La defensa de Quim Torra pide la suspensión del juicio

La defensa de Torra intento que se suspendiese el juicio con el argumento de que no se han citado a los miembros de la Junta Electoral Central

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La defensa de Quim Torra pidió la suspensión del juicio del lazo amarillo porque no se han citado como testigos a los miembros de la Junta Electoral Central (JEC) tal como reclamaron.

Al iniciarse el juicio contra Torra en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), la abogada de la defensa insistió en que no se puede celebrar el juicio sin la declaración de los miembros de la Junta Electoral Central (JEC) que le acusaron por mantener el lazo amarillo en el balcón de la Generalitat.

La abogada de Torra argumentó que los miembros de la JEC intervinieron como denunciantes pese a que no tenían las competencias correspondientes. Señaló que algunos de ellos emitieron opiniones políticas sobre el asunto de este juicio. Insistió en que esto supone una falta de imparcialidad. Además consideró que el juzgado competente no es el TSJC sino el Tribunal Supremo.

Por estos motivos, la defensa solicitó la nulidad de todas las actuaciones por “falta de imparcialidad”, incluso por parte del presidente de tribunal, Jesús Maria Barrientos. Le recriminó que él mismo resolviese sobre la impugnación que le presentaron por supuesta parcialidad. “No tenemos ninguna confianza en que el tribunal sea imparcial”, recalcó.

Dudas sobre los miembros del tribunal

Insistieron en que los magistrados Jesús María Barrientos y Mercedes Armas intervinieron en la instrucción. Entiende que ahora no pueden estar sentado en el tribunal que juzga a Torra. Dirigiéndose a Barrientos, la abogada le espetó “pero si usted se ha manifestado públicamente en contra de los lazos amarillos”.

Añadió que Ciudadanos, el partido que denunció a Torra ante la fiscalía, ya lo condenó en sus declaraciones a los medios. Mantuvo que no se ha respetado la presunción de inocencia de Torra ni el derecho a un juicio justo.

También reclamó que se expulsase a la acusación popular que ejerce Vox.

La fiscalía desechó los argumentos de la defensa de Torra para que se suspendiese el juicio. El fiscal Francisco Bañeres argumentó que no hay motivos de supuesta falta de imparcialidad ni tampoco para recusar a los jueces que presiden el tribunal.

Los antecedentes

Torra estuvo jugando al gato y al ratón con la Junta Electoral Central. El 11 de marzo pasado, la JEC ordenó que retirara todos los lazos amarillos de los edificios de la Generalitat en un plazo de 48 horas. La orden se argumentó en la necesidad de mantener la neutralidad política durante la campaña electoral.

El presidente de la Generalitat alegó en dos ocasiones contra la orden de la JEC pese a que era firme. El 18 de marzo, la Junta Electoral reiteró la orden con la advertencia de que, si no la cumplía, incurriría en responsabilidades administrativas y penales por desobediencia.

Finalmente, el 21 de marzo, la JEC ordenó al consejero de Interior que mandase a los Mossos a retirarla. No hizo falta. Se retiró la pancarta, aunque Torra intentó colocar otra con un lazo blanco. Finalmente también desistió de esta treta.

Torra llegó al Palacio de Justicia acompañado por su esposa y sus tres hijos. Allí se encontró con el vicepresidente de su gobierno, Pere Aragonès, y con el presidente del parlamento catalán, Roger Torrent. También estaban diversos consejeros y dirigentes de organizaciones independentistas como Òmnium Cultural y la Asamblea Nacional Catalana.

A través de las redes sociales, Carles Puigdemont también animó a su sucesor. “¡Todo el apoyo, presidente!”.

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