Inditex pagó en alquileres a Amancio Ortega un 20% menos durante el Covid

Según las cuentas de Inditex remitidas a la CNMV, Pontegadea ingresó el pasado año 33 millones por arrendamiento de activos al grupo textil, frente a los 42 de 2019

Amancio Ortega

Amancio Ortega, fundador de Inditex

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Al margen de Inditex, otra de las grandes patas sobre las que se sostiene la fortuna de Amancio Ortega radica en sus inversiones inmobiliarias, que pilota a través del holding Pontegadea. Aunque el año de la irrupción de la pandemia del Covid frenó el habitual apetito por el ladrillo del hombre más rico de España, a finales de 2019, su cartera inmobiliaria superaba los 15.000 millones en propiedades. Se trata de activos que, en su mayoría, posteriormente alquila a grandes corporaciones. La fortuna Forbes ejerce de casero de gigantes como Amazon o Apple. También de la propia matriz de Zara.

No obstante, este último ejercicio, los pagos por alquiler que recibe del gigante textil del que, a la vez, es cofundador y máximo accionista, menguaron de forma notable. Así se recoge en su memoria anual, depositada recientemente ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Operaciones con accionistas significativos

El informe de gestión del ejercicio fiscal 2020-2021 revela, en el apartado de operaciones desarrolladas con accionistas significativos del grupo, que las sociedades Pontegadea Inversiones, Partler Participaciones y Partler 2016 recibieron casi 33 millones de euros por “arrendamiento de activos”. La cantidad es inferior a la que habitualmente venían percibiendo estas filiales del holding de Ortega. De hecho, en 2019, año previo al estallido de la pandemia, la cantidad aportada por Inditex fue de 42 millones. Esto se traduce en que, durante el ejercicio del Covid, la cotizada pagó a Ortega un 21% menos por alquileres.

En la memoria de Inditex también figura un pago de un millón de euros a Rosp Corunna Participaciones Empresariales, el vehículo inversor de Sandra Ortega, por el mismo concepto.

Renegociaciones

Aunque no se aclare en la memoria del grupo, la bajada de la aportación a Ortega podría estar relacionada con el hecho de que la textil llevó a cabo renegociaciones de sus contratos de alquiler a causa de la pandemia. También lo hizo, por otro lado, Pontegadea.

En 2019, Pontegadea ingresó más de 400 millones de euros derivados solo de rentas de sus inversiones inmobiliarias. En la última memoria presentada ante el Registro Mercantil, la sociedad ya deslizaba la posibilidad de que algunos de los inquilinos solicitasen una renegociación de contrato debido a los confinamientos que trajo la pandemia del coronavirus.

Inditex: variedad de contratos

Lo cierto es que Inditex, que gestiona más de 7.000 contratos de arrendamiento según sus propios datos, es especialmente heterogénea en lo que a alquileres se refiere. “Las cláusulas pactadas dependen en gran medida del mercado, de la cadena, del arrendador, de la localización concreta, de si son locales de centro comercial o de calle”, aclaran los administradores de la firma en su informe de gestión consolidado.

En el citado documento también se destaca que la multinacional contabiliza “incentivos por arrendamiento”, en los que se recogen “importes recibidos de los arrendadores promotores de centros comerciales o propietarios de locales como contraprestación para entrar en un contrato de arrendamiento”. Estos se corresponden fundamentalmente con partidas para acondicionar los establecimientos para su puesta en funcionamiento, las llamadas “aportaciones de obra”.

Antes de la aparición del coronavirus, entre distintos conceptos, Inditex abonaba alrededor de 2.400 millones anuales en alquileres. Este 2020, el grupo presidido por Pablo Isla habría registrado pagos de arrendamiento de renta fija por valor de 1.673 millones de euros, frente a los 1.836 millones contabilizados doce meses antes.

Pero, además, hay que tener en cuenta que algunos de los arrendamientos de locales comerciales del grupo contienen “condiciones de pago de renta variable”, que dependen de las ventas generadas en esos establecimientos, de tal forma que el pago por arrendamiento está “vinculado al desarrollo de la tienda”. Indican los administradores de la compañía que “los pagos por renta variable en estas tiendas ascendieron a 225 millones de euros en 2020, 479 en 2019”.

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