Esto es lo que costarán los envíos de Shein, Temu y AliExpress con la nueva tasa que prepara Bruselas

Bruselas planea modernizar el sistema aduanero de la UE, con el objetivo de imponer una tasa fija a plataformas de comercio electrónico low cost

Logotipo de Shein. Foto Getty Images

Logotipo de Shein. Foto Getty Images

La Comisión Europea ha puesto sobre la mesa una propuesta para imponer una tasa fija de 2 euros a los paquetes de bajo coste que llegan al territorio comunitario desde terceros países. Esta tarifa se aplicaría a los pedidos cuyo valor no supere los 150 euros, y afectaría de lleno a los envíos procedentes de plataformas de comercio electrónico ultra low cost, principalmente de origen asiático.

Esta iniciativa, liderada por el comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, responde a un problema que las autoridades comunitarias consideran insostenible: el colapso de las aduanas ante el vertiginoso crecimiento del comercio electrónico barato, especialmente desde China. Por ello, estaría sería una medida que, a corto, medio y largo plazo, tendría un gran impacto sobre empresas como Shein, Temu o AliExpress.

La medida que propone Bruselas para modernizar el sistema aduanero, al descubierto

Según Bruselas, el objetivo no es únicamente desincentivar las compras compulsivas de artículos económicos, sino garantizar recursos para mantener y modernizar el sistema aduanero de la Unión Europea, cada vez más saturado. Una tasa que, además, generaría ingresos estimados en 3.000 millones de euros anuales, fondos que se destinarían íntegramente a mejorar la gestión aduanera y a dotar de mejores herramientas a los controles fronterizos.

Esta medida, en caso de finalmente llevarse a cabo, supondría el fin de una exención histórica que permitía a los paquetes de bajo coste acceder al mercado europeo sin pagar aranceles. Tal excepción había sido duramente criticada por generar un marco desigual para los comercios europeos, y por su impacto en la competitividad de las empresas locales, que deben asumir impuestos y controles mucho más estrictos.

Temu, Shein y AliExpress, en el punto de mira

Por otro lado, y aunque la Comisión evita mencionar directamente a empresas específicas, el grueso de los envíos de menos de 150 euros proviene de plataformas como Temu, Shein y AliExpress, lo que convierte a estos gigantes del comercio electrónico en los principales afectados. Según datos comunitarios, en 2024 se registraron más de 4.500 millones de productos de bajo coste importados, lo que supuso el doble que en el año anterior. De ese volumen, un abrumador 91% tenía su origen en China.

Y es que para estas compañías, la nueva tasa de 2 euros representa un reto logístico y comercial: o asumen el coste directamente o lo trasladan al consumidor, lo que podría hacer menos atractivas sus ofertas. Además, la medida podría provocar una ralentización en los envíos si el proceso aduanero no se digitaliza lo suficientemente rápido para afrontar el nuevo volumen de trabajo que conllevaría el control del cobro del arancel.

Sin embargo, la propuesta de este nuevo arancel no se trata de una medida aislada. Forma parte de un ambicioso paquete de reformas aduaneras que la Comisión lleva años perfilando, y que ahora empieza a tomar forma. Entre las propuestas adicionales se incluye la creación de una Autoridad Europea de Aduanas, un organismo supranacional que reemplazaría en parte las competencias nacionales actuales, buscando una gestión más uniforme y eficaz en todo el territorio comunitario.

Eso sí, es también importante remarcar que la aplicación efectiva de la tasa de 2 euros aún podría tardar. Su implementación está sujeta al desarrollo de un sistema digital de control aduanero capaz de registrar y verificar cada paquete entrante. «Estamos en el inicio del proceso», reconoció el propio Sefcovic ante el Parlamento Europeo, consciente de que aún queda camino por recorrer para transformar en realidad este nuevo marco normativo.

Si la medida se aprueba e implementa con éxito, podría suponer un antes y un después en la forma en que Europa gestiona su comercio exterior en la era digital. Mientras tanto, las grandes plataformas deberán prepararse para un nuevo escenario donde el precio dejará de ser su única ventaja competitiva.

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