España, a un paso de comprar trenes chinos: Óscar Puente dinamita el debate ferroviario
El ministro argumenta que la urgencia operativa prima sobre proteccionismos, similar a cómo Italia evalúa Hitachi para su red
Archivo – Uno de los trenes AVE en una estación española
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha anunciado su intención de viajar a China para explorar la adquisición de trenes de alta velocidad que operen a 350 km/h, en respuesta al crecimiento de la demanda de pasajeros en la red española.
Durante su intervención en la feria Rail Live 2025 en Ifema Madrid, Puente confirmó que Adif ha contactado con fabricantes chinos como CRRC, el mayor productor mundial de trenes, para evaluar opciones que complementen la flota actual de Renfe.
Esta apertura llega tras la mayor compra de la historia de Renfe (500 trenes adjudicados en 2024 a Siemens, Alstom y Talgo), que ya comienzan a llegar, pero que el Gobierno considera insuficiente para absorber el incremento de viajeros en rutas clave como Madrid-Barcelona.
Puente también visitará Italia para ver propuestas de Hitachi, en un proceso similar a los realizados con Siemens e Hitachi en Alemania, priorizando capacidad y velocidad para licitaciones en 2026.
La decisión pretende buscar solución a la saturación de la AVE, donde la ocupación media supera el 80% en 2025, con picos del 95% en corredores principales, según datos de Renfe.
El ministro ratificó el compromiso con la Alta Velocidad a 350 km/h, buscando soluciones rápidas y competitivas en un mercado global donde CRRC produce hasta un 40% más barato que competidores europeos.
Competencia china frente a la industria ferroviaria europea
CRRC, con una facturación de 29.000 millones de euros anuales (72% superior a Alstom), representa una amenaza y oportunidad para España. Aunque no tiene productos homologados en la UE, el gigante chino ha ganado contratos en Rumanía (recauchutado por Alstom/Siemens) y compite en Egipto, México y Arabia Saudí con Talgo y CAF.
El titular de transportes ve en CRRC una vía para renovar flota obsoleta y aumentar capacidad, pero genera alarma en la industria nacional, que teme dumping y pérdida de empleo en fábricas como las de Talgo en Reynosa o CAF en Beasain
La UE impone controles estrictos para concursos superiores a 250 millones de euros, exigiendo homologación ETCS y cumplimiento de estándares europeos, lo que retrasa la entrada china pero no la impide.
Adif ya firmó en 2024 un protocolo de colaboración con ferrocarriles chinos, renovando el de 2018 para formación y tecnología, señalando interés previo.
Fabricantes europeos como Siemens (Velaro) y Alstom (TGV) dominan el 70% del mercado AVE español, pero su fusión fallida en 2019 buscaba precisamente contrarrestar a CRRC
Renfe planea licitar en 2026 no solo reposiciones, sino incremento de capacidad, con énfasis en rutas transfronterizas y cabotaje interno, abriendo la segunda ola de liberalización tras cercanías y media distancia
La posible compra china acelera la modernización de la red, la más extensa de Europa con 3.973 km de AVE en 2025, pero plantea retos industriales.
Talgo y CAF suministraron el 60% de la flota actual, generando miles de empleos directos, mientras CRRC ofrece precios hasta 40% inferiores gracias a economías de escala y subsidios estatales.
El ministro argumenta que la urgencia operativa prima sobre proteccionismos, similar a cómo Italia evalúa Hitachi para su red.
Adif invierte 72 millones en modernizar Centros de Regulación de Circulación (CRC) con CTC avanzado, asegurando compatibilidad con nueva flota, incluyendo líneas como Plasencia-Cáceres-Badajoz. La DGT 3.0 y sistemas ETCS facilitan integración de trenes foráneos, pero exigen pruebas rigurosas