Bank of America: “La versión Trump 2.0 es más ideológica y defiende que el déficit público es descomunal”
El director gerente de Bank of America, Francisco Blanch, señala que para hacer frente al "talón de aquiles energético" en Europa se debe aumentar la capacidad de almacenamiento
Una sucursal de Bank of America. Foto: Bank of America.
El director gerente de Bank of America, Francisco Blanch, ha comparado los dos mandatos del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. «La versión 2.0 es más ideológica y está centrada en defender que el déficit público es descomunal y se debe rebajar de alguna forma», ha hecho hincapié durante su intervención en la Reunió del Cercle d’Economia.
A lo largo de una mesa redonda que ha llevado por título ‘Perspectivas de la economía global: visiones desde Europa y Estados Unidos’, ha explicado que la clave del éxito estadounidense en comparación con la economía europea es el capital, el talento y la productividad, si bien ha reconocido que también ha creado «debilidades».
Talón de Aquiles energético
El ejecutivo también ha puesto el foco sobre la energía y el rearme europeo. «Para rearmar la industria europea es necesario mucha energía y metal, pero Europa se está poniendo trabas a sí misma, tiene que organizar su propia estructura militar», ha señalado para después poner como ejemplo la decisión de no comprar energía a Rusia a raíz de la invasión de Ucrania.
A su parecer, el territorio comunitario debe enfrentar tres problemáticas en materia energética: los elevados precios, la volatilidad y la seguridad. La receta para combatir el «talón de aquiles energético» en lugar de tratar de reducir el consumo, debería pasar por aumentar la capacidad de almacenamiento, ha hecho hincapié.
Impacto de la tensión arancelaria
Por su parte, el exgobernador del Banco de España y próximo director del Banco de Pagaos Internacionales, Pablo Hernández de Cos, ha lamentado la escalada arancelaria propulsada por las políticas comerciales impulsadas desde la administración encabezada por Donald Trump. «Lo único cierto es que ha generado una elevada incertidumbre, no es positivo desde ningún punto de vista, no solo para el crecimiento económico», ha aseverado.
Después de hacer referencia a la desregulación, ha defendido que la regulación internacional del sector bancario es la adecuada para que todas las jurisdicciones la apliquen. «La desregulación en el sector financiero podría generar un crecimiento económico a corto plazo y dar acceso a una financiación más sencilla, pero representaría la semilla de una crisis financiera en el futuro», ha advertido.
De Cos ha señalado que tras las elecciones en Estados Unidos, se ha dado lugar a un contexto de «potencial desglobalización», lo que implica una pérdida en términos de crecimiento y de la productividad, «uno de los grandes lastres de la economía europea». Ante este escenario, ha indicado que una forma de compensar sería la «integración europea», puesto que existe margen para aumentar el comercio intraeuropeo.
A pesar de apostar por el comercio dentro de sus fronteras, la Unión Europea «no puede ni debe renunciar» al multilateralismo y a la globalización comercial», ha señalado para después añadir que la UE debería impulsar políticas que requieren una mayor inversión de forma conjunta, al ser bienes públicos europeos.
Tras ser preguntado acerca de la posibilidad que el dólar deje de ser la moneda de reserva, ha reconocido que es difícil. «Veo complicado que el mercado confíe en el euro como sustituto del dólar, ha señalado y ha remarcado que el escenario actual es de «impass» a la espera de vislumbrar el impacto que la política estadounidense pueda generar.
«Un activo seguro europeo de financiación conjunto podría ayudar a que el euro se convirtiera en un activo de reserva, con todos los beneficios que tiene esto para la economía», ha destacado para acabar subrayando la importancia de avanzar en la creación de una unión bancaria completa y de una unión de capitales.