Entra en insolvencia la empresa que García Martín creó tras comprar Feca Neón y pujar por Sanbrandán

Feca-Neón Reformas y Servicios, empresa creada por Carlos García Martín hace casi dos años, ha sido declarada en insolvencia

Carlos García Martín y Carlos Orozco en rueda de prensa / EDG

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Crisis en la empresa coruñesa Feca-Neón. El Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) ha recogido en su edición del martes la declaración de Feca-Neón Reformas y Servicios en situación de insolvencia con carácter provisional.

Se trata de la sociedad que el empresario Carlos García Martín constituyó en noviembre de 2019 y que asienta su base de operaciones en Meicende (Arteixo). Su creación se produjo apenas dos meses después de que Carlos García Martín y su socio, Carlos Orozco, sellasen la compra de Feca-Neón.

La insolvencia en Feca-Neón Reformas y Servicios supone el último traspiés para García Martín. Tanto el dueño de Feca-Neón como su socio fueron detenidos e imputados por un supuesto delito de estafa a otros dos empresarios. A él le pidieron un adelanto de dinero para formalizar la creación de una empresa especializada en la lucha contra el Covid-19. Esta se dedicaría “a la fabricación y distribución de un arco nebulizante que utilizaría un producto desinfectante del que los perjudicados serían sus distribuidores exclusivos”, según la Policía Nacional.

Frente a esta versión, García Martín acusó en una rueda de prensa en A Coruña a los otros dos empresarios de deberles dinero. “Gastamos 20.000 euros de nuestra parte. Son ellos los que nos deben dinero”, recalcó el empresario, que aseguró que sus potenciales socios rompieron el principio de acuerdo tras decir que el nebulizador no se podía comercializar para, posteriormente, llevar la causa a los tribunales.

De Sanbrandán a Isidro 1952

La detención se produjo después de que García Martín protagonizase otra polémica en el Puerto de Combarro. El empresario fue denunciado por apropiación indebida, coacción a los trabajadores y allanamiento de locales tras intentar reventar las cerraduras después de que los dueños del puerto rompiesen el acuerdo ante el presunto incumplimiento de pagos.

La compra frustrada del Puerto de Combarro se suma al también intento fallido de hacerse con Ipasa (dueña de Sanbrandán), Isidro 1952 (ahora en liquidación) o El Correo Gallego.

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