La planta de hidrógeno de Naturgy, Reganosa y Repsol en Cerceda, más cerca

Nueva vida en Cerceda. Naturgy ha realizado este martes la voladura de la caldera de su antigua térmica en Meirama dentro del proceso para derribar lo que quedaba de las instalaciones. Fue sobre las 13,00 horas cuando, en apenas unos segundos y en base a un protocolo de emergencias previamente establecido, en el que figuraba el desalojo de varias viviendas y corte de la carretera, la infraestructura se vino abajo.

El desmantelamiento de la térmica deja paso a unas nuevas instalaciones alineadas con el compromiso de la transición energética. En ese mismo suelo se levantará la iniciativa H2 Meirama que proyecta Naturgy con la participación de Repsol y Reganosa, utilizando parte de las instalaciones existentes.  

El proyecto, declarado el pasado julio proyecto industrial estratégico, supondrá una inversión de 64 millones de euros, y contará, en una primera fase, con una potencia inicial de 30 megavatios (MW), lo que permitirá obtener una producción de 4.500 toneladas al año de hidrógeno renovable. Además, permitirá crear en esta fase inicial unos 400 puestos de trabajo

Según las estimaciones del proyecto, la planta será ampliada en dos fases posteriores hasta alcanzar una potencia de 50 y 200 MW respectivamente. La planta producirá más de 4.000 toneladas de hidrógeno renovable al año en su primera fase y el objetivo es que llegue a alcanzar una producción total de 30.000 toneladas anuales.

Proyecto industrial estratégico

Con la declaración de proyecto industrial estratégico el Ejecutivo gallego pretende ayudar a una zona afectada por la llegada de la transición energética e impulsar el desarrollo de la cadena de valor de este vector energético con el que la comunidad busca posicionarse como referente internacional. 

La iniciativa se suma a las declaraciones como proyecto industrial estratégico de H2Pole para producir hidrógeno verde impulsado por Reganosa y EDP en As Pontes, la fábrica de neumáticos de Sentury Tire en el mismo concello, la planta de Metanol verde de Forestal del Atlántico en Mugardos, la fábrica de fibras textiles de Altri en Palas de Rei, el proyecto de biofibras recicladas de Ence en As Pontes o la planta de manipulación y envasado de pescado  de Stolt Sea Farm en Rianxo. 

Desmantelamiento de la térmica

El proyecto de desmantelamiento de la central térmica fue presentado en junio de 2019 ante el Ministerio de Transición Ecológica y se optó por una demolición selectiva, «que permite rentabilizar en lo posible los materiales susceptibles de reciclaje y genera un menor impacto ambiental que el que produce una demolición convencional».

En marzo del año pasado la localidad del concello coruñés se despedía de la chimenea de la antigua central térmica de Naturgy fue derribada tras más de 40 años de existencia. La chimenea, de hormigón armado, tenía un volumen 50.868 metros cúbicos, un peso estimado de 8.983 toneladas y una altura de 200 metros. La instalación tenía un diámetro en rasante de 18,29 metros y un diámetro en coronación de 11,08 metros.