Vegalsa-Eroski refuerza su compromiso contra el desperdicio alimentario y evita más de 4.500 toneladas entre febrero y julio de 2025
La compañía gallega demuestra en el Día del Desperdicio Alimentario que la distribución responsable es posible con su programa “Desarrollo Sostenible. Desperdicio Cero”, que ya ha salvado más de 42.000 toneladas de alimentos en los últimos seis años
Vegalsa-Eroski contra el desperdicio alimentario. Foto: Vegalsa

Vegalsa-Eroski ha evitado el desperdicio de 4.526 toneladas de alimentos en los primeros seis meses de su ejercicio en 2025 (febrero-julio), consolidando su compromiso en la lucha contra una de las mayores problemáticas sociales y medioambientales de nuestro tiempo. Con esta cifra, la compañía supera las 42.000 toneladas de alimentos aprovechados en los últimos seis años, un dato que refleja la solidez de su estrategia y el impacto positivo en las comunidades donde opera.
Desde hace más de una década, la distribuidora gallega impulsa el programa “Desarrollo Sostenible. Desperdicio Cero”, un plan transversal que involucra a toda la organización, desde las plataformas logísticas hasta los supermercados, y que se ha convertido en un referente de gestión eficiente en el sector. La firma demuestra en el Día Internacional de concienciación sobre la pérdida y el desperdicio de alimentos que la distribución responsable es posible.
Tres vías para salvar alimentos
El sistema implementado por Vegalsa-Eroski se basa en dar valor a cada excedente en función de su estado y utilidad. Así, en los primeros seis meses de su ejercicio:
- 182 toneladas de productos aptos para el consumo humano fueron donados a entidades sociales desde tiendas y plataformas logísticas.
- 2.680 toneladas se destinaron a promociones de consumo rápido, ofreciendo a los clientes productos de calidad a precios reducidos para evitar su pérdida.
- 1.578 toneladas fueron valorizadas en la industria transformadora, principalmente en la producción de piensos para alimentación animal.
Este enfoque garantiza que ningún alimento en buen estado se pierda innecesariamente, alineándose con los objetivos europeos de economía circular y consumo responsable.
Innovación y alianzas digitales
La lucha contra el desperdicio no se limita a los procesos internos. Vegalsa-Eroski colabora activamente con la app “Too Good To Go”, que permite a los consumidores adquirir packs sorpresa de alimentos próximos a su fecha de consumo preferente por un precio de 3,99 euros.
Gracias a esta alianza, en los primeros meses de 2025 se salvaron 86 toneladas de alimentos, equivalentes a más de 57.000 packs vendidos, evitando al mismo tiempo la emisión de 1.085 toneladas de CO₂ a la atmósfera. Una forma práctica de implicar a los clientes en la sostenibilidad, al tiempo que se generan hábitos de consumo más conscientes.
El compromiso de Vegalsa-Eroski con la economía circular no se limita al ámbito alimentario. Su programa incluye también la gestión responsable de otros residuos, ofreciendo a los clientes espacios para el reciclaje y promoviendo la reutilización.
En colaboración con entidades como Humana, Insertega, Arroupa y Cáritas Vigo, la empresa recoge textiles usados en sus tiendas para darles una segunda vida. Además, el plástico reciclado en su red de supermercados y en la plataforma logística de Sigüeiro se convierte en las bolsas corporativas que se ofrecen a los clientes en caja.
Otras iniciativas incluyen la valorización de aceite usado con fines sociales y el reciclaje de cápsulas de café en Asturias, gracias a acuerdos con Recinorte y Circularcaps. De este modo, la compañía avanza hacia un modelo integral de “Residuo Cero”.
Un compromiso certificado
Desde 2024, el programa “Desarrollo Sostenible. Desperdicio Cero” cuenta con la certificación Food Waste Management System de Bureau Veritas, lo que avala de manera independiente la seriedad y eficacia del modelo.
“Se trata de un programa transversal, que afecta a toda nuestra cadena de valor. Cada miembro de la compañía entiende la responsabilidad que tenemos y los beneficios que aportan estas medidas a nuestro entorno”, explica Ricardo Castro, gerente de Calidad de Vegalsa-Eroski.
Video de la certificación obtenida con Bureau Veritas por Vegalsa-Eroski
Esta visión compartida demuestra que la sostenibilidad no es un objetivo abstracto, sino un proyecto común que une a trabajadores, clientes y proveedores.
Impacto en la comunidad local
Vegalsa-Eroski no solo busca reducir su huella ambiental, sino también generar valor en las comunidades donde está presente. Las donaciones de alimentos a entidades del tercer sector fortalecen el tejido social y ofrecen apoyo directo a personas en situación de vulnerabilidad.
El programa combina así una dimensión medioambiental con otra social, garantizando que los productos en buen estado lleguen a quienes más los necesitan y contribuyendo a reducir la desigualdad.
La compañía cuenta actualmente con 289 establecimientos en Galicia, Asturias y Castilla y León, entre propios y franquiciados, bajo marcas como Eroski, Autoservicios Familia, Cash Record, Aliprox o Eroski Rapid. Esta amplia red facilita la puesta en marcha de proyectos de impacto, al tiempo que acerca la sostenibilidad al día a día de miles de familias.
La estructura comercial se apoya en modernas plataformas de logística (Sigüeiro), de logística para productos frescos (A Coruña) y de redistribución (Vigo y Ourense), todas equipadas con tecnología de última generación para garantizar la eficiencia en la gestión de mercancías y el control de excedentes.
Mirando hacia el futuro
Con estos avances, Vegalsa-Eroski se consolida como un referente en distribución alimentaria sostenible en el noroeste peninsular. La compañía demuestra que es posible combinar rentabilidad con responsabilidad social y ambiental.
El objetivo ahora es seguir ampliando el alcance del programa y reforzar la cultura de consumo responsable entre clientes y empleados, convencidos de que el cambio real hacia una sociedad sin desperdicio se construye con cada acción diaria.
Vegalsa-Eroski ha logrado transformar un reto global en una oportunidad de innovación y compromiso. Con más de 4.500 toneladas de alimentos salvados en solo medio año y un total de 42.000 toneladas en seis años, la compañía demuestra que la distribución moderna puede ser motor de cambio hacia un futuro más justo, eficiente y sostenible.
Su programa “Desarrollo Sostenible. Desperdicio Cero” es mucho más que una iniciativa corporativa: es un ejemplo de cómo las empresas pueden liderar soluciones reales a problemas globales como el desperdicio alimentario, generando beneficios para las personas, el planeta y la economía.