Los ciclos combinados, con Endesa y Naturgy en As Pontes y Sabón, producen más desde el gran apagón

Más de mes y medio después del gran apagón que llevó a la Península Ibérica a registrar un inédito cero energético, la ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, dio a conocer las primeras conclusiones sobre las causas del episodio: un problema “multifactorial” que implicó sobretensión, oscilaciones y desconexiones de centrales así como errores de planificación tanto por parte de Red Eléctrica como de las energéticas. Con muchas incógnitas aún sobre la mesa, 50 días después de la caída eléctrica, sí hay algo meridiano: la mayor producción de los ciclos combinados de gas natural, una situación que también se reproduce en Galicia, que cuenta con dos centrales, operadas por Endesa en As Pontes y por Naturgy en Sabón.

Que los ciclos combinados están produciendo más horas tras el apagón es algo que queda evidenciado en el último informe mensual de Enagás, el gestor de sistema gasista. En mayo, la demanda de gas para el sector eléctrico repuntó un 68,2% respecto al mismo mes del año anterior, hasta los 7.185 gigavatios horas (Gwh), mientras que la demanda convencional de gas retrocedió un 5,1%.

Óscar Barrero, socio responsable de Energía en PwC apuntaba estos días a la Agencia EFE que esto se debía a que tras el 28 de abril, el operador del sistema optó por incrementar sensiblemente la potencia síncrona en el sistema, para garantizar que no volviesen a producirse problemas en el suministro. Dicho aumento favoreció principalmente a los ciclos combinados, lo que hizo que aumentase, en consecuencia, la demanda de gas para producción eléctrica.

Mayor actividad ya antes del apagón

Es cierto que en los meses anteriores, el uso de gas con destino la producción eléctrica ya había aumentado, aunque no en el porcentaje del mes de mayo. Según los registros consultados por Economía Digital Galicia, en abril el avance fue de un 24,3% interanual mientras que en marzo fue del 12,2% y en febrero llegó al 47%. En enero, la demanda de gas natural con destino a la generación eléctrica tan solo se incrementó un 1,1%.

Las centrales de ciclo combinado, que utilizan gas y vapor de agua para funcionar, permiten garantizar el suministro eléctrico en momentos de alta demanda y baja producción de las energías renovables. Fue el fin del carbón y las planificaciones de cierre de algunas centrales nucleares las que derivaron en una mayor atención hacia estas instalaciones, a pesar de que la mayoría de las eléctricas ya han puesto fecha para el final de su vida útil, dentro de las políticas de reducción de emisiones y por el hecho de que, en los últimos años, su aportación de energía al sistema cayó debido al empuje de las renovables, mucho más baratas (quemar gas, implica antes comprarlo, siendo Estados Unidos el principal mercado de origen de las importaciones en España).

Las dos centrales gallegas

La comunidad gallega cuenta con dos centrales de ciclo combinado, que no han sido ajenas a los cambios en el mercado en los últimos meses. La más grande es la operada por Endesa en As Pontes, tiene una capacidad de 800 MW mientras que la de Sabón, en Arteixo, en manos de Naturgy, ronda los 400 MW.

Ni uno ni otro grupo han hecho declaraciones acerca de un aumento de la producción tras el apagón, no obstante, distintas fuentes consultadas por Economía Digital Galicia han confirmado que, efectivamente, la producción en el ciclo combinado de Arteixo se ha ampliado desde el apagón.

En As Pontes no se apreció una mayor actividad el pasado mayo tras el apagón, si bien distintas voces apuntaban a que, en su caso, las horas de conexión al sistema ya se habían incrementado en los meses anteriores.

Hay que tener en cuenta que, meses antes del apagón, en concreto en el mes de diciembre, los ciclos combinados ya fueron claves para evitar una situación de desequilibrio en el sistema. En su informa anual Enagás explicaba que entre el 8 y el 11 de diciembre se dio un periodo de baja generación eólica y solar “que fue cubierto en más de un 85% por los ciclos combinados”.

Con una mayor producción de los ciclos combinados en Galicia estos, al igual que los del resto de España, esperan ahora que el Ministerio para la Transición Ecológica siga adelante con la idea en su momento impulsada por Teresa Ribera de articular un sistema de subastas, organizadas en este caso por Red Eléctrica y supervisadas por Competencia, a la que podrían acudir los nuevos productores de energía, los almacenamientos, consumidores y nuevos agregadores para ofrecer su disponibilidad en momentos de estrés de sistema a cambio de una retribución. Las ayudas podrían ser claves para mantener unos ciclos combinados que, en muchos casos, aseguran, no son rentables debido a sus altos costes de mantenimiento. Los beneficiaría por el hecho de que no se pagaría por su energía, sino por su disponibilidad para producir.

Las incógnitas del informe

Al margen de las consecuencias del apagón –una de ellas esta revalorización de los ciclos combinados como garantes del sistema– sobre las causas aún queda mucho por escribir. Este martes, la ministra Aagesen indicó que el informe que trata de esclarecer el cero energético apunta a una mala programación por parte de Red Eléctrica de algunas centrales para controlar la tensión de la red al no cumplimiento de la normativa de algunas de estas instalaciones que no pudieron absorber esa sobretensión.

Aelec, la patronal de las empresas eléctricas, contestó en la tarde de este martes al Gobierno asegurando que tenía “evidencias” de que las centrales de generación de sus socios cumplieron con las regulaciones en materia de control de tensión. Las grandes eléctricas confirman haber cumplido los requerimientos regulatorios sobre control de tensión.

Destacan que el 28 de abril Red Eléctrica disponía de recursos suficientes para garantizar el control de tensión, «incluidas centrales síncronas que, no obstante, decidió no despachar».