al actual, en La Caixa tendrán que valorar muy bien la operación.

Lo cierto es que sigue siendo atractiva para la Fundación Bancaria La Caixa. Tomando en consideración el valor en libros de la participación de Abertis, podría obtener unas plusvalías de más 2.500 millones si vendiera toda su participación, o de casi 1.700 millones si aceptara un canje de acciones del 23% –el máximo permitido por la opa, a priori– y cobrara el resto en efectivo.

Pero en La Caixa no están contentos con la oferta. De hecho, no dan el precio por definitivo. La operación acaba de arrancar y en los meses que quedan hasta que se inicie el periodo de aceptación –algunas fuentes hablan de otoño–, Atlantia puede verse obligada a mejorar la oferta. Dependerá de la evolución de Abertis en bolsa y de la disposición de sus accionistas a aceptar la oferta. También de las ganas que tengan los italianos de que la opa siga siendo amistosa.

El precio ajustado también puede abrir otra vía, como apuntaron fuentes financieras a Economía Digital: varios fondos podrían pujar por Abertis si el precio es atractivo. Lo que está claro es que el baile solo ha hecho que empezar.

Los tempos de la opa de Atlantia sobre Abertis

Ahora se abre un largo periodo que, en el mejor de los casos, concluirá a final de año, según la previsión –optimista– de Atlantia. En las próximas semanas, el grupo italiano tiene que presentar el folleto de la opa ante la CNMV. Mientras espera su aprobación, que puede ser directa o tras pedir modificaciones, puede ir solicitando las autorizaciones de las autoridades de la competencia de la UE, España, Chile, etc.

No será hasta que la CNMV apruebe el folleto de opa, y tenga todos los permisos, cuando empezará el periodo de aceptación de la opa. Hasta entonces, Abertis no tiene la obligación de pronunciarse formalmente sobre la oferta, recomendando a sus accionistas aceptarla o rechazarla. No parece que vaya a hacerlo antes. Si no hay contratiempos, nos vamos ya al último trimestre, según las fuentes consultadas.

Atlantia-Abertis: un gigante con 14.000 kilómetros de autopistas y un ebitda de 6.600 millones

Los planes de Atlantia pasan por crear un gigante mundial con 14.000 kilómetros de autopistas en 15 países y un ebitda de 6.600 millones de euros. Atlantia, que tendría hasta un 16,4% de su accionariado –y tres consejeros– en manos de los actuales accionistas de Abertis, se quedaría el negocio en Italia y la India, el telepeaje y los aeropuertos, y traspasaría a Abertis sus autopistas de Chile y Brasil.

De esta manera, la compañía española, que mantendría su marca y su sede en Barcelona, y que seguiría cotizando si la opa no superase el 98% de aceptación, gestionaría las autopistas de España, Francia y Latinoamérica. Aunque, eso sí, bajo el control total de la matriz italiana, y olvidándose de Cellnex.

Xavier Alegret

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