Peste porcina: Gobierno aplaza las ayudas hasta que termine la epidemia

El Gobierno aplaza las compensaciones económicas mientras ganaderos y exportadores alertan del impacto creciente de la peste porcina en el sector porcino español

Moncloa opta por retrasar las ayudas directas en plena expansión de la peste porcina, generando inquietud entre productores, autonomías y mercados internacionales

Moncloa opta por retrasar las ayudas directas en plena expansión de la peste porcina, generando inquietud entre productores, autonomías y mercados internacionales

El Gobierno ha anunciado que retrasará el pago de ayudas directas a los ganaderos y empresas afectadas por la peste porcina africana (PPA) hasta que la situación epidemiológica esté “establecida y controlada” tal y como recogía VozPópuli. La decisión, la ratificaba la secretaria general de recursos agrarios y seguridad alimentaria, Ana Rodríguez Castaño. Esta nueva medida ha generado inquietud entre los sectores productivos, que ven peligrar su viabilidad económica ante la prolongación de la crisis sanitaria.

La peste porcina africana es una enfermedad altamente contagiosa entre los cerdos domésticos y jabalíes, aunque no representa riesgo para los seres humanos. A pesar de ello, su impacto económico se siente con fuerza en un sector que genera miles de empleos y exportaciones millonarias para España. Por tanto, esa ausencia de ayudas inmediatas del Gobierno para compensar pérdidas productivas, logísticas y comerciales ha provocado reacciones críticas, según El País, desde diversos ámbitos políticos y del propio sector agroalimentario.

Según las declaraciones oficiales, desde el Gobierno sostienen que no es el momento óptimo para calcular ni desembolsar ayudas “cuando la situación epidemiológica aún no se ha estabilizado”. Las autoridades, tal y como recogía Europa Press, señalaban que, solo una vez que la epidemia esté controlada, se evaluarán las necesidades económicas y se abordará un esquema de apoyo económico a los afectados. Esta postura ha sido interpretada por algunos productores, consultados por EFE, como una falta de apoyo directo en un momento en que los costes de producción siguen aumentando y las pérdidas ya son tangibles.

Reglas de exportación y mercados internacionales

Mientras se aplazan las ayudas, el Ejecutivo ha redoblado esfuerzos diplomáticos para mantener abiertos los mercados internacionales clave para las exportaciones de porcino español, como China, Japón, Corea del Sur, Filipinas y el Reino Unido. Desde el Gobierno, según VozPópuli, se busca asegurar que estos países respeten la regionalización y evitar cierres totales que podrían perjudicar al conjunto del sector español.

La preocupación por la peste porcina africana no se limita solo a España. Según indicaba El País, ya son varios países los que han impuesto restricciones comerciales tras la detección de casos positivos en jabalíes en Cataluña. Es el caso de Filipinas, que según Reuters, ha prohibido temporalmente la importación de carne de cerdo y productos porcinos españoles para evitar la entrada del virus. Estas medidas internacionales complican aún más la situación comercial del sector español.

Se elevan a 13 los casos positivos de jabalíes con peste porcina africana.
Se elevan a 13 los casos positivos de jabalíes con peste porcina africana.

El sector agrario, protesta

Asociaciones agrarias como Asaja, en declaraciones a Europa Press, han expresado su malestar por la decisión del Gobierno de retrasar las ayudas. Según recogía El Español, estos exigen apoyo inmediato para compensar las pérdidas derivadas de menores ventas, costes adicionales de bioseguridad y la caída de precios en algunas zonas. Para muchos ganaderos, el tiempo es esencial. Las pérdidas económicas se acumulan día a día mientras la peste porcina continúa siendo un riesgo latente en zonas como Cataluña del país.

Con el retraso de las ayudas estatales, algunas administraciones regionales han tomado sus propias iniciativas. Según la cadena de radio catalana, Rac1, el Govern declaró recientemente el estado de emergencia sanitaria para poder desplegar recursos y agilizar contrataciones que ayuden a contener la peste porcina en su territorio. Además, la Generalitat ha aprobado una línea de ayudas de 10 millones de euros, ampliable a otros 10 millones, para apoyar al sector en caso de que se detecten efectos económicos directos.

Otras comunidades como Extremadura, según Cadena Ser, también están adoptando medidas de prevención y control, como planes de caza de jabalíes o incentivos para su captura con el objetivo de reducir la densidad de estos animales silvestres y evitar que la epidemia se extienda más allá de las zonas ya afectadas.

Economía y empleo bajo presión

El sector porcino español es uno de los pilares de la agroindustria nacional, con miles de granjas y trabajadores implicados en toda la cadena de producción. La ausencia de ayudas rápidas podría poner en riesgo la estabilidad económica de muchas explotaciones, según El País. Además, instrumentos como los ERTE por fuerza mayor podrían usarse en las empresas vinculadas al sector si se ven directamente afectadas por la crisis sanitaria, aunque no hay indicios de que se hayan activado masivamente hasta la fecha.

Las medidas de contención, junto con la ampliación de zonas de restricción por parte de la UE, han generado inquietud en el sector exportador. La Unión Europea ha extendido la zona de restricción en Cataluña a decenas de municipios, tal y como indicaba Lavanguardia. Un paso que refuerza la vigilancia, pero también limita la libre comercialización de productos porcinos procedentes de dichas zonas.

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