Escotet, contra el impuesto a la banca: “No tiene nada positivo y esperamos que no se apruebe”

Escotet, contra el impuesto a la banca: “No tiene nada positivo y esperamos que no se apruebe”

Francisco Botas, Juan Carlos Escotet y Alberto de Francisco Guisasola

Abanca, la entidad de Juan Carlos Escotet, cerró el segundo trimestre del año con un crecimiento de un beneficio de más de 14%

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Abanca ha cerrado el primer semestre con 104 millones de beneficio, un 14% más, pero con preocupación. El anuncio de un nuevo gravamen a la banca por parte del Gobierno no gustó en la entidad financiera, que pone en duda tanto su confección como los efectos que tendrá en el crédito y, en consecuencia, el impacto sobre familias y empresas. “Son noticias en pleno desarrollo, así que hay que tomarlo con prudencia hasta que haya una aprobación. Pero, sinceramente, esperamos que no resulte aprobado en el trámite parlamentario”, apuntó Juan Carlos Escotet.

El presidente de la entidad hizo una analogía con la crisis financiera y explicó que, entonces, el cortocircuito del crédito provocó “una gran mortalidad para el sector privado, desaparición de empresas y destrucción de empleo”. “La diferencia de la crisis del Covid ha sido que ha habido abundancia de crédito y se pudo atender a moratorias, plazos y facilidades. Eso hizo una enorme diferencia ya que hemos salvado una enorme cantidad de empleo”, expuso.

Escotet discrepa en fondo y forma con los planes de Pedro Sánchez. “Tendría unas consecuencias en el crédito y eso es profundamente dañino para todos los sectores de la sociedad y también para los bancos, que nos interesa mantener nuestros niveles de intermediación elevados. Pero si lo que se pretende es combatir los efectos de la inflación por las teóricas ganancias extraordinarias que tendríamos, nos estamos anticipando mucho porque los tipos de interés no han subido lo suficiente. Hay una subida progresiva , no una subida radical de tipos”.

Posible inconstitucionalidad

Además, expone el banquero, si se quieren gravar beneficios extraordinarios tendría que hacerse sobre el aumento de esas ganancias y no aplicarse con retroactividad, “lo que es constitucionalmente cuestionable”. “Estamos hablando de aplicarlo sobre el margen financiero neto cuando tendría que ser sobre el aumento del margen financiero”, expuso.
Escotet insistió en que hay serias dudas sobre que pueda aplicarse, pero dejó la posibilidad de una acción judicial contra el impuesto, si finalmente se aprueba, en manos de las patronales del sector.

“Es muy probable que aplicando un impuesto de ese tenor no haya resultados positivos en algunas entidades porque los costes de operación no se descuentan de ese beneficio extraordinario”, apuntó.

¿Por qué a unos sectores sí y a otros no?

“Lo vemos con mucha preocupación”, continuó el presidente de Abanca. “Es difícil de entender que a unos sectores se les aplique y a otros no; y a unos bancos sí y a otros no. Esperemos que no se apruebe”, insistió.

También advirtió Escotet de las dificultades para la aplicación de la prestación pública patrimonial y de la pérdida de competitividad que representará par los bancos españoles. “Este tipo de medidas no se están aplicando en otros países, por lo que habrá un agravio comparativo a la banca española frente a los competidores europeos. Eso los inversores lo tendrán en cuenta. Creo que el impuesto no tiene nada positivo y no cumple con los criterios para los que fue diseñado”, concluyó.

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