Cientos de personas se beneficiarán de la nueva inversión en Andalucía: 547 millones para el empleo
La Junta de Andalucía ha anunciado un plan histórico de ayudas laborales en la comunidad para las personas discapacitadas
Rocío Blanco, consejera de Empleo, en el salón de Plenos del Parlamento. Foto: Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo
La Junta de Andalucía ha puesto en marcha el mayor paquete de ayudas laborales destinado a personas con discapacidad en la historia de la comunidad, un movimiento descrito por el Ejecutivo autonómico como un paso decisivo para corregir una desigualdad persistente en el acceso al empleo., de acuerdo con la información brindada por El Economista.
El Consejo de Gobierno ha aprobado el II Plan de Empleo de Personas con Discapacidad en Andalucía (Pepda) para el periodo 2025-2028, una estrategia que moviliza 546,6 millones de euros y que aspira a atender a más de 160.000 andaluces con discapacidad, en el que se ha convertido en la mayor ayuda para este sector de trabajadores en Andalucía.
Andalucía pone en marcha un plan histórico para integrar a las personas con discapacidad
Un programa que se ha iniciado debido a un problema que la propia Junta de Andalucía considera insostenible: la tasa de paro del colectivo alcanza el 29,5%, lo que supone 11,6 puntos más que el desempleo general. En Andalucía viven 382.300 personas con discapacidad en edad laboral, el 6,8% de la fuerza de trabajo, pero todavía persisten graves desigualdades en la incorporación al mercado.
Tal es así que la consejera de Empleo, Rocío Blanco, poniendo de relieve la distancia entre el marco legal y su efectividad práctica: “La igualdad real está lejos de la igualdad formal que establece la normativa”. Por este motivo, el II Pepda quiere revertir esa brecha reforzando agilidad administrativa, automatización de trámites y una gestión que, según Blanco, ya permite resolver expedientes en 42 días, un plazo significativamente inferior al de ejercicios anteriores.
Todo ello está conformado en torno a un núcleo del plan que lo conforman seis líneas de subvenciones, que serán convocadas cada año con una dotación global de 440 millones de euros. Estas ayudas están orientadas a crear y mantener empleo indefinido en Centros Especiales de Empleo, reforzar unidades de apoyo, adaptar puestos y eliminar barreras arquitectónicas.
Del mismo modo recalcan que una parte importante del paquete está dirigida también al empleo en el mercado ordinario, ya que se ofrecerán incentivos económicos a las empresas que formalicen contratos indefinidos, favoreciendo así a la posibilidad de que todas estas personas tengan mayores facilidades para encontrar un hueco en el mercado laboral.
Por ello, de la mano de este movimiento, la Junta quiere impulsar la integración en entornos laborales no segregados, un objetivo considerado clave en la normalización del acceso al empleo. A estas medidas se añadirá una nueva línea de ayudas de 6 millones de euros para apoyar la inserción laboral de personas con especiales dificultades de acceso, mediante fórmulas de empleo con apoyo dentro de empresas ordinarias.
Un sistema que apuesta por la formación y la consolidación de empleo
Asimismo, el plan también impulsa la empleabilidad a través del Programa Emplea-T, dotado con 5,5 millones, que favorecerá la conversión de contratos de jornada parcial en completa en autónomos y pymes cuando se trate de trabajadores con discapacidad. La Junta considera que esta medida aumentará la estabilidad laboral y reducirá la dependencia de empleos precarios o de corta duración.
Además de todo ello, el Ejecutivo andaluz destinará 800.000 euros a la denominada Cuota Cero, una subvención que cubrirá gastos de cotización a la Seguridad Social durante 24 meses para autónomos con un grado de discapacidad igual o superior al 33%. Con este incentivo se pretende fomentar el emprendimiento inclusivo, una modalidad aún minoritaria dentro de este colectivo.
Por si todo esto no fuera suficiente, el Gobierno andaluz complementa el paquete de ayudas directas al empleo con un bloque de medidas orientadas a mejorar la capacitación laboral. Entre ellas destacan 1,14 millones de euros destinados a 30 acciones formativas de Formación Profesional para el Empleo, diseñadas específicamente para personas con discapacidad y con previsión de atender a 360 beneficiarios.
Otra herramienta clave será el Programa EPES, que permitirá la realización de prácticas profesionales en empresas para facilitar la transición al empleo. Asimismo, se reforzarán los proyectos integrales de orientación laboral y acompañamiento, y se desplegará en las oficinas del SAE un Sistema Tecnológico de Comunicación Inclusivo, pensado para mejorar la atención a personas con discapacidad auditiva.
Del mismo modo, el plan también prevé la elaboración de estudios estadísticos sobre empleo y discapacidad, un protocolo interdepartamental de coordinación, la creación del sistema NormaEmpleo, que unificará guías, normativas y herramientas de evaluación, y la implantación de un protocolo de atención especializado en las oficinas de empleo. La Red Andalucía Orienta también reforzará su oferta de servicios.
De este modo, el II Pepda forma parte de las actuaciones recogidas en el Pacto Económico y Social firmado el 13 de marzo de 2023 entre el Gobierno andaluz y los principales agentes sociales. Según la Junta, el proceso de elaboración ha sido “fruto de la participación activa” de once centros directivos de cinco consejerías, sindicatos como UGT-A y CCOO-A, la CEA, la FAMP y CERMI-Andalucía.
Con este plan, Andalucía aspira a convertirse en referente nacional en integración laboral, defendiendo que la diversidad es “fuente de enriquecimiento” tanto social como productivo. En palabras del Ejecutivo, la inversión de 547 millones no solo pretende reducir una brecha laboral, sino transformar un modelo de inclusión que todavía sigue siendo insuficiente para miles de personas en la comunidad.